𝙁𝙖𝙞𝙧𝙮𝙩𝙖𝙡𝙚 | La vida de un hada no se comparaba para nada con lo que se describía en los libros de fantasía. Se parecían bastante a los humanos, lo único que las diferenciaba eran sus poderes y las alas.
También tenían problemas como cualqu...
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Salimos de casa después de una deliciosa lasaña.Mire a Izzy con una sonrisa.
-¡La ultima al claro es un árbol podrido!
Saque las alas y empecé a volar, mis alas eran mucho más grandes y fuertes que las de Izzy.Las suyas eran más pequeñas y de los colores de la apuesta de sol.Llegue mucho más rápido que ella al claro donde conocí a Rosie y A su familia y donde fue mi transformación.
-¿Nixie?
Cuando oí su voz me giré rápidamente, lo vi ahí. No me di cuenta cuanto lo extrañaba asta ahora.
-Jazz Jazz.
Corrí a abrazarlo sin importarme mucho los restos de sangre animal que tenía en los labios.
-No he parado de buscarte desde que te fuiste. ¿Sabes lo preocupado que estaba? ¿Qué estábamos? ¿Estás bien? ¿Por qué pareces de 18?
Su última pregunta me hizo reír.
-Soy un hada Jazzy. Pase por mi mayoría hace una semana. Siento mucho haberme ido así, no quería que vuestra familia se separara como lo hizo la mía.
Mi vista no abandonó sus ojos dorados, igual de hermosos que mis alas.
-¿Puedo tocar las alas? ¿Mayoría?
- Si Jasper, a las dos cosas- me separé un poco y estiré el ala para que la tocara- cumplí la mayoría de edad, ya son adulta- deje salir una pequeña risa al final.-¿En serio los vampiros brillan?
Mi pregunta lo dejo paralizado.
-Es que Luci no me deja que lo vea cuando le da el sol y él me dijo que vuestra familia también es de vampiros, solo quiero saber si es verdad que sois como una bola de discoteca, aunque no sepa muy bien que es eso- lo último lo susurre.
-¿No me tienes miedo?
-¿Tendría? Eres la mejor persona que conozco después de Rosie.
Un rayo de luz logró adentrarse entre las ramas de los árboles, vi la oportunidad perfecta.
(Pd: la primera vez quise escribir penetrar, pero luego pensé que hay mucha manzana podrida por aquí)
Levante mi mano y logre atraer la luz, para luego ver a Jasper con una sonrisa traviesa.
-Te diría que no lo hagas, pero te va a dar igual, ¿a que si?
Mi respuesta fue una risa acompañada de una redirección del la pequeña luz. Esta se estrelló en su cara y cuello.
