Capítulo 12 - Una promesa

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Las prisiones de Áscar se ubican en la parte más lejana de la tierra de Xsnoris. Selenix se había dejado conmover por la llegada de ese extraño hombre herido a su celda. El día que llegó ella planeaba huir, pero todo quedó frustrado. La condición de su llegada era paupérrima, dolorosas heridas sangrantes, y punzadas en todo el cuerpo dejaban vestigios de lo que fue la peor de las tundas que ella jamás había visto. Si bien es cierto que en más de una ocasión ella fue azotada por los guardias, pensando que había sido la manera más siniestra, nada se comparaba al dolor, y las gravísimas heridas que aquel hombre presentaba.

La profunda cicatriz del rostro le atravesaba toda la mejilla derecha, era una estocada limpia que lo hacía ver tenebroso y demasiado desalmado a simple vista. Era alto, de hombros proporcionados con su altura, y el cabello crecido más de la cuenta. Su ropaje estaba petrificado por la sangre cuajada, y cargaba toda la súplica del dolor. La mirada era lejana, impenetrable, y con cierto matiz de sufrimiento, ya nada quedaba de sus pupilas de tierra, el brillo solapado dejaba verse pálidamente, y estiraba a un cálido color mostaza. Sus pupilas eran una de esas cosas que nunca se olvidaban. A pesar de esa horrenda cicatriz su compañero de celda había adquirido características muy humanizadas, y era después de todo un hombre de principios.

Alexey, era un hombre formidable, a pesar de haber sido tomado como rehén en una de las últimas batallas que peleó, nunca se redimió ante el enemigo. Forzado a trabajar de manera esclavizante, era maltratado a diestra y siniestra. En una de las tantas ocasiones, cuando su sentido de justicia podía más que él terminaba enfrentándose a todo aquel que hiciera falta, y así fue que llegó con un pie en la fosa común y otra aferrándose a la orilla para no caer. Selenix, dentro de lo que cabía trató de aliviarle sus heridas, con la poca agua que les brindaban diariamente enjuagó sus heridas y pidió al cielo por misericordia y piedad para el muerto en vida que yacía junto a ella. Sus planes de huida, se vieron forzosamente pausado por la fuerza del momento, pero en contra partida en todo este tiempo se había ganado la gratitud de Alexey, así que sabía que tenía un aliado para ayudarla a huir en cualquier momento. Con su astucia y determinación había trazado modificaciones en su último plan de escape, y apenas el nuevo prisionero estuviera en condiciones de valerse por si mismo efectuarían la salida.

-No hace falta que se mueva -la voz salió apresurada y preocupada.

-En menos de lo que piensa, podrá salir de aquí, pero debe tener paciencia -como si le estuviera leyendo el pensamiento.

-Tengo la esperanza y convicción en que así será.

-¿Qué hay allá que la hace luchar con todas sus fuerzas y soportar las heridas? ¿Acaso no tiene un caballero que la rescate? -la pregunta la tomó de sorpresa.

- Y usted, ¿acaso tiene una damisela que rescatar? -la inquisición salió de sus labios con un tono de reprimenda. De tantas formas que puede recolectarse información y él decidía lanzar esa última pregunta muy indiscreta y un tanto irreverente.

-No me considero un caballero de armadura, pero si tengo asuntos que resolver una vez que logre salir de aquí. -su voz sonaba acongojada al recordar tal vez, el asunto que debía resolver.

-Puede contármelo, y yo como recompensa le cuento mi historia. De todas formas, hace un buen tiempo no tengo el placer de conversar con alguien.

-Su rostro, me parece muy particular, como si conociera a alguien de su linaje. Es evidente que a usted no la conozco, y me atrevo a decir que nunca antes la vi, pero hay algo que me resulta familiar en su ser. Pero, le acepto el trato. Mi nombre ya lo conoce soy Alexey de Dynosdy.

-De Dynosdy, las afamadas tierras de Dynosdy. Nunca he ido, pero si había recibido informes de allí. Rey que trata de mantener la paz con las tierras vecinas se merece todos mis respetos. O al menos, hasta dieciséis años atrás, la situación era esa. Hace tanto que mis ojos han olvidado cómo es el exterior, como luce todo fuera de estas cuatro paredes. -La tristeza y la nostalgia era más que evidente en todo lo que Selenix había dicho a su compañero de celda.

-¿Me concede saber el nombre de mi salvadora?

-Mi nombre es Selenix de Xsnoris. Y no me enorgullezco de ello. -Lo último había sido pronunciado con un sabor amargo.

-El placer es todo mío, gran Selenix de Xsnoris. Lo último que imaginaba era encontrarme con una persona de la realeza en esta celda. Creo que las razones de su reclusión en este lugar inhóspito no es un secreto para el mundo de allá afuera, o ¿me equivoco?

-No, no se equivoca. Pero temo decirle que sean cuales sean las razones que crea el pueblo están cegados por la más terrible de las blasfemias pronunciadas en mi contra.

-Pues, déjeme saber su verdad -anunció con mucha ansiedad por conocer su historia.

Después de contarle los pormenores de lo que el rey Erich había dicho en su contra, ella pasó a ser todo oídos para saber cómo su interlocutor había terminado peor que ella.

Alexey comenzó -La contienda que perdimos fue la que me puso en esta posición, tras intentar recuperar unas tierras invadidas por un grupo de bárbaros comandado por la mano derecha del Rey de Xsnoris, mi padre me envío a dar batalla para recobrar lo nuestro, defender a nuestra gente y conciliar la paz de nuevo, pero todo salió mal. El ejército enemigo era superior en armas, defensa y sanguinariedad. Uno a uno, como si fueran cayendo desde un gran acantilado nuestros guerreros fueron pereciendo bajo el aguzado hierro de la espada. Menor en ejército, nada pudimos hacer más que luchar y defender lo nuestro. Fui tomado como esclavo por el ejercito contrario, mi vida después de todo era una garantía para seguir acumulado tierras para Xsnoris, el rey intentó hacer un trueque: mi vida a cambio de que mi padre entregara un pedazo más de sus tierras. Pero a pesar de tomar los pueblos colindantes, él nunca me liberó, y mando decir que yo había muerto. Desde entonces ando vagando sin retorno, sin poder huir hacia mi tierra, a recuperar mi vida, mi familia, ver la cara de mi esposa e hijos una vez más, que es todo lo que deseo. Cinco años ya de esto, cinco años sin retorno ni descanso, he intentado de todo con tal de huir, pero siempre termino más alejado que antes de mi reino.

-La vida muchas es una jaula llena de injusticias, y sufrimiento. Pero confío en que todo estará mejor algún día, pero solo si actuamos y logramos ordenar todo lo que pasa en nuestro entorno nosotros mismos. -Selenix, trataba de infundirse valentía, a pesar de tanto sufrimiento todavía mantenía el corazón joven y esperanzado.

-Encontraremos su tumba -le observó directamente a los ojos mientras lo prometía- y solo después de encontrarla, yo podré partir para mi tierra. Es una promesa real, inclaudicable.

-No puedo rechazar tan noble propuesta, pero tampoco es mi intención retrasarte en tu odisea por volver a tu tierra luego que salgamos de aquí. Así que, esperemos que el tiempo no nos haga esperar más de la cuenta para ver realizadas nuestras metas. Te deseo el mejor de los porvenires Alexey, benignamente.

-Las promesas nunca se rompen, Selenix. Yo prometí a mi esposa volver, y no descansaré hasta hacerlo, pero también te prometo encontrar la tumba de tu hijo. -Parecía demasiado decidido.

Las promesas son como sogas que nos atan, hasta no cumplirlas, el nudo sin importar de qué tipo sean, no nos liberan. Y esta era una verdad muy bien comprendida por Alexey.

Todo estaba preparado ya, solo faltaba que el momento fuera el más oportuno para salir en búsqueda de lo incierto. No era seguro lograr la huida, peor no intentarlo dolía más que cualquier herida o castigo que pudieran recibir al ser atrapados. La realidad puede llegar a ser múltiple, por eso depende mucho de lo que creas logar para que eso suceda. Las personas creamos nuestra realidad, lo que pasa en nuestro entorno, solo es cuestión de creer en que todo es posible. 

***

Hola, lectores de wattpad. 

He vuelto con un capítulo más. 

Pensaba en pausar esta historia por el momento, he estado con muchos compromisos, pero al final pude  continuar escribiendo un capítulo más. 

Espero que les guste, y puedan dejarme su apoyo con sus comentarios y una estrellita. 

 Opinen sobre Alexey, qué les parece este personaje. 

Les mando cariños y saludos.

PatyFlor


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