04.

351 29 42
                                    

Ya había pasado una semana y todavía no tenía noticias sobre Claude, estaba empezando a preocuparse de verdad. La idea de que hubiese tenido un accidente o algo similar le estaba empezando a quitar horas de sueño.

- No debí echarle el otro día… - Se dejó caer sobre su cama mientras miraba al techo - Soy el peor novio de la historia, deberían darme un premio o algo.

El sonido del timbre le distrajo. Terminó por levantarse y dirigirse a la puerta, nada más abrirla pudo ver una gran sonrisa del otro lado.

- ¿No ibas a ir con Xavier? – El peliverde hizo un pequeño puchero mientras entraba a la casa.

- Íbamos a ir al parque de atracciones, pero Lina le ha llamado para yo que sé qué cosa y hemos tenido que cancelarlo, así que me he acordado de ti y he venido – El albino le miró mientras cerraba la puerta.

- ¿Siempre me usas de segunda opción o qué? – El peliverde sonrió algo avergonzado.

- O de tercera, depende – Los ojos azules de Bryce se abrieron de par en par - ¡Era broma, era broma!

La conversación se vio interrumpida por el móvil del mayor, alguien le había enviado un mensaje.

- ¿Quién es? – La característica curiosidad de Jordan se hizo presente.

- Es Chris…Quiere que vaya con él a dar una vuelta esta noche – El peliverde le observó con su clásica mirada de ‘’te lo dije pero no me hiciste caso’’.

- Hazme caso Bryce, está colado por ti – El albino le observó antes de rodar la mirada y contestar - ¿Vas a ir?

- Es nuestro jefe y amigo, ¿por qué me iba a negar? – La respuesta de Bryce fue suficiente para el peliverde hasta que otra pregunta se hizo presente en su cabeza.

- Oye, ¿Claude te ha llamado o algo? – Escuchar ese nombre le hizo detenerse por completo – Vale, intuyo que no…

- La verdad es que estoy preocupado por él, ¿y si le ha pasado algo? – El menor le dio un pequeño golpe en la frente.

- Es Claude, siempre encuentra una forma de superar cualquier cosa, no te preocupes más – El albino suspiró poco convencido – ¿Qué estaba diciendo? Ah sí, fijo que le gustas.

- Mira que eres pesadito a veces, ¿eh? – El peliverde rió antes de extender su mano hacia Bryce - ¿Qué haces?

- Una apuesta. Si estoy en lo cierto me debes 10 kilos de helado, pero si aciertas tu no vuelvo a mencionar el tema de nuevo y hago tu parte en la heladería durante una semana – Bryce le observó desconfiando levemente.

- No me parece muy justo, pero cualquier cosa con tal de que me dejes ya tranquilo – Estrechó su mano con la del peliverde y éste sonrió.

- Disculpa por llegar tarde, había más tráfico de lo que pensaba – El coreano negó sonriendo antes de subir en el auto del peliazul

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

- Disculpa por llegar tarde, había más tráfico de lo que pensaba – El coreano negó sonriendo antes de subir en el auto del peliazul.

El mayor condujo durante unos minutos hasta que llegaron a una especie de parque, entonces ambos bajaron. Bryce pudo sentir como su amigo tiraba levemente de su muñeca entrando al parque.

- Wow, esto es…precioso  -Los ojos brillantes del albino se clavaron en el cielo.

- Jordan mencionó una vez que te encantaban las estrellas, y cuando recordé este lugar quise que lo vieras – Bryce correspondió la sonrisa cálida que Chris le brindaba – Ahora vuelvo, no te vayas muy lejos, ¿eh?

El albino negó riendo antes de ver cómo el peliazul se iba. Sus ojos volvieron a clavarse en el cielo, desde aquel lugar podía ver el cielo nocturno totalmente despejado, incluso las estrellas parecían brillar con más intensidad.

Cuando Chris volvió, Bryce pudo ver que traía dos cafés en la mano, él cogió uno de ellos con una sonrisa. Los dos hablaban sin retirar su mirada del cielo, no querían perderse ni un solo segundo de aquella vista.

Poco a poco, el albino sintió la cercanía que el peliazul estaba estableciendo. Al principio había dejado su mano sobre la suya casi por accidente, pero poco a poco comenzó a acercarse hasta que deslizó su brazo por la cintura de Bryce, él retiró su mano con delicadeza.

- Chris… ¿hay algo que quieras decirme? – El ojiverde sonrió levemente antes de mirar cara a cara al menor.

Lo que vino a continuación le dejó en shock. Acababa de declararse, había dicho que sentía algo por él, y en ese momento Bryce no sabía cómo hacer que la tierra le tragase.

- Chris, yo… - Desvió su mirada al suelo – Eres un amigo y jefe genial, pero… - suspiró antes de elevar la cabeza – Lo siento mucho, mi corazón ya lo tiene otra persona.

- La verdad es que lo suponía – el peliazul sonrió – No pasa nada, entonces hagamos como que esto no ha pasado, simplemente recordemos esto como dos amigos viendo las estrellas juntos.

El albino sonrió, se alegraba de ver que no había acabado mal, no le gustaba la idea de enfadarse con Chris.

Tras un rato, los dos pusieron rumbo de nuevo hacia la casa del menor, él sacó su móvil del bolsillo para después escribir un mensaje.

‘’…Te debo 10 kilos de helado’’

MALDITO ERROR ;; Inazuma Eleven ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora