-Entonces, ¿vas a decirme que ocurre?- levanto la vista y esquivo el gancho izquierdo que la rubia me lanza sin piedad con uno de mis brazos -¿O tendré que sacártelo a la fuerza?-
Río ante sus ocurrencias de siempre y quito el sudor que corría por mi mandíbula con la manga de la camiseta –Bueno Bob el Constructor, primero debes de atinarme- subo mis brazos en defensa y le guiño un ojo para molestarla aún más.
Su cara de "no te atreviste" lo dice todo, por lo que mientras me lanza varios golpes más con las manoplas, decido abrirme con ella. Sin querer hacer ambas cosas, suspiro y me detengo chocando mis guantes –Sólo, prométeme que no te reirás, ¿sí?- la miro directamente a los ojos, tratando de transmitirle seriedad, quitándome también el protector bucal que no me permitía hablar con claridad.
Blair se detiene bajando la guardia y me mira seriamente, para preguntar sarcásticamente –Espera, puedo ser completamente seria. Tanto o más que una estatua y una detective lo serían- su extraña comparación hace que ponga los ojos en blanco y me voltee para salir del ring, pero ella me detiene golpeándome el hombro -¡Oh vamos, no te enojes! ¡Sólo era un chiste! Sabes que te escucho, soy una psicóloga frustrada y lo sabes-
-Oh claro, por poco olvido que eres una psicóloga; mecánica, entrenadora de boxeo, repostera y paseadora de perros. ¡Incluso no en ese orden!- me carcajeo frente a ella y por ello recibo un porrazo a cambio, que me devuelve a la sensatez –Perdona ya me conoces, trato de evitar los temas que me ponen nerviosa y, sólo estoy procrastinando cuando sé que al final te lo diré de una forma u otra- la abrazo incluso con el olor a sudor impregnado en mi piel, haciéndola retorcerse. Tomo aire y trato de medir mis palabras –Se trata sobre James. Es decir, el señor Henderson-
Gonzáles se muestra inexpresiva al escucharme, pero asiente varias veces luego –Oh, ¿ya te lo propuso no es así?- como si no hubiese terminado de lanzar una bomba sacude mi hombro para continuar con el entrenamiento, pero no estoy en condiciones para seguir.
La sorpresa me invade y nubla mis reflejos una vez que proceso lo que acaba de decir -¿Qué, qué dijiste?- un golpe que logré esquivar me trae nuevamente a la realidad.
Arruga el ceño confundida, como si yo no hubiese comprendido sus palabras –Pregunté si ya te propuso estar con él, ya sabes, lo del pase libre- comienza a tirar puñetazos al aire para practicar ya que definitivamente yo estaba concentrada en otra cosa.
Miles de preguntas se acumulan en mi cabeza y no sé cuál lanzar primero, pero no puedo dejar pasar esto así nada más -¿Cómo sabes de, de ello?- el inevitable tartamudeo por el nerviosismo sumado a la inseguridad que me aborda al suponer varios escenarios, hacen que mi pecho se contraiga.
Esta vez Blair dirige toda su atención a mí y sonríe como si hubiese ganado la lotería –Así que, no sólo que te lo propuso, sino que también ¡aceptaste! ¡Ya era hora! Pero, lo que no entiendo es porqué estás tan sorprendida, ¿acaso no te lo dijo?- no hace falta contestar, mi cara de espanto es más que explicita, por lo que decide continuar –Cariño yo fui su compañera durante uno de sus pases libres y ha estado bastante bien, sólo que luego conocí a Bianca gracias a él y tuve que terminar el acuerdo- me explica, haciendo comillas en "compañera" y "acuerdo" con sus dedos.
Completamente atónita, me bajo del ring y me siento en uno de los bancos del gimnasio, bajo la atenta mirada de mi amiga quien luego siguió mis pasos –No puedo creer que lo hayas hecho. Es decir, no es que esté molesta contigo o que esté juzgándote, ni nada que se le parezca- rápidamente aclaro la situación, haciendo contacto visual con la rubia –Pero es que, pienso todo el rato en que ser parte de éste acuerdo es una completa locura y tú, lo hiciste sin problemas. Yo ni si quiera puedo entender cómo es que acepté, ¿tú me entiendes? Siento que estoy hablando puras idioteces-
Blair asiente efusivamente y ríe ante mi confesión, sentándose a mi lado -¿Qué es lo que te preocupa? Literalmente estoy trabajando para él y seguimos siendo algo así como amigos, nada ha cambiado luego de aquello, ni tampoco te sucederá a ti. Me refiero a que, si estás de acuerdo con ello al cien por ciento, dudo que algo salga mal o esté fuera de tu control. Te conozco chiquilla, no eres de las que se dejan pisotear-
Suspiro al escucharla y ella acaricia mis brazos con las manoplas todavía puestas –Blair sabes que solo he estado con un chico en toda mi vida y, de repente una relación así, no lo sé. Cuando estoy con él siento que todo es tal cual debería ser, me siento segura de mi misma y de lo que está sucediendo, pero luego salgo de ese ambiente y mi cabeza colapsa de tanto pensar que ello está mal-
-Oye no tengas miedo, de eso se trata un acuerdo como ese, experimentar cosas nuevas y sentirte viva, llena de adrenalina e incluso sensual. Puedes verdaderamente disfrutar de algo tan bueno y explotar en un buen sentido, normalicemos de una vez por todas que las mujeres tienen sexo y no es un tabú, disfrutamos de él- la rubia arruga el ceño al escuchar mi excusa.
¿Cómopodría seguir dudando, discutiendo o quejándome con un argumento como ese? Eincluso aprovecha que me ha dejado sin palabras para continuar con su discurso –Yano eres una niña y bien sabes controlar tus sentimientos, no eres la princesaque espera al príncipe azul, sino la que va y busca al dragón para vencerlo. Nodeberías preocuparte por ello- una sonrisa se dibuja en mi rostro al escucharla –Deja de pensarlo tanto carajo y dime, ¿qué es lo que tú quieres?-
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¿Ya dije que amo a Blair? ¿No? Entonces lo digo ahora.
Capítulo largo en compensación por la demora que no se merecen, pero estoy teniendo problemas con mi computadora (nuevamente). Aun así sigo aquí y por ende la historia continua!
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Lxs amo ❤
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Free Pass || +18 -EN EDICIÓN-
RomantikFREE PASS, una novela cautivadora que te sumerge en el mundo de Myrna Jones, una joven secretaria de una empresa automovilística; quien se ve enfrentada a una tentadora propuesta de su jefe, James Henderson: un mes de relaciones puramente físicas, e...