Daddy; karmaland

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...porque esa fue una de las mejores decisiones de mi vida.

*

—Alex, despierta. Ya se está haciendo tarde

El menor se despertó con la bulla del exterior y con la voz de Samuel.

—Buenos días- dijo el policía con su voz de sueño y soltando un bostezo

—¿Cómo amaneciste?

—Bien, porque estoy contigo- el pequeño sé lanzó encima del mayor para darle cariño.

Eso se había vuelto casi una rutina en los últimos 3 meses.

No eran todos los días, pero desde que oficializaron su relación, la mayoría de estos pasaban el tiempo juntos y haciendo cualquier cosa, ya sea cuando salían o cuando se quedaban uno en la casa del otro. 

Los dos chicos se alistaron y bajaron a desayunar. Después 

—No se me ocurre que puedo comer- el mayor comenzó a revisar las estanterías 

—Puedes comerme a mi

—Ay Alex, cállate- dijo el mayor con un leve sonrojo en la cara

—Cállame~

*

El día siguiente iba a ser un día importante. Sería su aniversario de 3 meses desde la segunda vez en la que se confesaron sus sentimientos. 

—¿Mañana quieres hacer algo especial?

—Claro que si

—¿Tienes alguna idea de lo que quieres, o...?

—Si, quiero un picnic

Como todos sabían, Samuel era un amante del orden y Alex no tuvo ni que  pedírselo, ya que se ofreció a hacer todo.

—Yo me encargo de esto, quiero consentirte yo a ti

—Bueno, Bueno- rió- ya me tengo que ir, ¿Mañana pasas por mi o...?

—Sí- interrumpió- pasó por ti, ¿A las 2pm te parece bien?

—Me parece perfecto- le dió un par de besos en la mejilla- adiós~

A De Luque le gustaba su forma de ser, como un ser embobado sonrió y luego volvió a entra a su casa.

*

—Mira- el petizo salió de detrás del biombo y dió una vuelta- ¿Cómo me veo?

Su outfit del día era algo suelto, una camisa, una falda, zapatos para la ocasión. Parecía que ya tenía todo listo, pero en realidad pasó toda la noche anterior decidiendo que iba a ponerse.

—Bello es una palabra corta para ti, ¿Acaso no ves que cuando caminas, desfilas?- le dirigió una mirada al menor, y vio cómo sus mejillas empezaban a tornarse rosadas- miremos el cielo hasta que se ponga lila~

—Calla tonto- el menor le tiró una de sus prendas encima para que no pudiera ver el sonrojo que se iba formando en su cara

—¿Y qué pasó? Lo que pasó es que usted me enamoró

—Deja las palabras cursis para más tarde, ahora vamos a hacer el picnic- dijo, cambiando de tema- que siempre he querido hacer uno y es mucho mejor con una persona especial