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"𝕷𝖎𝖑𝖞'𝖘 𝕽𝖊𝖛𝖊𝖓𝖌𝖊"
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—Eso es lo que voy a hacer, me comeré estos órganos por qué me amoldo al buen señor Jesús cuando me da la oportunidad y hoy me ha bendecido con otra oportunidad para seguir sus pasos —-confesó Preston, Arvin abrazo a su abuela, Emma se sentía humillada por las palabras del reverendo, siendo sincera cualquiera se hubiera sentido así.
De no ser por que Lenora agarró a su hermana por el brazo, ya estaría en la comisaría por haber atacado al despreciable hombre. Como había comentado, el no ganaría una pelea pero se sabía el salmo cuarto dormido.
Pero al parecer no tenía problema con humillar ancianas que lo único que hicieron fue cocinar lo mejor que pudieron solo por y para el.
El inepto de Preston Taegardin comió los órganos como si fuera lo peor servido en esa mesa.
Y una vez más Lily se quitó abalanzar contra el, pero una mano llegó a su hombro antes de que pudiera, para su sorpresa no era la de su hermana.
La miró y después al dueño, Arvin miraba fijamente al reverendo y con una mano abrazaba a su abuela y con otra impedía que Lily fuera contra el predicador. Sin dejar de wet al frente negó con la cabeza, sabía que Lily lo estaba mirando, la rubia no hizo más, fijo su mirada penetrante en el hombre.
Todos sabían de lo que era capaz la mayor de las Laferty, ella también sabía perfectamente de lo que era capaz.
Salieron indignados de la casa de Dios, Arvin azoto la puerta de su carro al entrar en el, Emma le había pedido personalmente no hacer nada a Lily, quien también azoto la puerta después de que su hermana entrara.
Estaba enojada y gruñía como si se tratase de un viejo cascarrabias.
Emma no se encontraba bien.
—No te preocupes por ese imbécil presumido, a puesto a que no tiene ni un centavo —declaró Arvin.
Lily recordó el dinero que le había ofrecido a su abuela, pero se rehusó a aceptarlo, hubiera sido diferente historia, pero le alegraba a la rubia que supiera cómo era verdaderamente el patan que tendría su hermana y abuela como reverendo. Que mejor que su verdadero ser como repelente.
