Coffee l Emiliaco

Bebés

Capitulo dedicado a ElizabethFlores696

- Hola Susi.- la secretaria pega un brinco.- Perdón no quería espantarte.

- No se preocupe señor, ¿Qué necesita? 

- Quería ver si esta el jefe, necesito darle unos papeles. 

- Deja checo, dame un momento.- asiento únicamente con la cabeza y ella habla en el teléfono. 

Hace unos días entre en una empresa a trabajar, podríamos sobrevivir perfectamente bien con la heladería pero Joaquín y yo estuvimos de acuerdo que no queremos trabajar únicamente en una heladería. Es un sueño cumplido tenerla, si, pero trabajar en ella no es lo que queremos. Así que tenemos un administrador que se encarga de todo y nosotros supervisamos y damos autorizaciones. 

- Pase señor. 

- Gracias.

Camino hasta la puerta de la oficina y lo primero que veo es un montón de juguetes tirados por todos lados, cobijas, mamilas y se escucha el llanto de un bebé. 

- Una disculpa Emilio,- miro a mi jefe.- mi esposa tuvo que hacer unas cosas importantes y me pidió que lo cuidara. 

- No se preocupe señor, yo solo venia a que checara estos papeles.- le extiendo el sobre. 

- Puedes dejarlo en la mesa, no tengo como agarrarlo.-  con una mano sostenía al bebé que le jalaba el cabello y con la otra una mamila. 

- Pero necesito que los revise ahora, hay cuentas que no cuadran y necesito checar esa información. Sólo le tomara dos minutos jefe. 

- Creo que necesito una niñera por dos minutos.- se queja cuando el niño le jala el cabello. 

- ¿Su esposa estaría de acuerdo?- el niega rápidamente mientras trata de hacer que su hijo suelte su cabello. 

- Para nada, le hice la propuesta hace unas semanas y casi muero, pero en esta ocasión es necesaria. 

- Si, bueno yo por ninguna razón le llevaría la contra a mi Omega.- me encojo de hombros.

- Tienes razón, no es buena opción, puedes sostenerlo un momento.- me extiende al niño y trago saliva duramente. 

- Claro.- digo nervioso.

Tomo al niño por la cintura con ambas manos, es un bebé, uno de verdad que se puede caer y lastimar, uno que grita y llora, uno que necesita comida y atención. Es un bebé y no se siente igual a los que tenía Romina cuando era niña, tampoco puedo tirarlo o siquiera pensar soltarlo. 

Con los nervios en punta pego al niño a mi pecho para mantenerlo más seguro o quizá es porque siempre hacen eso los padres, el niño recarga su cabeza en mi hombro y deja de moverse. Noto que tiene un olor muy suave, pero adorable. Su cuerpo es tan delgado y frágil que te dan ganas de abrazarlo todo el tiempo. 

El bebé mantiene sus ojos abiertos que están un poco rojos por el llanto, su boca esta entreabierta y con su mano trata de tocar mis chinos. Se estira un poco hasta que alcanza un mechón y juega con el. Se ríe y se nota muy emocionado. 

- ¿Eres padre?- despego la vista del bebé. 

- No, mi Omega y yo no tenemos mucho de conocernos y aún no hablamos de eso. 

- Mm- asiente- ¿Te gustaría serlo?- suspiro, nunca había pensado eso.

- Si, creo.- él me mira levantando una ceja.- Es que nunca lo había pensado, estoy muy concentrado en mi Omega y nuestra relación que no sé si un bebé es buena idea en estos momentos, pero en un futuro algo lejano me gustaría. 

- Es muy lindo la verdad. 

- Me imagino, aunque igual no creo que tengamos la madurez suficiente para tener un bebé, mi novio tiene apenas 18 años, casi 19. 

- Bueno si es muy joven, pero como dices, en un futuro. 

- Claro.- miro al niño en mis brazos tocando mi cabello.- ¿Cómo se llama?

- Charles. 

- Que bonito nombre.- le sonrió al niño y me jala uno de mis chinos. 

&

- Joaquín necesitamos hablar.- entró a la oficina que compartimos en la heladería. 

Bueno, realmente no la ocupamos mucho, como cada uno tiene un trabajo fuera de nuestro negocio casi no estamos aquí, pero igual en algunas ocasiones revisamos que todo este en orden. 

- ¿De qué?- separa su vista de los papeles sobre la mesa.

- Bebés. 

DOBLE ACTUALIZACIÓN.

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