Eternos- Harry Styles (adaptada)

capitulo 12 (capitulo largo)

-¡Oooh! No te vez muy bien que digamos- le informo Morgan Murphy-. ¿No estas enferma, verdad?

Haven miraba al salón de economía domestica mientras esperaba a que Louis terminara de prender alfileres al vestido de graduación de Morgan. A Haven no le sorprendió saber que Morgan ya estuviera enterada de su mas reciente desmayo. Pocos secretos sobrevivían en la fabrica de chismes de Snope City, y a Lorde le encantaba hablar.

-¡No te muevas, Morgan!- ordeno Louis con brusquedad-. A menos que quieras que una docena de alfileres sobresalga de tu hermosa espaldita.

- Estoy bien- insistió Haven, resistiéndose a permitir que ocho años de rencor salieran de pronto a la superficie-. Nunca me había sentido mejor. ¿Que te parece?

Jalo la sabana que cubría el espejo de cuerpo entero par que la voluptuosa rubia pudiera admirar su nuevo vestido. Verde esmeralda no era el color que Haven habría elegido para ella, pero Morgan siempre se salia con la suya. También había insistido en un escote que dejara ver su busto un poco mas de lo que se acostumbraba en un baile de graduación de la Montaña Azul. Pero por los $400.00 dolares que pagaría, Haven le habría diseñado un bikini de lentejuelas.

Ignorando los oohs y ahhs de Morgan. Haven miró su fantasmagórico reflejo. No se había molestado en domar sus negros rizos esa mañana. Sus ojeras eran color berenjena, y las pecas que salpicaban su nariz parecía una variedad exótica de enfermedad en la piel. Nunca había sentido realmente propia su cara, y ahora sabia por que. Volteo a la ventana, tratando de olvidar el fuego que aun crepitaba en su cabeza. Afuera, los niños de la escuela primaria vecina estaban en receso. Haven los vio patear anaranjadas nubes de polvo y zigzaguear por la tierra seca.

-¿Sabes que, Louis? Bradley dice que en Unicoi hay un chico como tu - oyó comentar a Morgan.

-¿Como? -respondió Louis, añadiendo alfileres a la espalda del vestido.

-Ya sabes- se rio Morgan-. Homosexual. Tal vez podrían salir juntos. ¡Ay! ¿Eso fue un alfiler?

-Si, perdón. Se me resbalo -dijo Louis-. No busco amor por ahora, Morgan. Y aun si lo buscara, dudo que lo haría en Unicoi. Me gustan los hombres con los dientes completos.

-¿Eso es algo sexual? -pregunto Morgan con timidez justo cuando la señora Buchanan entraba al salón con un pastel que se balanceaba en una mano rolliza.

En el pasado, la diva domestica de la preparatoria La Montaña Azul no había tenido mucho tiempo para Haven y Louis, así que a ambos les sorprendió que la señora Buchanan les ofreciera su salón para que probaran vestidos después de clases. Su actitud había coincidido con la breve estancia de su marido en el Hospital Regional de Johnson City. Ella le había llenado el trasero de perdigones cuando lo cacho resbalándole la salchicha a su prima Cheryl. No se presentaron cargos, pero el desafortunado roce de la señora Buchanan con el infierno del pueblo chico la volvió un poco mas amable con gente como Louis y Haven, aunque ninguno de los dos esperaba que esa buena voluntad durara mucho.

-¿No crees que ese vestido es un poco revelador,  Morgan? -sentada en su escritorio, la señora Buchanan empezó a decorar su pastel con un baño de delicadas escarapelas -. Ya sabes lo que dicen de dar leche gratis.

Morgan sonrío serenamente a la corpulenta y remilgada mujer

-¡Ay, es que usted es muy anticuada, señora Buchanan! Esto es lo que se debe hacer ahora para tener un hombre al lado.

-Lo diseñamos para que fuera practico -añadió Haven de prisa, antes de la señora Buchanan tuviera oportunidad de captar lo que la joven había querido decir-. Así que Morgan podrá ponérselo para trabajar después de que se gradué.