El dios de la guerra Wei wuxian | Wangxian 戰神

🍃Capitulo tres: La despedida.

Como Wei wuxian había dicho lo llevo a una zona apartada más arriba en las montañas, Lan wangji estaba algo mareado por altura cosa que nunca tuvo problema con eso, pero desde que bajo al mundo humano se empezó a sentir así tal vez los efectos secundario todavía seguía en el o eso quería creer, Wei wuxian quien se dio cuenta de su situación paro por un momento.

-Lan zhan ¿estás bien?- le pregunto y este se sorprendió por como lo llamo, Wei ying se dio cuenta.

-Estoy binen solo un poco mareado, eso es todo- exclamo reincorporándose.

-Oh ya veo...ah si quieres puedes llamarme Wei ying es mi nombre de nacimiento, así esteremos a manos ¿qué tal?- dijo este con una sonrisa que hizo que el corazón de Lan wangji latiera como loco, una vez más se sentía de esa manera.

-....-

-Bueno tomare eso como un si ahora sigamos- exclamo poniéndose en marcha.

-¿Todavía falta?- pregunto siguiéndole el paso.

-Solo un poco más- y así caminaron por unos minutos más y llegaron a su destino, Lan wangji abrió muy grande sus ojos al ver el hermoso paisaje que tenía ante sus ojos dorados, se podía ver todo el pueblo y más allá de este, era increíble mente hermoso.

-Y te gusta, este es mi lugar secreto- dijo este guiñándole un ojo, este lo miro serio pero por dentro era todo un lio con solo mirarlo podía contemplar su belleza, la brisa hacia que el cabello de wei wuxian se moviera de un lado a otro como si estuviera bailando, no podía apartar la mirada.

-.....-

-Pasa algo ¿te encuentras bien?- pregunto Wei wuxian la verlo desconcertado, este reacciono.

-No nada, el paisaje es muy bonito- respondió y este sonrió.

-Oh conque el paisaje jeje- exclamo, Lan wangji estaba algo confundido, así que lo miro como si le estuviera preguntando con su mirada.

-Ah no es nada no te preocupes- dijo sacudiendo sus manos -Ahora que lo pienso eres la primera persona que traigo a este lugar- comento tomando asiento en la gramilla.

-Ya veo- exclamo.

-Woo no eres de charlar mucho ¿verdad?.

-Mm- respondió este sonrió.

-Creo que ya deberíamos regresar o tu hermano estará preocupado después de todo salimos a la madrugada JAJA- decía Wei wuxian poniéndose de pie cuando de pronto Wei wuxian tropezó y estaba a punto de tocar el suelo pero unos firmes brazos lo sostuvieron y cuando abríos sus ojos se encontró con aquellos ojos dorados intenso, sus miradas se conectaron ninguno de los dos la aparo, era como si el tiempo se hubiera detenido, todo era tan tranquilo. Wei wuxian podía aspirar de cerca aquel olor que le llamo la atención desde que lo conoció, ese olor a sándalo que penetraba un olor peculiar o por lo menos en esa región, entonces se escuchó las campanas del pueblo y los dos reaccionaron reincorporándose.

-Cof cof- tosió de lado -Bueno ya se nos hizo tarde jeje volamos- ahora si el ambiente se había puesto incomodo entre los dos, Wei wuxian quería que lo tragara la tierra en ese momento y lo que más le frustraba era que al parecer era el único que se sentía tan incómodo y nervioso ya que su contrario estaba serio y inexpresivo como siempre, pero lo que este no sabía era que bajo toda esa seriedad había alguien que estaba muy nervioso por lo que acaba de sentir, su corazón no dejaba de latir por horas, ¿acaso eso era normal? ¿Estaba enfermo?

Los dos regresaron a la cabaña, pero a pasos de llegar vieron de lejos a tres personas raras o eso parecían de lejos entonces los dos apuraron sus pasos para ver como Wen qing, Wen ning y Lan xichen estaban hablando con esos tres hombres que para la sorpresa de Lan wangji los conocía.