«LIZZU; SE MONSTA X» #4

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Lizzu entró corriendo al estudio, sobresaltando a los presentes ahí, y poniendo una sonrisa en Hoseok al pensar que al fin sus horarios coincidirían. Los ignoró a todos de manera extraña para abalanzarse sobre la hoja que estaba expuesta lista para recibir un título y convertirse en la canción principal del álbum. Nadie sabía que pasaba.

— No lo vi antes, claro – negó con la cabeza, borrando algo con rapidez y cogiendo el lápiz que Jooheon la ofrecía con curiosidad, atento como todos–. Copia... Hoy no...

Escribió algo con rapidez, sorprendiendo a todos, y sopló para quitar los restos de goma de borrar y apreciar la hoja.

— ¿Qué haces, Lizzu? – preguntó Yoon–. Deberías estar en Highlight ahora mismo.

Ella negó, y puso la hoja donde estaba antes.

— Find You – señaló el papel–. Se llamará así, y no será la canción principal del álbum – negó con firmeza–. La canción principal será la que Jooheon oppa tiene en el cajón lista para ser revelada.

— ¿Te refieres a Follow?– frunció el ceño con extrañeza, hoy Junhee estaba extraña y alterada, nunca solía entrar de esa manera a los sitios–. ¿Deberíamos?

Miró a todos mientras sacaba el papel, y se le extendió a Yoon, la única de los productores que quedaba en el estudio a esa hora. Leyó por encima, y asintió.

— Debemos.

Lizzu se dejó caer en el sofá riendo.

— Menos mal – suspiró de alivio–. ¿Recordáis la letra de Find You? – carraspeo relajada–. Uno de los últimos versos era la letra de Second Life, de SEVENTEEN. Esa misma tarde había estado en Pledis y la melodía se me pegó – explicó, incorporándose para pasar de estar desparramada por el sofá a apoyarse en el hombro de Changkyun–. ¿Alguien tiene algo que hacer esta noche? Hay que revisar las letras y melodías de todas las canciones no reveladas.

— ¡¿Todas?! – exclamó alterado Jooheon–. ¡Podríamos estar horas!

Ella asintió, dejando ver que estaba plenamente al tanto de ello, y algo culpable de haber ofrecido eso.

— No os preocupéis, puedo quedarme yo, es una locura que vosotros tengáis que pagar por mi poca profesionalidad y errores tan graves – se levantó, haciendo crujir sus rodillas en el proceso, y se sentó en la silla que la correspondía, comenzando a sacar papeles de los cajones, y endiendo el portátil y ordenador principal–. ¿Podéis decirle a Hyungwon oppa que hoy si se va a poder comer mi porción?

— Serán dos entonces – dijo Changkyun yendo hacia su posición, listo para leer todas y cada una de las letras, pero recibió un manotazo.

— Nadie se va a quedar aquí, mucho menos tú – regañó –. Iros o mañana no hago la comida.