Los Titanes se quedaron dos días más en la Manada de las Sombras, principalmente porque Raven quería asegurarse de que Kasai estaría bien.
Por suerte parecía que el cachorro poco a poco iba levantando cabeza, y el grupo de Asriel logró mucho al mantenerse a su lado, parecía que prácticamente lo habían integrado por completo a su grupo, lo que era el más alto honor, Asriel no dejaba entrar a cualquiera.
Los buscadores informaron a Raven de que parecía que los Venefictores se habían ido sin sospechar de su presencia pero todavía era pronto para estar seguros.
Aún así, cuando la calma volvió a extenderse por la Manada de las Sombras, Raven pudo respirar un poco más tranquila y confió que todo estaría bien si volvía con los Titanes a proteger la ciudad.
- Volveré pronto, si pasa cualquier cosa o algo parece ir mal avisadme inmediatamente, estaré aquí en cuestión de segundos – Dijo Raven a los miembros del Consejo.
- Por supuesto Su Majestad – Asintió Elias, en nombre de todos.
El resto de los Titanes se despidieron del Consejo y después de cruzar un portal, cortesía de Raven, los Titanes volvían a estar en su enorme torre con forma de T.
Y durante un par de días las cosas transcurrieron todo lo normal que podían ir las cosas para los Titanes, y el conocimiento de La Manada de las Sombras, si bien consciente para todos, no cambió en absoluto el comportamiento del equipo...más o menos.
Había ocasiones que la trataban con más respeto y reverencia y otras en las que Kory dejaba al mando a Raven de un grupo y Dick dejaba a Damian al mando de otro cuando ellos no podían por una razón u otra.
Donna, sobretodo al principio, la trataba como tratarían a una Reina o en su defecto a una Princesa, Raven pensaba que era a causa de su educación y crianza con las Amazonas puesto que ellas también eran lideradas por una Reina y Donna se podía considerar la hermana pequeña de Diana, Wonder Woman y Princesa de Themyscira.
Después de un par de conversaciones, Raven logró convencer a Donna de que la tratara como lo había estado haciendo antes de descubrir que era Reina, dado que ella no había cambiado nada desde que se conocieron hasta ahora. Costo un poco al principio pero todo fue bien.
Garfield y Jaime la miraban con nuevo respeto y admiración pero su interacción con ellos no cambió mucho.
Y Damian...bueno, Damian es Damian y como de costumbre, el joven Robin actuó como si nada, pero también cabe resaltar que Damian, a pesar de las primeras impresiones cuando llegó al equipo hace años, siempre trató a Raven con respeto y la vio como una igual. El hecho que las cosas entre ellos no cambiaran en absoluto fue un enorme alivio para Raven, aunque ella no lo admitiera en voz alta.
Pero en fin, que nos vamos un poco por las ramas.
Que todo marchaba normal, pero la paz nunca dura demasiado y una mañana los Titanes recibieron una llamada a la que fueron llamados todos para estar presentes.
Grande fue su sorpresa al ver al mismísimo Batman mirándolos con su postura siempre firme y a su lado, visiblemente más relajado y casi indiferente a Red Hood, también conocido como Jason Todd.
- Buenos días, Titanes – Saludó Batman.
- Buenos días – Sonrió Jason.
- Buenos días, padre, Todd – Saludó Damian, con una ceja levantada.
- ¿Todo esta bien? - Preguntó Dick, algo preocupado, no era común que Batman les llamara y también se sorprendió de ver a Jason, creía que estaba en otro país o algo así, con él nunca se sabia – Jason, creía que estabas por Nueva York.
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La Manada de las Sombras
AdventurePor culpa de Zatanna las criaturas sobrenaturales se precipitan al mundo humano y ahora Raven se ve obligada a revelar un secreto que llevaba tiempo tratando de ocultar de los demás para ayudarla a mantener al mundo sobrenatural y humano juntos pero...