𝐓𝐡𝐞 𝐥𝐚𝐬𝐭 𝐏𝐞𝐯𝐞𝐫𝐞𝐥𝐥【Español】

𝟬𝟭𝟬.༄ ‧

Nadie se había enfermado cuando se acostaron. Entonces, Jasmine asumió que literalmente tenían una broma de bienvenida inofensiva cada año, y eso fue todo. Luego la llevaron a la Torre de Gryffindor, donde Alice y su amiga Marlene McKinnon la ayudaron a subir las escaleras hasta su dormitorio. Había alrededor de trece quintas chicas de Gryffindor, catorce contando a Jasmine, o al menos eso es lo que Alice le había dicho mientras subían las escaleras. Se quedaría con ella, Marlene y Lily. Eran el único dormitorio con espacio.

- Perdón por la ausencia de Lily, tenía que instalarse los primeros años en sus dormitorios y luego necesitaba hablar con McGonagall sobre sus deberes como prefecta este trimestre. Tendrá mucho trabajo extra haciendo el trabajo de dos prefectos. Merlín lo sabe. Remus no va a hacer su trabajo con James y Sirius dándole órdenes - murmuró Marlene mientras abría la puerta de su habitación.

Jasmine notó que había placas de identificación en las puertas con el primer nombre y luego la última inicial de cada persona que vivía en los dormitorios. Los nombres estaban bordados de manera diferente, cada uno tenía un estilo que parecía específico de la persona. La de Jasmine estaba llena de ramas de invierno entrelazadas a través de cada letra, simulando el abrazo de la Muerte. El de Alice estaba loco con hojas brotando en cada esquina. Marlene tenía letras con globos, una escoba y una quaffle a su alrededor. Lily's estaba cubierta de flores y enredaderas. La yo de su nombre incluso estaba salpicada de una margarita. Era algo que no había visto en el futuro y se preguntó por qué se lo habían quitado.

- Oh, ¿te gusta el trabajo de los hechizos? Lily se lo pensó. Pensó que ayudaría a todos a saber dónde vivimos.

Y por eso desapareció. O fue derribado por McGonagall, quien no pudo soportar ver la obra de Lily alrededor del castillo después de su prematura muerte o la magia de su madre murió con ella.

- Es encantador. No he visto nada parecido

- No lo habrías hecho. Lo creó con su ... amigo ... Snape. Los dos siempre están tratando de hacer cosas nuevas. Aunque, los hechizos de Snape tienden a ser ... de tono más oscuro - respondió Alice con cuidado, sin querer calumniar Severus en un lugar donde Lily podría potencialmente escucharla.

Jasmine quería golpearse la cabeza contra la pared. Se había olvidado de Severus. Ella entendía sus motivos en el futuro, después de cinco vidas diferentes, pero todavía no podía soportar lidiar con su sarcástico trasero. Esperaba que no fuera tan malo como un adolescente, pero lo dudaba mucho.

Apostaría los diarios de su padre a que tomaría pociones dobles con Slytherins como su primera clase por la mañana. Después de todo, era una tradición, una que se había establecido mucho antes de su tiempo en Hogwarts. Le había preguntado a Charlie y Bill sobre eso, así como a Sirius y Remus. Incluso McGonagall dijo que cuando asistió a Hogwarts, su primera clase como Gryffindor casi todos los años eran pociones dobles con Slytherin.

Jasmine suspiró. Sería su suerte tener que lidiar con Snape a primera hora de la mañana.

- ¿Hay algo malo con este Snape? - Preguntó Jasmine mientras se movía hacia su cama en la esquina más alejada de la habitación. Ya podía enumerar lo que le pasaba a Snape, pero quería escuchar lo que otras personas tenían que decir sobre él.

Ro ya se había puesto cómoda durmiendo en la almohada de Jasmine, traidora. Ella nunca iba a sacar todo ese pelo de gato de eso ahora. Ro era verdaderamente una mente maestra malvada.