Chapter Seven

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chapter seven: la osadía de los mortales
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Hella había despertado mucho antes que los demás, observó en silencio como el sol se alzaba y cerró los ojos apareciendo en su habitación en la casa de dioses.

-Te estaba esperando, ¿cada vez que yazcas con Ragnar vendrás a verme?-

-Frey...-

-Sabes que me duele, lo sabes perfectamente, no puedo seguir anclado a ti, no me perteneces.-

-No pertenezco a nadie, pensé que estaba claro.-

Frey y Hella se miraron unos segundos que parecieron eternos para ellos. Siempre hacían eso, decirse todo sin hablar, para que Odín no pudiera castigarlos, sin palabras no hay hechos.

-Deberías irte, tu Conde va a despertar.-Dijo el rubio.

-Frey, por favor, sabes que esta no es mi elección.-

-Claro que lo es, lo has elegido, lo elegiste aquella noche.-

-Sí, y a ti te elegí nada más verte, ¿lo recuerdas verdad?-

Frey la miró, sabía que debía alejarse, sabía que Hella no estaba hecha para él, que pertenecía a ese estúpido mortal.

-Algún día, cuando todos mueran, serás mía.-

-Sí, lo seré.-

Hella sonrió antes de unir sus labios, Frey suspiró, amaba a esa mujer.

Kattegat volvió a aparecer frente a sus ojos, la diosa bufó resguardándose en la manta de piel gris, miró a su derecha sorprendida al ver a Rollo observándola.

-¿Puedo ayudarte?-Preguntó la rubia alzando una de sus cejas.

-Solo me preguntaba si lo que dice mi hermano es cierto.-

-Lo es, puedes preguntarle a Lagertha si quieres, tengo entendido que te fías más de ella.-

Hella se levantó, Rollo frunció el ceño avanzando hacia la chica, se inclinó y tomó su brazo apretándolo, para así evitar que se fuera.

-No soy mi hermano, yo podría matarte.-

-Me gustaría que lo intentaras, oso, acabaré contigo hasta con los ojos cerrados. Me encantaría rajarte ese cuello de lado a lado y descubrir de qué color es tu sangre.-Dijo la rubia sonriendo cínicamente.

Hella se soltó de un movimiento y caminó hacia la puerta del gran salón.

-No lo olvides Rollo, soy hija de Odín, y tú eres un mortal irrelevante a los ojos de nuestro padre.-

Rollo sintió su orgullo ser herido, y más aún cuando esa cría se fue dejándolo solo en la fría mañana. Hella atravesó el pasillo hasta la habitación de Ragnar, al entrar lo vio sentado en la cama mirando el fuego.

-Me preguntaba dónde estabas.-Dijo el rubio sonriendo.

-Necesitaba un poco de aire.-

𝐈𝐍𝐄𝐅𝐀𝐁𝐋𝐄; 𝐕𝐈𝐊𝐈𝐍𝐆𝐒Donde viven las historias. Descúbrelo ahora