BEN 10: Alien Force La Reimaginación

2 - El alien que vino de Viscocia

Ben y los demás caminaban tratando de evitar a los animales y cosas típicas de una gruta en el desierto; lagartijas, plantas secas y mucha arena, aunque está vez había un par de cosas peculiares en la receta, habia casi una docena de plomeros y un auto volcado, además de una enorme nave parcialmente enterrada, con un símbolo que ninguno de los chicos iba a olvidar nunca, aquel reloj de arena verde.

—Pff... la última vez que descubrimos una nave así, desatamos el campamento de verano más extraño...— dijo Cooper incrédulo

—Mierda, vamos a acabar con esto de una vez— Ben simplemente avanzó hacia la nave con cierta molestia, patentado una roca, la cual fue girando hasta tocar la bota de uno de los plomeros, pero no cualquier plomero, el magistrado Max, su abuelo

—Lo veo y no lo creó... Ben...— el brillo en los ojos del abuelo Max, el cual se incremento, e incluso dejaron salir una pequeña lágrima acompañada de una sonrisa —hijo... cuánto extrañaba verte aquí...

—Que hay abuelo, nada que un buen secuestro pueda solucionar para tenerme aquí de nuevo, al menos solo por esta vez— Ben extendió los brazos y abrazo con fuerza a su abuelo, pues aunque no hacía mucho tiempo de haberlo visto, si tenía ya varios años de no estar en una misma misión —Asi que... ¿La nave?

—O si, si, la nave; cayó aquí hace cinco años ¿Notas algo familiar?— el abuelo Max saco una pequeña placa que generó un holograma verde, del cual salió un modelo de está nave, dandoselo a Ben, para así abrazar a Gwen, Kevin y Cooper

—Déjame adivinar, diez aliens, que escaparon y aterrorizan al pueblo...— inicio Kevin, mientras miraba la nave —¡Wow! Ese es un gran agujero... ¿Qué clase de ataque causo eso?

—No fue un disparo, fue un alien, un vaxasauriano para ser específicos— declaro Max, mientras señalaba el contorno de la nave

—¿Un alien de ese tamaño? Vamos a necesitar una bala del tamaño de mi cabeza...— decía Gwen mientras se asomaba al interior de la nave

—Coop, hagamos esto rápido, ven conmigo— ordenó Ben, caminando ambos hacia un tubo de alcantarilla enorme que sufría una especie de fuga, pues a pesar de ser un enorme tubo, este parecía haberse derretido en cierta parte, lo suficiente para que alguien entrara

—¿Crees que algo entro por aquí?— Cooper iluminó con su linterna, mientras miraba a Ben, esperando la respuesta

—Seria tonto pensar que no, mira— Ben tomo una especie de baba verde del borde de aquel hueco, pero este pronto le ardió y sacudió la mano para quitárselo —Me lleva, esa mierda me ardió...

—Jeje... que opinas ¿Xenomorfo?

—Por nuestra suerte, espero que no— Ben dio un brinco y de un salpicón de aguas negras que le llegó hasta poco más arriba del talón, entro al caño

—¿Es enserio? ¿Al caño? ¿Ahora?

—¿Miedo de una exploración urbana Coop? El tipo de la niña fantasma fue en Rusia... creó...— afirmó Ben, mientras de adentraba poco a poco, girandose al oír el chacoteo del agua cuando Cooper entro

—Pff espero que lo valga, Ben— Cooper solo desenfundo un arma laser de bolsillo y avanzó entre las aguas negras

—A Lucy le va a encantar saber que su tecnopatico novio entro a explorar los caños en busca de aliens— Ben solo soltó una pequeña risa y continúo caminando

—¿Que hiciste para traerlo?— el abuelo Max caminaba entre plomeros, el abuelo tenía con el una enorme sonrisa, una que incluso sus nietos no habían visto hace años ya; todo esto mientras era seguido por Kevin y Gwen