Harry y Hermione veían preocupados a Ron al ver como este estaba sentado en una pequeña silla alado de la puerta principal del gran salón, pacientemente esperando a su novio.
— Les dije que su pareja lo dejaría plantado.— les dice Fred y George asiente de acuerdo, viendolo fijamente, ellos sólo habían ido por la comida ya que no le interesaba bailar con ninguna chica, era más divertido estar el uno con el otro.
— No sean así. Quizas solo se ha atrasado.— dice Hermione tratando, apoyando a la pareja secreta de su amigo a pesar de que no tenía idea de quién fuera.
— Deberías ir con Viktor.— dice Harry a su lado.
— Y tu debiste haber invitado a Ginny.— reprocha Hermione, aún no creyendo que no invitará a la pelirroja.
— Sabes que ella no me gusta, no se por que insistes con eso.— no era su culpa no sentir nada por ella, ya que, le interesaba más cierto profesor de pociones.
— Ya nos estamos desviando del tema.— les dice George.
Harry se acerca a Ron seguido de Hermione, dejando a los gemelos solos.
— ¿Estas bien, Ron?.— pregunta Hermione, sentandose alado de Ron quien solo le sonríe sin mostrar los dientes, algo cabizbajo.
— Si, Mione. Ya veras que llegara pronto. Vayan a divertirse con sus parejas.
Fue extraño para Harry y Hermione que Ron no quisiera llamar la atención. Normalmente él era el que más sobresalia de entre ellos cuando no había ningún juego de Quidditch o en alguna clase, ya sea haciendo bromas con los gemelos, o hablando con cualquier persona al azar.
— No se preocupen, enserio. Estare bien.
La música romántica comienza a sonar por lo que Harry y Hermione, algo inseguros viendo a Ron, se levantan para ir por sus acompañantes de esa noche.
Ron solo les sonríe y mira a cada uno de sus amigos. Como Viktor le tiende la mano a Hermione invitándola a bailar, o como Harry iba por su pareja mientras Fred y George, los cuáles habían mostrado una cara de desagrado cuando la música había comenzado a sonar, se habían acercado a la mesa de comida.
Fuertes pisadas en la entrada del salón llaman la atención de algunos estudiantes, contando a Ron, quien se levanta de aquella silla y se acerca por detrás. Aquel chico había entrado de forma apresurada acomodandose su camisa blanca.
— Hey.— le dice a modo de saludó, el rubio voltea a verlo.
— Siento llegar tarde...— no es que lo hubiera hecho aproposito, pero su padre lo tenía de un lado a otro con el tema de los mortífagos aún cuando el realmente no quería tener la marca.
— Esta bien.— le interrumpe Ron, sonriéndole cálidamente que Draco siente un vuelco en el corazón al recordar lo que pasaría después.
— ¿Quieres bailar?.— pregunta Draco, tendiendole la mano para que Ron la tomara.
El pelirojo asiente y toma la mano, por lo que Draco lo lleva hasta la pista.
El rubio toma a Ron de la cintura y este pasa sus brazos alrededor de su cuello.
El pelirojo no mentiría, estaba nervioso por lo que dirían sus amigos y su familia, no tenían buena relación con los Slytherins y mucho menos con Draco, quien desde siempre había sido enemigo de Harry y había insultado en más de una ocasión a Hermione.
Pero, simplemente el año pasado, ambos habían terminado en la enfermería, Ron con su pierna rota y Draco con su herida superficial y nada mortal. El rubio sintió pena por Ron y vergüenza de si mismo al crear tanto drama por nada, cuando el pelirojo estaba mucho peor que él y no trataba de llamar la atención. Por lo que, Draco inicio una conversación con el afán de que el pelirojo olvidará por momentos su dolor de pierna.
Desde entonces, ambos se veían a media noche en la Torre de Astronomía o en cualquier lugar lo suficientemente escondido para que nadie los encontrará por algunas horas, a excepción de Harry, pero al parecer el no usaba el Mapa del Merodeador.
Ron despegaba cada dos por tres la vista de los ojos de Draco, no sentía que pudiera mantenerla y se avergonzaba, lo que le sacaba una sonrisa tierna a Draco.
Cuando Ron levanta la mirada, ve por detrás del hombro del rubio a los gemelos viéndolo fijamente, luego ambos levantan las manos y hacen una exclamación con sus bocas antes de comenzar a pelear por un pedazo de comida.
— ¿Por qué tan nervioso?.— le pregunta Draco en un susurro, muy cerca de sus labios.
— No, no es nada.— Ron recarga su cabeza en el hombro y parte del pecho de Draco, haciendo que mire hacía un lado.
Ron vio como a Harry y Hermione parecía no molestarle que estuviera bailando con Malfoy, e incluso le sonreían felizmente, ahora si podía respirar tranquilo. Aunque Harry tenía una media sonrisa, ya estaba planeando como asesinar al rubio por salir con su mejor amigo.
La mayoría los veía con ternura mientras que la minoria con algo de asco. Pero era algo a lo Draco y Ron no les interesaba. Era común la relación entre chicos, en especial si alguno era un mago fértil, cosa que Ron era.
La canción ya estaba por terminar, y Draco se separa levemente de Ron, tomándolo ahora de las mejillas para así darle un beso, largo y tierno.
La canción ya había terminado y siente como es abrazado de los hombros.
— Jamás imaginamos que tú novio fuera una serpiente, Ron.— le dice Fred.— Soy Fred, gusto en conocerte.— exagera y George claramente le sigue la corriente.
— Soy George.
— Si, si, si. Cómo sea.
Ambos abren la boca ofendidos.— Que formas de hablar con tus cuñados.
— Ya no te ayudaremos a ganarte a mamá.
Harry y Hermione se acercan con Viktor Krum, siguiendo a Mione.
— Vaya, Malfoy. No sabía que tuvieras corazón y en especial, sentimientos.
— Ja, ja, ja. Que gracioso Potter.— Draco le hace una sonrisa demasiado falsa mientras toma a Ron de la mano y su otra mano la mete a su bolsillo delantero.— Estoy dispuesto a tolerarte, Potter. No hagas que me arrepienta.
Harry asiente, pensando lo mismo.
— Pues, ¡Felicidades, chicos!.— felicita Hermione abrazando a Ron, lo que provoca una mueca en Draco y Viktor.
Esa era una de las mejores noches de la vida de Ron y Draco, aunque rápidamente el sentimiento se volvió amargado ante la muerde de Cedric Diggory, y próximamente los ataques de los Mortífagos.
Pero, habían logrado superar todo eso, y ahora ambos estaban a la espera de su primer hijo.
La guerra había terminado, Lord Voldemort por fin había sido derrotado, pero eso conllevó a perdidas familiares, pero por suerte, tanto la familia de Ron como los Malfoy estaban completos, al igual que Sirius y Remus, quien ya dió a luz a su primer hijo, Teddy Black.
Hermione termino con Viktor y comenzó a salir con Ginny y Severus por fin le dió una oportunidad a Harry.
Las cosas no pudieron haber estado mejor.
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Este ya estaba anteriormente publicado como libro propio pero decidí borrarlo y ponerlo aquí.