Vida Nueva

Nuevas Caras, Nuevas Facciones

(a la mañana siguiente, Renja POV)

Vaya noche de mierda, esas....cosas, fuera lo que fuera aun puedo sentirlas moverse dentro de mi, se que no son parasitarias, de ser así lo más probable es que no pudiera pensar bien, carajo, no debería estar vivo siquiera pero aun así.....

Aun así, no se que mierda son, solo se que estan conmigo, o son yo, o yo soy ellos, ya ni se como pensarlo, y lo que es peor responden a mi, hasta cierto punto.

-Deja de andar por las nubes Renja, el desayuno ya esta servido-la voz de Hakurei me saco de mi ensueño y la encontré mirándome tanto con duda como con incertidumbre, tratando de descifrar en que estaba mi cabeza tan metida, solo la mire unos instantes y suspiré internamente. Esto es mi problema, estoy agradecido con su hospitalidad y todo pero dudo que pueda ayudarme en esto. 

-Gracias pero no tengo hambre-le dije mientras me levantaba de mi lugar en la pared a la par que tomaba mi rifle y lo cargaba al hombro luego de una revisión rápida, espero que el viejo Kirisame tenga algo para mi así me distraigo; tengo miedo de volver a sentir como se mueven en mi carne y huesos, eso....eso no era normal, el dolor y al mismo tiempo, la adrenalina, la intoxicación, la necesidad de algo, algo primitivo y animal en lo más profundo...yo.....yo no se si pueda seguir quedandome aqui.

Comencé a caminar fuera del templo ignorando la mirada de la matriarca Yakumo en mi persona. 

-¿Eso tiene algo que ver con la forma en la que te retorcias anoche en agonía y tratabas de gritar ahogadamente?-me detuve en seco y miré de reojo a la doncella del santuario.

-...........-no dije nada y ella tampoco, estaba esperando.

-Fufufufu-ignore la molestia al escuchar a Yukari reír y el sonido de su abanico abrirse para cubrir su cara.

-Yo..... *suspiro* no es nada, me voy, tengo trabajo-con eso dicho me retire del santuario para ir en dirección al pueblo.

(en el templo, salón principal, Normal POV)

-¿Hay algo que deba saber Yukari sobre nuestro nuevo invitado?-le dedico una mirada acerada a la dama de las brechas.

-No se a que te refieres querida Reimu, Renja es solo otro gaijin aquí en Gensokyo, nada más, nada menos-le dedico su sonrisa marca registrada.

-Tch, claro, porque esa sed de sangre aunque efímera no vino de el ¿No es así?-Reimu puede dejar pasar cosas, en especial las idioteces de Yukari pero hay momentos en que no lo permite, sin importar su lugar como sabia de Gensokyo y guardiana de sus límites.

-........-Parece que Yakumo entendió que no debía jugar con la doncella, al menos en este punto.

-El es.....tu viste lo que paso la noche en que llego, el no es humano-empezó la rubia.

-Tampoco es un Youkai, no siento nada de magia en él-le siguió la morena para ambas quedar sumidas en un silencio, cada una en sus propios pensamientos como deducciones.

Luego de unos minutos sin haber tocado su desayuno Reimu tomó de nuevo la palabra.

-¿Que es el?-le pregunto al fin ya que no tenía ni idea de lo que es Sutorenjā, lo poco que vio, lo poco que noto que podía hacer su.....carne por llamarlo de algún modo no era un buen augurio, de hecho a pesar de ser un mal pensamiento, por no decir nefasto estaba agradecida de que su estado amnésico, ¿Si era algo/alguien malvado? algo incluso peor que muchos youkais que devoran a los humanos usando la laguna en las reglas de las spell card, además noto que eso era su estado debilitado.

¿Cómo sería al 100% de su poder? Si no es un youkai entonces los sellos y rituales no servirán en el, teniendo en cuenta ese factor de regeneración solo le espera una batalla de desgaste y nada le dice que no pueda o tenga tecnicas de largo alcance o que pueda seguirle en el aire si llegan a luchar.