Príncipe✔

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Las chicas venían a mi todo el tiempo, era poderoso, guapo,  un adonis  apuntó de recibir la corona para ser rey de toda Irlanda.
__(TN)__ una plebeya que trabaja haciendo la comida en esta casa ya me la eh querido tirar varias veces pero no se deja y eso me prende mas; últimamente eh gastado mi tiempo en cortejarla pero no se deja, acaso no soy lo suficiente guapo, atractivo para ella y que soy el príncipe de Irlanda o simplemente se está haciendo la difícil.
Era una noche tranquila, serena, la luna daba a mi cuarto, las estrellas brillaban a todo su alrededor.
A  __(TN)__ le tocaba traeme de cenar al cuarto y como lo se porque yo lo ordene, estoy acostado en mi cama sin camiseta con unos pantalones holgados rojos de seda.
En la puerta se escuchan dos golpes y eso bastó para saber que era ella — Adelante — hable, ella vestía un bonito vestido blanco hasta los pies, le cambiaré ese uniforme sólo a ella, paso dirigiéndose a mí, me senté bien en la cama y ella coloco la mesita en mi con  un postre, vaso de leche y  una hamburguesa.

— No te vayas, quedate acompañame a cenar— le dige señalando una parte de la cama

— Disculpe señor tengo otras cosas que hacer— se dirigió a la puerta

— Acaso no acompañarás a el príncipe a comer cuando te lo ha pedido — chantaje moviendo la cabeza con negatividad

— A terminado mi turno — seguía en la misma posición, no me miraba

— Hací es como tratas al príncipe— chasque la lengua en desagrado, quitando lo que tenía enfrenté puse la comida en la mesita, me paré y por instinto la tome de la cintura, se puso tensa, recargue mi cabeza en su hombre—Eres desobediente

—Señor...a terminado mi horario — quiso librarse de mi agarre con eso pero no lo logro

—Quedate a dormir en mi cama — solté con una risa
Pude sentir como a __(TN)__ se le salieron los ojos

— Señor ¿Usted esta loco?— solto de repente

— Loco por ti— me sorprendí por mis palabras pero no me molestaron la cargue y la  avente a la cama

Ella me miró confundida como si no creyera lo que pasaba.
Quizas...y hasta la volvía princesa, no lose pero eso eso me cruzó la cabeza y lo confirme cuando probé sus labios.

¡IMAGINAS! NIALL HORAN Y TÚ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora