L'Obssesion de la Mort.

Dix-Sept

Mis ojos se abrieron de golpe y al encontrarme en una habitación con demasiada luz una dolorosa clavada atacó mi cabeza haciéndome cerrar los ojos enseguida y quejarme mientras cubría mis ojos con ambas manos.

Puto dolor.

-Al fin despiertas, llegué a pensar que te había matado- abri nuevamente mis ojos de golpe y me senté con tanta rapidez que un fuerte mareo me destabilizó.

-Mierda-susurré aferrándome a las cobijas de la cama.

Sentí un par de brazos tomarme la cintura evitando que me cayera de golpe de la cama.

Mi corazón estaba latiendo deprisa, era su voz, era él quien me estaba tocando, no podía ver su rostro debido al repentino mareo, pero sentía el cosquilleo en las zonas en donde me tocaba, cosquilleo que sólo él lograba hacerme sentir.

-Bonjour-lo oio susurrar tan cerca de mi rostro que nuevamente me obligué a abrí los ojos por más que mi cabeza doliera,lo miré.

Su rostro estaba a escasos centímetros del mio, sus ojos oscuros analizando cada uno de los detalles de mi rostro, sus labios con las comisuras levemente alzadas, casi formando una sonrisa, su piel lucía tan suave que se me hizo imposible no alzar la mano y colocarla sobre su mejilla, estaba frío y sentí un leve cosquilleo en la palma de mi mano.

Sus ojos ojos se tornaron repentinamente de un extraño color gris y antes de que pudiera alejar mi mano él me soltó arrojandome de golpe sobre la cama.

Dio dos pasos atrás y noté sus ojos volver a la normalidad sentí un escalofrío recorrer mi cuerpo cuando su mirada volvió a encontrarse con la mía,esta vez me miraba de forma diferente.

-Sé que tienes muchas preguntas pero aún no voy a responder ninguna de ellas-su mirada se dirigió a un espejo que cubría gran parte de una de las paredes de la habitación, fue entonces que comencé a mirar a mi alrededor estamos en una extraña habitación de paredes grises, una pared tenía un gran ventanal,las cortinas eran rojas, los muebles que decoraban eran negros al igual que las sábanas de la cama en dónde me encontraba.

Lentamente me senté en la cama deseando no volver a marearme, el dolor en mi cabeza no se iba pero podía soportar aquello por un tiempo.

Volví mi mirada a JN y noté que me observaba, mis mejillas se calentaron y agaché la mirada enseguida.

-T...tus ojos- mi garganta estaba seca dificultandome el habla.

-Has dormido dos días,debes tener hambre, sígueme-ignoro mis palabras y se giró para luego salir por la puerta.

Me quedé unos segundos en aquel lugar, mi cabeza estaba confusa, tenía la extraña sensación de haber estado allí antes, fue entonces qué recordé a Jackson y sus palabras "Te haré regresar"

Regresar a aquellos recuerdos olvidados en mi cabeza.