La pirámide se alzó un piso y luego un segundo, y, en la punta, Dior aguanto de pie sin ningún tipo de esfuerzo con la pierna completamente levantada y pegada a su espalda.
Cuando se dejó caer como un peso muerto hacia atrás y las bases la recogieron, sintió como si todo el tiempo que había pasado sin estar allí arriba había sido no más que un absurdo espejismo.
Fue un segundo de calma antes de que el gimnasio se llenara de aplausos y a Dior se le dibujó una sonrisa en la cara. Estaba de vuelta. Por fin.
Había sido una semana entera entrenando con Dodo y dejando que Dodo la ayudara y, aunque no estaba al cien por cien todavía (no por la lesión sino por haber perdido la forma a causa de la lesión), estaba lista para volver. Al menos, seguía siendo mejor que esa tercera flyer que habían estado usando en su ausencia.
La chica que había estado en su puesto sonrió al verla y la abrazó. Iba a ser difícil pasar de ser el centro de atención a volver a estar en un segundo plano, pero Dior era demasiado buena como para no alegrarse de su vuelta, aunque le tuviera un poco de envidia.
Hyun Ja se había acercado hasta ella a abrazarla también, y cuando se separó miró a su equipo con una sonrisa triunfante que dejó intrigada a Dior.
–Nuestro amuleto de la suerte está de vuelta –les dijo a las jugadoras–. Ese campeonato es nuestro, no vamos a perder ni un solo partido más –les dijo, como si que Dior volviera a estar en la punta de la pirámide fuese el conjuro definitivo para seguir con esa racha.
Todas levantaron los brazos y aplaudieron y vitorearon después de escuchar a su líder, y Dior tuvo que darse la vuelta porque se estaba poniendo roja.
Consiguió que el equipo se riera, y que algunas de las veteranas soltaran algún comentario sobre lo adorable que era ver a Dior avergonzada.
Hyun Ja se volvió a las gradas entonces, y Won Hee la siguió.
–Todas queremos mucho a Dior, pero decir que no vamos a volver a perder porque ella está aquí es un poco exagerado, ¿no crees? –se rió la de piel pálida, y consiguió que la portera le diera un empujón a modo de reproche.
–No rompas el hechizo, Won Hee-yah.
–Qué tonta eres, Hyun-ah.
Le hubiera gustado seguir con esa conversación divertida y absurda un rato más, pero cuando Hyun Ja abrió la boca para contestarle alguna estupidez más, antes de decir nada la volvió a cerrar y se quedó con la vista clavada en un lugar a la espalda de Won Hee.
La chica la miró con confusión un instante, antes de darse la vuelta y encontrarse con que Min Ji se acercaba hasta ellas dos.
–Buenos días, Jiji –dijo Won Hee con una sonrisa, y Min Ji hizo una mueca porque esa sonrisa se le iba a borrar bien rápido a Won Hee en cuanto le dijera lo que había ido a decirle–, ¿qué es esa prisa de buena mañana?
Se paró delante de ellas y, con marcado nerviosismo, suspiró antes de mirar a Won Hee a los ojos.
–Tengo que contarte algo –le dijo, sin más.
–No me jodas, Ji –contestó Hyun Ja como si supiese de qué fuese la cosa, y Won Hee miró primero a su mejor amiga y después a la chica de segundo año.
Estaba muy confusa, y no tardó en expresarlo con un gesto de incredulidad.
–¿Qué está pasando? –preguntó, recibiendo en seguida por contestación una mirada de Min Ji que estaba segura de que trataba de decir "aquí no, coneja, aquí no".
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Curiosity Killed the Cat » fem!MONSTA X
RomanceEn aquel instituto todo solía estar en equilibrio hasta que la capitana de las animadoras se lesionó y empezaron a ocurrir cosas extrañas. Dior no sabía que terminar con una pierna escayolada le haría darse cuenta de tantas cosas a las que nunca hab...