Bienvenida al infierno

Problemas en tortuga's town

Entonces un chico se acerca a mí, sacándome de mis pensamientos.

-¿ese asiento está libre?

-¿este?-dije señalando el que estaba a mi lado.

-Sí, ¿está ocupado?

-No, ¿por?

-¿Puedo sentarme?

-... Sólo si me prometes que no vas a abrir el pico.

-bueno... supongo que no te agrada mi compañía.

-No es que no me agrade, es que si tú te estuvieras quemando y yo tuviera agua, me la bebería.

-Jajajaaja, me caes bastante bien “chica”.

-Se nota que aún no me conoces “chico”.

-Puedes llamarme Austin.

-A mí no.

-¿A ti no? ¿Que?

-Que a mí no me puedes llamar Austin, mi nombre es Natalia.

-Encantado Natalia. -Dice a la vez que se sienta a mi lado

colocando su mochila en el respaldo de la silla.

-¿No vas a hablar?

-Sí eso es lo que tengo que hacer para estar sentado a tu lado pues... no, no voy a hablar.-dice sonriendo, con una sonrisa que hacía que los cacos se me cayeran solos.

-Bueno, tú sabrás.

Mientras yo continúo mirando por la ventana sin ganas de estudiar. De repente suena una de mis canciones favoritas y sin ser consciente de mis actos, comienzo a cantar.

-Cause he's only nice, when there's somebody there, I’m going to kill my boyfriend, Kill, Kill, Kill, I’m going to, kill kill kill...

-¡Natalia!- me llama Austin.

*me quito los cascos y le miro*

Él está señalando a delante, así que miro y veo a… mi profesor. –Mierda… -Susurro-

-¿no le interesa la clase de hoy, señorita?- dijo el cara tortuga.