Perrito

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Dedicado a SaraJulianaTavares gracias por la ayuda en las demás historias y por la sugerencia del perrito. Es por ello que te dedico este capítulo. Y a esas personitas que quieren que le dedique un capítulo solo tienen que dejar un comentario de lo que les gustaría en una mini historia.

Después de planear esa sorpresa durante días y que Pancho la aprobara, había llegado el día en que Ari le daría ese hermoso regalo a su novio Temo.

Iba camino a su casa con una caja de regalo, era un poco grande, tenía una enorme sonrisa en su rostro y más porque ya quería ver la expresión de su novio. Era demasiado temprano, Temo probablemente seguiría dormido así que sería perfecto para la ocasión. Llegó a la casa y tocó el timbre.

-Que onda Aristofanes- lo saludó Pancho al abrir-. El Temo sigue dormido, pasa.
-Gracias Pancho, espero que le guste la sorpresa- dijo Ari.
-Sé que le gustará, hasta con eso te va a amar más de lo que ya lo hace.

Ari se sonrojó por aquellas palabras de su suegro y al no querer esperar más subió al cuarto de su amado, trató de no hacer mucho ruido ya que Susana y los niños aun dormían. Incluso cuando Temo dormía para Ari seguía siendo hermoso ya que le encantaba ver su cabello despeinado, sus pestañas revoloteando y su boquita entreabierta. Era muy lindo.

Se acercó a su cama para colocar la caja a un lado de él para que fuera lo primero en ver al despertar.

-Tahi, despierta- lo movía-. Arriba flojito.
-Dejame dormir Ari, aun es temprano- murmuró Temo aun dormido y despertó de golpe-. ¡¿Ari?!
-¿Dime, chiquito?
-¿Qué haces aquí tan temprano?
-Pues además de venir a ver a mi lindo novio, le traje un regalo.

Temo giró su cabeza al lado opuesto de donde estaba acostado y vio la caja, se sentó para poder abrirla.

-¿Qué es Tahi?- preguntó Temo con curiosidad.
-¡Abrelo amor!- dijo Ari ya emocionado por ver su reacción.

Temo quitó la tapa de la caja y al ver el contenido sintió como si su corazón se detuviera en cualquier momento, tenía ganas de llorar. Ari sonreía al ver su reacción ya que era muy tierno.

-¿Qué es Tahi?- le decía Ari ya que Temo no decía nada.
-No es cierto Tahi- dijo Temo dibujando una sonrisa con sus ojitos aun cristalizados-. ¿Es una broma?
-No chiquito, es un regalo para ti.

Temo abrazó a Ari y él correspondió al abrazo mientras le daba besos en su cabecita. El regalo de Temo era un perrito, o mejor dicho perrita.

-No inventes Tahi, ¡está hermoso!- dijo Temo emocionado y sacando a la criatura de la caja para abrazarla

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-No inventes Tahi, ¡está hermoso!- dijo Temo emocionado y sacando a la criatura de la caja para abrazarla.
-Es perrita, Tahi- corrigió Ari.
-Hola chiquita. Pero ¿cómo?
-¿Te acuerdas de los perritos que vimos cuando fuimos al cine?

Flashback
Ari y Temo habían salido del cine, como era muy temprano quisieron dar un paseo por el centro cuando afuera de una veterinaria vieron una caja en la que tenían cachorros de diferentes razas que estaban dando en adopción.

-¡Mira Tahi, son hermosos!- dijo Temo emocionado.
-Si Tahi, son muy lindos- dijo Ari abrazándolo por atrás.

Ari sonreía al ver lo encantado que estaba su novio con los perritos. En sus ojos notaba la gran ilusión de tener un perrito ya que eran los animales favoritos de Temo.
Fin del flashback

-Entonces al ver la gran ilusión que tenías de tener uno fui a adoptar para darte la sorpresa- dijo Ari acariciando a la perrita-. Y esta pequeñita se acercó a mí, no me pude resistir a su tierna carita que fue la elegida en venir a casa.
-Ven aquí guapo, te acabas de ganar todos los besos del mundo- dijo Temo.

Se acostaron sobre la cama para besarse, solo teniendo cuidado de no aplastar a la cachorra. Pancho tenía razón, Temo amaba mucho a Ari cada día más.

-Te amo Tahi- dijo Temo sin alejar sus rostros después de que se besaron y sonreía.
-Yo te amo mucho más mi Temo- dijo Ari sonriendo-. ¿Y cómo se llamará esta pequeña?
-Pues es muy espojosita, apapachable y tierna, digo que le queda el nombre de Espumita.
-Es perfecto para ella.

Los Aristemos disfrutaron un rato jugando con su cachorra y como aun era muy temprano decidieron dormir otro rato con ella en medio. Parecían una familia.

Aristemo- One shotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora