Te Convertiste, En Mi Única Familia ℕ𝔸ℝ𝕌𝕋𝕆 ℍ𝔸𝕋𝔸𝕂𝔼

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Kushina estaba en cama, teniendo a Akena en sus brazo , mientras que Minato cargaba al pequeño Ryuta en sus brazos, hablándole como todo un tonto, pero a la vez demostrándole todo su amor. Por otro lado, el pequeño rubio estaba dormido, él no era tan ruidoso ni tan molesto como sus hermanos, Minato lo levantaba para comer y sacarles los gases ya que kushina no le quería dar mama.

Y a así paso un mes en el cual nuestro protagonista abría poco a poco sus ojos mostrando un azul tan inmenso y majestuoso como el mar, Minato algunas veces "intentaba" que kushina se reuniera con el mini rubio pero ya era muy tarde debido a que ella ya tenía el corazón lleno y no quería que nada afectará su felicidad ya que con sus hijos Akena y Ryuta, junto con Minato era todo lo que necesitaba para ser feliz, dejando al rubio por fuera de la familia.

Tomando en cuenta que Minato objetaba lo que Kushina decía, fue a donde Hiruzen para hablar sobre el pequeño rubio.

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—Hiruzen necesito que me hagas un favor—dice Minato al ir a ver al Sandaime a su oficina.

— ¿En qué te puedo ayudar Minato? — decía mientras firmaba papeles, sin quiera percatarse de un tercero.

—Necesito que te hagas cargo de este niño, veras sé que es mi hijo, pero, kushina no se siente bien... No quiere para nada al niño.

—Minato no se enserio que pretendes, es tu hijo, es tu responsabilidad y deber cuídarlo, yo no puedo encargarme de cuidar al pobre bebe al que estas rechazado...

—No lo sé Hiruzen, lo podría poner en un orfanato, al fin y al cabo, podría tener una familia que lo quiera, además está el tema de que quiero presentar a Akena y Ryuta al público.

—Dime una buena razón por la que hagas esto Minato, Pensé que jiraiya te había educado y entrenado bien, no te di el puesto de hokage para que fueras un insensible e hipócrita — dice el Sandaime haciendo llorar al pequeño blondo.

—¿Sabes que Minato? dame al bebé y vete con tu familia, que dolor de cabeza.

—Gracias Hiruzen.

—¿Tiene nombre el niño? —decía Hiruzen mientras que se daba cuenta de lo tierno y pacifico que era, además del gran parecido que tenía con Minato.

—No, nunca le Pusimos nombre, por lo que nunca lo registramos, pensábamos en Menma pero no lo creíamos apropiado.

—Si, si claro, encontraré a alguien que cuide del bebé, pero no esperes que te diga quien es, desde estos momentos pierdes cualquier contacto con él.

—¡No puedes negarme eso, yo soy su padre!

—Desde ahora no, ni siquiera lo has registrado y como que has intentado, sabes muy bien que el pobre bebé no tiene la culpa de nada y si tu estas ahí será un entierro completo de emociones para él. No sabes lo horrible que sería ver todos los días o saber que alguien allá afuera se deshizo de ti, que te desecho como algún trapo viejo solo para continuar con su familia perfecta, abandonándote.

—Bien, me voy Adiós Hiruzen.

—Antes que te vayas. ¿no hay algo que me quieras decir sobre este pequeño?

—Tiene el alma de kyuby,por su bien diré que Akena y Ryuta lo tienen para que pueda tener una vida en paz.

—Eso es una de las cosas menos ridículas que has dicho hoy... Vete antes que se me vaya la poca paciencia que me queda.

Con Minato yéndose para su casa, pidiéndole a Kami descanso y perdón ya que al fin y al cabo no tendría ningún vínculo con su primogénito. Hiruzen tiene al bebé entre brazos ya que se había encariñado rápidamente, era un niño muy atento a pesar de tener un mes de nacido.

—Hay pequeño, que mal que tu padre sea un idiota, no sé cómo no pudieron amarte - decía mientras que sobaba su barriguita entre sus manos.

—Tal vez no te adopte, pero juro que estaré en tu vida y te cuidare.

Decía Hiruzen mientras que veía al bebé empezar a hacer un pequeño berrinche por el hambre, este entendió el gesto con una sonrisa y llamó a un ambu para que le trajera un tetero preparado, pañales de repuesto y un chupete para tranquilizarlo mientras que terminaba su trabajo.

Después de un rato un ambu estaba delante de él con un tetero preparado y pañales sin saber el por qué, solamente seguía las órdenes del Sandaime, mientras que Danzo Shimura entraba por la puerta de dicha habitación.

—Te ha traído la cigüeña un regalo Hiruzen —decía Danzo mientras que veía a Kinoe con un tetero.

—Es peor Danzo, Minato ha venido hoy a dejarme a su primogénito, se excusa diciendo que Kushina no conecta con el bebé y que lo ha intentado pero que a pesar de esto no lo ha conseguido. Claro que esto mentira.

—Ya veo... pero ¿te ha dicho alguna razón? Eso es muy bajo de su parte, pensé que jiraiya lo había educado bien — dice mientras le pedía el bebé a Hiruzen y lo cargaba.

—Kinoe ¿qué opinas de todo esto?— Decía mientras que le daba el tetero que le había extendido kinoe para que el bebé comiera.

—Hiruzen-Sama, Danzo-Sama sinceramente, aunque no s cuál es la situación, puedo ver que el bebé tiene un gran parecido al yondaime Hokage, si puedo decir. Sin embargo, las razones que tuviera el hokage, no me incumben.

—Es cierto kinoe, te puedes quitar la máscara. — dice Danzo

— ¿Puedo cargar al bebé? —decía kinoe mientras que se quitaba la máscara para mostrar su rostro.

—Claro kinoe, mientras puedes crear una cuna para que el pequeño descanse—Decía hiruzen al usuario del Mokuton y este acepto haciendo la cuna para él bebe que llevaba en brazos.

— ¡Que bebe más lindo! — Decía Kinoe mientras que veía al pequeño con una sonrisa bebiendo de su leche.

—Danzo-Sama tiene algo planeado para el bebé.

—Bueno, no creo que sea una gran idea, por ahora ponerlo en raíz y necesita protección, no quiero que el Maldito Namikaze ni ningún Uzumaki se acerque a él. —dijo Hiruzen

—Qué el niño te tomó cariño Kinoe, desde ahora te dejaras de llamar Kinoe y te llamaras Tenzou y cuidaras cada tanto al bebé mientras que le buscamos un buen hogar.

—Hai!, Danzo-Sama-Dijo el resiente nombrado Tenzou y cuidador temporal junto a algunos ambus del bebito rubio.

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Nota de la Autora❤️

Hola espero que les guste mi historia.
Los próximos capítulos los subiré pronto