RED THREAD 「 XiWoong 」

②

SeoHo al notar al moreno corrió alegremente a él, mientras un pequeño chico caminaba atrás de él con la mirada baja. Él moreno sonrió al ver a sus dos buenos amigos, dejó de lado su celular y les presto la atención del mundo.

— Como siempre, llegan tarde. -Sonrío, colocando su mentón en sus manos. Mientras se recargaba en el pupitre-.

— ¡Hwannie siempre tarda! ya sabes que es un perezoso cuando se trata de pararse. -Susurro con tal de no ser oído por el pequeño. Él cual evidentemente escuchó y le dio un zape a su amigo-.

— Te escuche cara de rana. -Su amigo lo volteó a ver indignado. Él solo le respondió sacándole la lengua y arrugando su nariz-.

— No cambias Woong, no seas agresivo con él pequeño sapito. -Mientras agarraba los cachetes del rubio-.

— L-Lo que digas. -Se sentó rápidamente en su silla, con un pequeño sonrojo en sus mejillas. Las cuales no fueron vistas por los otros, los cuales sólo reían de otra cosa-.

Dicho eso entró su primer profesor, así empezando las clases, las cuales fueron bastantes aburridas y monótonas. Llegó la hora del descanso, así que tenían que salir a almorzar. Los tres chicos salieron de la universidad en busca de un establecimiento de comida, ya que casi no les gustaba la cafetería que tenía esta. Llegaron hasta un puesto de Tteokbokki , así todos sentándose a comer.

En lo que llegaba la comida empezaron a platicar. Mientras SeoHo se comía pequeñas botanas que habían en la mesa.

— ¿Se acuerdan de YeoSang?. -Preguntó el moreno mientras bebía agua-.

— Claro, el chico bonito. -Él rubio sonrió con migajas de botanas en su rostro. Él castaño limpió la cara de su amigo y asintió lentamente-.

— Quiero invitarlo a salir.

HwanWoong sintió sus huesos tensarse, dejó de respirar por unos segundos, levantó su vista viendo la mirada del moreno. Estaba más brillosa y hermosa que antes, se notaba lo feliz que era hablando de aquel castaño. Él pequeño se sintió un poco celoso, ya que él nunca logró poner así al moreno, pero al mismo tiempo estaba feliz. Ahg, ¿A quién engaña?, estaba herido... dolía mucho.

— ¿Qué piensas hacerle?. -Bajo su mirada notando que la comida había llegado, así empezando a picotearla-.

— No lo sé, aún. Ya saben, él... es especial, muy especial. -Dicho eso sonrió mientras metía un bocado grande a su boca-.

Auch, eso dolió más.

— Me parece excelente, mucha suerte amigo. ¡Serán una gran pareja!. -Sonrío, mientras volteaba a ver a su amigo- ¿No crees Hwannie?.

No ayudas SeoHo, no lo haces...

— Claro. -Metí un bocado, sentí un nudo en mi garganta y veía mi vista borrosa, joder. Quería llorar, pero no-.

— Gracias, son los mejores amigos que podría tener. No se que haría sin ustedes.

Amigos... si, solo éramos eso, nada más. Solo amigos. Terminaron de comer, pagaron a la señora del establecimiento y se encaminaron de nuevo a la universidad. Mientras caminaban llamaron al celular del rubio, el cual se alejó tantito de ellos y atendió. A los minutos se acercó a ambos.

— Chicos, voy a tener que irme, me pidieron que pasara a recoger a Wendy. Vuelvo antes de que empiece la clase, ¡Cuídense!. -Salió corriendo del lugar mientras agitaba una mano en forma de despedida-.

Dicho aquello nos quedamos solos, solo nos volteamos a ver y nos sonreímos un poco. Empezamos a caminar cerca del campus. Ninguno hablaba, solo nos manteníamos callados disfrutando del sonido de la naturaleza. Entonces escuché la voz del moreno.