-Crowley –murmuró Dean con tono seguro y cabreado.
-¿De verdad creíais que iba a ser tan fácil entrar?
Solo decir eso de detrás de ellos salieron dos hombres fuertes y altos con los ojos completamente negros. Les agarraron de los brazos y les quitaron las armas.
Crowley hizo un gesto para que les acercaran, cuando ellos aceptaron las órdenes entraron en una pequeña habitación. Oscura y fría, en la que solo había una ventana con barrotes.
Después de eso el rey del infierno les ordenó que los dejaran solos, así que los demonios se marcharon de allí.
-Diles a tus esbirros que son unos capullos –dijo Dean cada vez aumentando el volumen.
Los tres se lanzaron miradas, miradas que podían matar. Hasta que alguien cortó el incómodo silencio.
-¿Estáis buscando a vuestro querido profeta, no chicos? –sonrió- Por cierto.. ¿Dónde está esa supermamá que siempre lleváis pegada al culo?
Los hermanos se miraron y sonrieron.
-Detrás de ti, cabrón –dijo Dean con una gran sonrisa.
NARRAS TÚ
Me separé de los hermanos y seguí mi camino que me llevó directamente a la habitación donde Kevin estaba. Habían un par de demonios custodiando la puerta pero no tuve ningún problema.
Abrí y me encontré al profeta y a otra chica, seguramente era la que dijo Sam. Estaban atados a una silla y con sangre en toda la ropa. Eso demostraba que Crowley les había torturado.
Me acerqué corriendo a Kevin y me arrodillé. Con mis manos le levanté la cabeza y intenté que me responidera.
-Hey Kevin, soy yo. Estoy aquí.
Él abrió los ojos mientras yo cortaba las cuerdas que le mantenían prisionero.
-_______..-pronunció mi nombre con dificultad.
Después de desatarle a él me dirigí a la otra chica y hice lo mismo que había hecho con Kevin un minuto antes. Nos preparamos para salir, pero antes cogí la piedra, que estaba en una mesa.
Les saqué de allí y les acompañé rápidamente al coche, les dije que se quedaran ahí y que me esperaran a mi o a alguno de los hermanos. Ellos aceptaron y yo volví a entrar corriendo, pero esta vez seguí el camino que ellos habían seguido.
Oí voces, así que caminé más despacio y con más cuidado. Antes de seguir avanzando me aseguré de que no había ningún demonio cerca, y cuando lo acabé de comprobar seguí adelante hasta que vi una puerta abierta. Crowley estaba de espaldas a mí y los hermanos me habían visto.
-¿Dónde está esa supermamá que siempre lleváis pegada al culo?
-Detrás de ti, cabrón –dijo Dean.
Antes de que el rey del infierno pudiese hacer algo yo le puse el cuchillo de Ruby al cuello.
-Como hagas el mínimo ruido o gesto te mato aquí mismo –dije en tono amenazante.
Entonces Dean y Sam aprovecharon para ponerle las esposas para demonios que yo les di en ese momento. Después de tenerle para nosotros salimos de allí con cuidado y lo metimos en el maletero del Impala, en el que había la trampa para demonios pintada.
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Tras un buen rato en coche llegamos al Bunker, la casa de los hombres de letras. Los hombres de letras son observadores sobre los misterios inexplicables para el hombre. Tienen el conocimiento sobre lo sobrenatural y sobre la magia. Solo comparten los secretos de este mundo con los cazadores, y lo curioso es que los consideran inferiores a ellos.
Entramos al Bunker y dejamos a Kevin y a la profetisa en una habitación para que descansaran después de todos los golpes que se han llevado. Y nosotros nos encargamos de Crowley.
En una de las muchas habitaciones, había otra habitación escondida detrás de una estantería de libros. El lugar perfecto para esconderle. Así que le sentamos en una silla, le atamos y le metimos dentro de la trampa de demonios. Estaba totalmente indefenso y esta vez, éramos nosotros los que tenían las riendas de la situación.
-¿Este es vuestro gran plan? –dijo bromeando- ¿Tenerme aquí.. encerrado? –dijo en tono decepcionado.
-No Crowley.. –el hermano mayor habló- Será mucho más que eso.
-Genial! Me lo tomaré como unas vacaciones!
-Mantén esa sonrisa en la cara, porque vas a necesitarla –habló Sam después de todo.
Yo me acerqué caminando a el prisionero y me apoyé en los brazos de la silla, quedando a pocos centímetros de él.
-Vas a contarme todo lo que sabes de Abaddon –le miré a los ojos y él a mí, intentando intimidarme -Voy a ser buena y a dejarte unos minutos para que reflexiones –dije seriamente, entonces me di la vuelta y caminé hacia la puerta pero oí algo que me hizo detenerme.
-¿La mami cabreada busca venganza por la muerte de su hijo? –ni siquiera me giré- Sí, me he enterado. Abaddon ha matado a Eric.
‘Los animales, cuando están acorralados, son más peligrosos’
Espero que os guste:3Votad y comentad si quereis el siguiente*-* Bueno, pues ya se ha dicho. Eric ha muerto. ¿Que pensais de que hayan capturado a Crowley? ¿Y sobre el niño pequeño?
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Darker than black [Dean Winchester y tu]
Fiksi PenggemarA veces no hay palabras, no hay citas para resumir lo que pasó aquel día. A veces lo haces todo bien, lo haces perfectamente y aun así sientes que has fallado. A veces tenemos que tratar con el hecho de que la vida tiene otros planes para nosotros. ...