El amor no se puede esconder

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Anna

Miercoles 7 de agosto, tengo que ir a comprar mis útiles para volver a la escuela

-Anna ya le avise a la mejor amiga de tu madre que te acompañe -mi papá entra a mi habitación.

-¿Mamá tenia una mejor amiga? -él asiente varias veces con su cabeza-. Oh guau pero ya estoy demasiado grande, gracias pero puedo sola.

-Anna por favor...

-Ni siquiera la conozco papá, que clase de padre eres, no puedes dejarme con una desconocida.

-Era la mejor amiga de tu madre y yo la conozco, Anna, te hará bien ir con ella.

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Llegue a Crooms, un bar que quedaba en una vieja esquina llegando al centro, ahí me estaría esperando la mejor amiga de mi madre y su hijo.
Pero cuando llegue, me lleve una gran sorpresa.
La mejor amiga de mi madre y su hijo eran nada más y nada menos que Estela y Cole Coopper

-Pero miren quién es, la asquerosa y estupid...

-Oh Anna que lindo volver a verte -Estela vino hasta mí y me dio un cálido abrazo.

Me quedé petrificada, no podía abrazar a alguien que no conozco. No sabia que mi madre era la mejor amiga de la madre de Cole Coopper, el chico más odioso del planeta.

-Espera, ¿a ella estábamos esperando?

-Mira Coopper si fuera por mí vendría sola, pero mi padre decidió eso -lo mire con el ceño fruncido.

Mientras Estela se quedaba viendo vestidos para ella, Cole y yo teníamos que esperarla afuera, no nos mirábamos y ni siquiera estábamos lo suficientemente lejos para decir que no veníamos juntos.

-Tú también debes comprar un vestido.

-¿Qué? -lo mire con mi ceño fruncido-. ¿Para qué? Esas cosas son aburridas.

-Este año tenemos el baile, aunque no creo que nadie te invite ya, eres horrible.

-Cierra tu maldita boca Cole, tú solamente vas a ir con Perla porque es la única que te soporta y porque esta locamente enamorada de ti y lo usas a tu favor.

Vimos cruzar a Cedric y nos dimos vuelta inmediatamente para que no vea que somos nosotros y que desafortunadamente venimos juntos, porque ni sabríamos como explicarlo.

-Que lindo que se puso Cedric.

Le eché un ojo de arriba y abajo contemplandolo, estaba más lindo desde la última vez que lo vi.

-No creo que te mire, eres un adefesio.

-¿Qué pasa contigo? Eres un idiota Cole y ve a llamar a tu madre.

Salio Estela del local con un vestido verde para ella, nos lo mostró entusiasmada.

-¿Les gusta? -nos devolvió la mirada a Cole y a mí-. Oh no, no señor no puede ser que se lleven mal.

-Mamá es una de las amigas del estupido de Sebastián

-Cierra la maldita boca Coopper, porque te golpeare.

-Wow wow, tranquilos, tienen diecisiete años chicos, dejen de pelear.

En la mirada de Estela notaba asco al saber quien era mi amigo, vaya amiga tenía mi madre.
Una odiosa que esta loca con que todos sus conocidos sean diez de diez.