Renacer
Y otra vez el dolor, mi pecho quemaba como si cien fósforos se posarán en el, luego toda la llama se extendía por mi cuerpo haciéndome creer que en cualquier momento me convertiría en ceniza haciéndome desear que la muerte llegará rápido para acabar este sufrimiento, pero ¿no estaba muerta ya? Sin embargo, aun sentía dolor ¿no que después de la muerte el dolor se iba? Mi cabeza palpitaba, sentía que en cualquier momento iba a explotar y ni hablar de mi vientre, sentía como si me estuvieran apuñalado constantemente con cuchillos.
“Dios mío sé que merezco estar en el infierno pero salvame de este sufrimiento por favor” pensé, más bién suplique, rogue y todos los sínonimos que se les ocurriera
Después de unos minutos pude agudizar mi oído y los murmullos que antes me parecía oir ahora eran palabras que podía comprender.
-Dios salva su pobre alma de esta monstruosidad, si está en tus planes no la dejes ir tan pronto. No la culpes a ella por le decisión que tomó es culpa de nosotros por no cuidarla como se debe, así que te lo ruego, te lo imploró por favor déjala volver, déjala que vuelva con nosotros y así poder arreglar el problema que no supimos controlar desde un principio - la señora pedía con voz temblorosa, de vez en cuando sorbia su nariz haciéndome entender que estuvo llorando
Ahora, ahora todo era más claro, recuerdo haberle escrito esa carta a mi mamá mientras lloraba y haberla dejado encima de mi escritorio, recuerdo haber rezado y haber pedido perdón por el "pecado" que iba a cometer.
“Dios mío, ten misericordia de mi alma y disculpame por lo que voy a hacer, pero simplemente no soy tan fuerte para seguir en este mundo de miserias”
Yo no había matado a alguien, yo me suicide, la sangre que recordaba antes era mi sangre.
Abri mis ojos lentamente y tome la mano de mi mamá, la cual me miro sorprendida.
-No quería hacerte llorar mamá - susurre
Fin.
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Bohemian Rhapsody
Teen FictionAl morir tienes tres opciones: el purgatorio, el infierno o el cielo. ¿Me creerías si te dijera que yo fui a los tres?