Boku no Hero Academia: Peligro En Las Sombras

Capítulo 62 - Jardinería mortal

Bakugo hizo un ademán de forcejear con aquel vegetal que se había enrollado en su cintura.
Los otros cinco estudiantes miraban sorprendidos la situación, temblando levemente y con sus ojos bien abiertos.

-No me importa quien seas...- Dijo Katsuki, sujetando con ambas manos el tallo de la planta -¡Sueltame o te arrepentirás!-

Kirishima intentó avanzar, pero su pie seguía pegado al suelo.

-Maldita sea... ¡No puedo moverme con esta bola pegada al pie!- Se quejó el pelirrojo.

-¡No sé cuanto más vaya a durar su efecto!- Declaró Mineta, nervioso, mientras se sujetaba la cabeza -¡Lo siento chicos, no creí que sucedería algo así!-

-Fue una táctica ingeniosa- Reconoció Kirishima -Pero ahora es un problema-

Hasta el momento, la planta no hacia más que sostener a Bakugo en el aire, mientras el rubio forcejeaba con la misma.

-¡Me cago en...!- Soltó Bakugo, con furia -¡¿Por qué no puedo tener un entrenamiento normal sin que aparezcan villanos para matarme?!-

Tsuyu saltó hacia la planta, e intentó ayudar a Bakugo tirando del tallo que lo sostenía.
Sin embargo, la planta se movió violentamente para deshacerse de la chica, aunque no lo logró.

-Esta cosa... Aprieta muy fuerte- Dijo Tsuyu, mientras aplicaba toda la fuerza que podía para intentar abrir las enredaderas.

Kirishima no podía hacer nada más que mirar con impotencia, pero de pronto se le ocurrió algo para salir de la trampa pegajosa. Con su mano endurecida, golpeó el suelo bajo su pie atrapado, quebrándo las baldosas, mientras tiraba de su pierna.
En un momento, la superficie cedió y Kirishima pudo retirar el pie, ahora llevando una baldosa pegada a éste.
Sin dudarlo, el chico se agachó junto a Jiro, y con el mismo procedimiento liberó a su compañera, quedando ella también con un trozo de baldosa bajo el pie.

-¡Rápido, debemos aydarlos!- Exclamó la chica, corriendo hacia Tsuyu y Bakugo, seguida de cerca por Kirishima.

-¿Que demonios son estas plantas?- Preguntó el pelirrojo, esquivando un tallo que intentó golpearlo -Sea lo que sea, no parece tener cuerpo humano... O al menos no necesita vernos con sus ojos para localizarnos-

-¡Deja tus análisis para otro momento, cabeza de pincho!- Se quejó Bakugo, aún forcejeando con el vegetal -¡Lo mejor que podemos hacer ahora es atacarlo y esperar que esta cosa se destruya!-

-¿Bakugo, puedes ver desde donde viene esta planta?- Preguntó Tsuyu, quien había sido atrapada desde el pie y estaba abrazada a un tronco que se agitaba para deshacerse de ella.

-¡¡No me hables tan casual, sapo, aún somos enemigos!!- Gritó el rubio

-Soy una rana...- Murmuró la chica, ofendida -Da igual... ¿Puedes ver de donde viene nuestro enemigo?-

-Estoy exactamente sobre el agujero que abrió esta verdura, a juzgar por la gran cantidad de tallos- Respondió el chico, retorciéndose entre las poderosas plantas -¡Demonios, me están rodeando!-

-¡Bakugo, utiliza una explosión allí, en donde salen las plantas!- Dijo Kirishima, luchando junto a Jiro contra los tentáculos vegetales.

-¡¡No me des órdenes!!- Gritó Bakugo, y con un movimiento rápido, apuntó su palma hacia el objetivo que le habían indicado y soltó una explosión.

La planta produjo un chillido agudo, extrañamente para los estudiantes, y comenzó a agitarse y contraerse con violencia. Acompañado de ese movimiento, los tallos se debilitaron brevemente, dando oportunidad a Tsuyu y Bakugo de escapar.