Escuela de Super Heroes ✔ || Spider-Witch

Capitulo 8

***
Eran las doce de la madrugada, yo seguía en los pasillos explorando toda la escuela como si fuera la primera vez que estaba ahí.

La escuela no estaba del todo oscura, había una que otra luz que estaba encendida pero tengo que reconocer que sí me estaba dando miedo.

Cuando pase por una habitación los ronquidos de alguién se hicieron presentes, dicha puerta tenía un estampado en donde estaba el nombre de la persona que ocupaba esa habitación.

Para mi sorpresa era el famoso Thor, la persona que me humilló y luego quería que fuera parte de los heroes.

Abrí la puerta y con sumo cuidado asome la cabeza, ahí estaba roncando con la boca abierta. Tenía mi teléfono junto a mí y no desaproveche la oportunidad de tomarle una foto.

Pero se me olvidó quitarle el sonido cuando saca una foto, eso hizo que se despertará, cerré la pierta lo más rápido que pude, pero procure que no sonará tanto, lo malo era que por donde yo estaba no había manera de esconderse.

Me giraba para todos lados hasta que la puerta se abrió bruscamente, cerré mis ojos esperando el regaño que nunca llegó. Con lentitud abri uno de mis ojos o el estaba más pequeño o yo más alta.

No entendí hasta que pude darme cuenta que estaba pegada al techo, casi como Peter lo hizo en la demostración de poderes. Me quedé ahí hasta que él entrara de nuevo a su habitación cosa que hizo segundos después que vio que no habia nadie.

Baje del techo como pude, suspire aliviada mientras recargaba mi cabeza en la pared y recuperaba el aliento perdido.

— ¿Wanda? — escuché una voz detrás de mí, como me agarró por sorpresa casi me voy de cara por perder el equilibrio pero unas manos sugetaron mi cintura haciendo que no tocará el suelo

Entonces pude ver quien era.

— ¡Peter! — fue lo primero que dije, respire un poco más rápido

— ¿Por qué tienes miedo? — eso me tomó por sorpresa

— ¿Cómo sabes que tengo miedo?
— pregunte aferrandome a los brazos de Peter y él aferrandoze a mi cintura

— Otra de mis habilidades es detectar los sentimientos de una persona — aclaró

— Las sorpresas no acaban contigo...

— Ni contigo

Me ayudó a pararme mejor, nos alejamos de ese pasillo al escuchar pasos acercarse, parese que la suerte no estará de mi lado por hoy. Pues el pasillo no tenía fin, tuvimos que entrar a un cuarto de mantenimiento para que la persona que escuchamos aproximarse no se diera cuenta de nosotros.

— ¿Como sabías que estaba aquí?
— susurre

— No estabas en la habitación era lógico que estabas explorando el lugar, cosa que se me hizo una mala idea — susurró

— Ni que lo digas, la suerte que me traigo es la mejor — dramatize

— ¿Por qué saliste de la habitación a estas horas de la noche? — me preguntó susurrando

— Después de la charla con el Dr. Stan Lee se me hizo imposible pegar el ojo, por lo que decidí explorar

— Pues tu exploración casi te mete en problemas

— Ahora que lo recuerdo, antes de que me asustaras, Thor casi me descubre...No se como, no sé por que me pegue al techo como si fuera una...

— ¿Araña?

— Andale justo eso — susurre con diversión

— El Dr. Stan Lee nos hablo de eso, dijo que es posible que las personas que tienen la "fución de poderes" compartan esas habilidades, eso explica el por que sentí que la mitad de mi poder era compartido

— Esto de la fución cada vez me vuelve más loca

— Ni que lo digas. Pero...una última cosa ¿por que estas pensando en Lorna Dane?

Casi se me olvidaba que el podía ver mis pensamientos, o gran parte de ellos.

— Ni siquiera yo lo sé, pero vi su biografía y me llamó la atención. ¿Eso es malo?

— Malo que estemos aquí a estas horas de la noche, debemos regresar antes de que nos descubran — asentí

— ¿Pero si la persona sigue allá fuera?

Ambos nos quedamos callados hasta que...

— Sí, sí, ya no me regañes Romanoff, ahora voy por las armas que quedaron en el cuarto de mantenimiento  — escuchamos la voz del Sr. Stark por el pasillo

— Maldición — murmure

Con Peter tratamos la manera de escondernos detrás de unas cajas. Stark entró pero para nuestra suerte, las cajas que tenía que mover eran las que nos cubrían.

La mano de Peter estaba en mi boca y la mía y en la boca de él, para impedir que dijieramos algo. Ambos cerramos los ojos pero los volvimos a abrir cuando sentimos que nada paso.

Las cajas que nos cubrían ya no estaban, pero Stark no nos había visto...