Siempre Tú

Un Reloj

La tarde transcurría tranquila, la biblioteca con ese olor particular a libros, sin ruidos que alteren la tranquilidad de Shang Qinghua todo parecía ir bien, hasta que escucho una fuerte risa proveniente de la entrada del edificio.

Reconoció aquella risa le pertenece a su nuevo compañero de habitación Wei Wuxian, se levantó del asiento y camino hasta la entrada.

-Tu risa se escucha hasta el fondo de la biblioteca-.

-¿Ah?. Oh aquí estas, Shang Qinghua te estaba buscando-.

-A mí, ¿Por qué? -. Dijo algo confundido Shang Qinghua.

-Lo olvidaste, prometiste acompañarme a ese lugar-.

- ¿Qué lugar? -. Xie Lian tenía cierta sospecha del lugar del que hablaba, pero quería estar seguro así que continuó -No estarás hablando de aquel casino, ¿Cierto? -.

-Claro que de ese mismo habló-.

-Pará qué vas a volver allá, acaso no recuerdas lo que sucedió la otra vez-.

-Por supuesto que lo recuerdo, sin querer se me cayó mi reloj e iré a preguntar si lo encontraron.... A-Lian no me veas así, no pasará nada-.

Xie Lian quedo con una muy mala experiencia y por nada del mundo deseaba volver, sobre todo por aquella amenaza, estarían a salvo si no regresarán o no.

-Los acompañare-.

-Espera, tienes trabajo-. Wei Wuxian tomó el brazo de Shang Qinghua y continuó -Shang me acompañará así que no pasará nada-.

-Creo que es mejor si nos acompaña Xie. Si vamos los tres hay menos probabilidad que nos suceda algo-. Shang Qinghua estaba nervioso, que pasaría si se vuelven a topar con aquellos hombres, él no sabe pelear, la última vez fue por la adrenalina y terminó adolorido al día siguiente que no quiso levantarse de su cama.

-Le pedí a Lan Zhan que nos acompañe, no puedes faltar por algo tan pequeño podrías meterte en problemas- Wei Wuxian mintió en lo primero que dijo, sin embargo, al decir que no quiere que Xie Lian este en problemas hablaba muy enserio.

Xie Lian suspiro y dijo -Esta bien-.

Sin decir más Xie Lian se adentró a la biblioteca dejando a sus amigos.

-Entonces va a venir o lo encontraremos allá-. Al escuchar que otra persona venía Shang Qinghua se sentía más seguro.

Su tranquilidad duró muy poco, Wei Wuxian admitió que mintió sobre de haberle pedido a Lan Wanji que los acompañará era.

Resignado y siendo jalado del brazo por Wei Wuxian tomaron un autobús a las afueras del campus. En el camino Shang Qinghua escucho con atención la "declaración" que tuvo con Lan Wanji ese mismo día.

Al llegar a la entrada del casino se encontraron con el joven que los atendió aquel día, Wei Wuxian con tono alegre y agitando uno de sus brazos dijo -Disculpa el chico del otro día-.

Yin Yu giro su cabeza al sentir una voz que se le hizo extrañamente familiar, notando a dos personas caminar hasta donde se encontraba.

-Son ustedes, a que se debe su visita-.

-El otro día perdí mi reloj, no sé si alguien lo encontró- Wei Wuxian estaba algo apenado recordando el lío que armo aquella ocasión.

-Posiblemente-.

Los ojos se le iluminaron a Wei Wuxian había una esperanza de recuperar el reloj que le regalo su shijie el año pasado por su cumpleaños, no quería llamarla para decirle que lo perdió eso la pondría triste, aunque no lo dijera.