Siempre Tú

Una triste flor que perdió a su mariposa

Los caminos siempre resultan ser confusos y nada es lo que aparenta ser, algunas veces solemos confundir el bien con el mal, poniéndolos en una balanza que es controlada por un régimen lleno de ambición, deseo, lujuria y poder. Sin embargo, algunas veces eso nos ayuda para reescribir nuestra propia historia de vida, una en la que no tengamos que elegir entre lo que quiero y lo que es correcto.

Xie Lian creía que con la última experiencia vivida se alejaría de los problemas, ya que la última vez fue la más vergonzosa, no es para menos, ser engañado por una chica tan bonita como lo es Sha Hualing, pero ciertamente una belleza así suele conducirte a los peores escenarios que pudieras imaginarte.

Se encontraba devolviendo libros a los estantes en la parte trasera de la biblioteca, ya era de noche, hace horas que debió salir, pero su cabeza no estaba del todo en la tierra, el día anterior aparte de la terrible experiencia en donde fue llevado a la comisaria por "robo" y ser sacado por Shen Qingqiu que lo regaño por todo el camino de regreso a casa recibió la llamada de su primo, Qirong, hace tiempo que no se comunicaba con él, que lo hiciera es que debía ser importante y lo fue, o algo así, resulta que Qirong volvió a meterse en problemas con un par de "amigos" que lo llevaron a un lugar de apuestas, las cuales se cuestionaba su legalidad y termino peleando con los dueños de lugar <Familiar el asunto>, pero ese es otro tema, Qirong le pidió quedarse con él un par de semanas en lo que arreglaba ese asunto.

La mayoría de las luces en la biblioteca estaban apagadas y solo algunas daban un poco de luz para ver el camino, escucho un par de pasos que se acercaban hasta donde él se encontraba. Extrañado hablo en voz alta.

- La biblioteca está cerrada – Dijo asomando su cabeza para ver el pasillo completamente solo y casi nada de iluminación.

"Fue mi imaginación" Se consoló a si mismo con aquellas palabras, sin embargo, se volvieron a escuchar pasos, esta vez sonaban más cerca de donde se encontraba.

- ¿Quién está ahí? – Agarro un libro de pasta gruesa para defenderse de la persona que se encontrara asechándolo.

De pronto, las luces se apagaron de golpe, Xie Lian salto del susto soltando el libro. Se empezó a escuchar una risa de mujer proveniente de unos estantes detrás suyo, giro su cuerpo intentando sacar su celular para alumbrar un poco el lugar, cuando a lo lejos vio una luz creciente, esta era un poco peculiar, no parecía ser de alguna lámpara o algo parecido, más bien era como una llama creciente.

El humo que llego a su nariz lo hizo entrar en razón, se estaba quemando la biblioteca. Se apresuró rápido al botón de emergencia y dar aviso a los bomberos para que vinieran lo más pronto posible, una vez hecho eso, se apresuró lo más pronto posible al extintor más cercano.

Estaba a punto de usarlo cuando sintió en su hombro un dolor, so fue lo último que recordaba, el humo penetrando en sus fosas nasales y una voz un tanto extraña que le hablaba al oído, lo único que logro entender fue "Hua Cheng".

-----------------------------------

Al abrir los ojos la luz proveniente de la ventana era tenue, el sol comenzaba a meterse y ahora sería la luna quien gobernaría en el cielo.

Sus ojos viajaron por toda la habitación, no se encontraba solo, con él se encontraban Shen Qingqiu, Wei Wuxian y Shang Qinghua. Todos sus amigos se encontraban ahí, rápidamente volvió a ver todo el lugar sintiéndose un poco decepcionado de no encontrar a alguien más con él, específicamente hablando del joven alto y guapo de abrigo rojo que le llamaba Gege.

- No esta, A-Lian concéntrate en ti – Dijo Shen Qingqiu.

- A-Lian... ¿Qué ocurrió? – Pregunto preocupado Wei Wuxian, habían ocurrido tantas cosas seguidas que lo tenían en un constante martirio.