Sucumbiendo a la tentación (Resubido)

Capítulo 75 - Malicia

Antes de leer, tomen en cuenta:

"Diálogos."

'Pensamientos.'

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Mientras tanto en el Centro Pokémon...

"Agh... Me duele la cabeza..."

Al terminar la batalla, una fatiga lo apoderó al igual que su Pokémon, Ash miró a su alrededor notando que no había nadie.

"Entonces... ¿Eso en realidad pasó?"

Todavía le parecía irreal, que haya viajado al futuro y que se encontró con sus hijas.

"......"

Luego, miró la piedra activadora y la mega piedra de Sceptile, y recordó la sensación que tuvo cuando cambió de forma.

"Tengo idea como funciona esto de la mega evolución... Pero..."

Y entonces sacó una tercera piedra, Ash dedujo que es una mega piedra por ser muy similar que la de Sceptile, pero, con un cambio distinto en los colores.

"La primera cronista dijo que me será de utilidad... Pero, todavía no sé en qué..."

Reflexionando el chico miró nuevamente a su alrededor.

"Están demorando..."

Refiriéndose a las chicas, Ash salió del Centro Pokémon y luego, miró el paquete que está en su mano.

"Me lo envió Casey... ¿Qué será?"

Se preguntó mientras abrió el paquete y se sorprendió por el contenido.

"Esto es..."

Y en ese momento...

"¿¡!?"

Un Houndoom se abalanzó sobre él bruscamente y luego, irse.

"¿?"

Al levantarse, Ash notó una nota en su mano.

"¡!"

Leyendo el contenido de la nota, el chico se apresuró hacia el centro Pokémon.

"¡Enfermera Joy! ¿Me puede dar a mis Pokémones por favor?"

"Claro... Ya no tienen heridas, pero... necesitan un descanso, especialmente Sceptile..."

"¡Gracias enfermera Joy!"

Saliendo del Centro Pokémon, Ash se adentró al bosque...

***

"¡!"

La noche ya había caído en el bosque, y solo la luna iluminaba el camino de Ash.

"......"

Luego de unos veinte minutos, el chico junto a su Pikachu montado en su hombro llegaron a un lugar específico y se encontraron con una persona que escondía su identidad en una capa.

"Llegaste mocoso... Leíste mi nota..."

El chico no contestó, solo lo observaba fríamente.

En la nota decía "Tengo a tus amigas, ven al bosque solo o si no, algo horrible les pasará." E inmediatamente, él corrió en su ayuda.

"¡!"

Entonces, su atención se centró en dos árboles donde se encuentran dos chicas sujetas ahí.

"Tú..."

Al verlas en ese estado, con sus manos y pies restringidos contra la pared en ropa interior, hizo que la sangre del chico hirviera de la furia. Estando inconscientes y amarradas en los árboles, yacía May y Lisia con algunos golpes en sus cuerpos.