Cap.33

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-Y Valeria como siempre, haciendo todo a su manera –dijo Jack y mi hermana soltó una carcajada

-Cállate pulgoso, ahora que lo recuerdo, tu mate me escucho gritándote que no sabía dónde estaban tus calzoncillos batman, por teléfono –le contesté sin soltar a mi mate y escuché las risas de todos, hasta de mi mate

-Oye, lo vas a asfixiar –dijo mi hermana separándome de mi mate, fue inesperado, en cuanto toqué el piso me tambalee y mi hermana me sostuvo antes de que callera --¿estás bien? –Preguntó preocupada y me sentó en el mueble –dime la verdad, no es porque utilizaras tus poderes para cerrar una herida, ahora dime ¿Qué hiciste? –dijo histérica

-Antes de que curaras su herida, yo pude sentir gracias al amuleto que le di que no estaba bien –dije y comencé a toser, y lo que esperaba, tosí sangre

- ¿Qué fue lo que hiciste? –preguntó Vanesa dándome un pañuelo para que me limpiara la sangre

-Estaba muriendo, mis poderes lo matarían, solo tiene 9 años, y es humano, el amuleto lo protegió, por eso no murió antes –le dije

-No –negó

-Para poder detener su hemorragia sin que muriera le di energía, estaré bien en unos minutos –completé sentándome en posición india en el sofá

- ¿Estás idiota? –preguntó Vanesa dándome un golpe en la cabeza

-Ya para, sabes que un humano no aguantaría mi fuego en esas condiciones, me esforcé mucho en curarlo, deberías darme un premio en vez de andar pegándome –dije cruzándome de brazos --¿verdad que si pulgoso? –le pregunté a Jack

-Es cierto, ese es mi trabajo –dijo ahora golpeándome él

-Estás muerto –chillé levantándome, cuando me iba a lanzar a golpearlo unas manos se enredaron en mi cintura –suéltame, déjame aunque sea golpearlo un poco –chillé tratando de soltarme y Jack solo se reía y hasta me saco la lengua –te torturare maldito pulgoso –chillé logrando soltarme, pero cuando lo hice tuve una mejor idea –no, mejor no te regalo la moto que tanto quieres –le dije con una sonrisa y me senté en la piernas de mi mate, quien me apretujó y puso su cara en mi cuello, Dios se sentí tan bien

-Así que pequeña Ali, la razón por la que sentimos que eras importante para nosotras es por que eras la mate de Jack –dijo Vanesa

- ¿Cómo no lo pensamos antes? Jack estaba raro, bueno... más de lo que ya es –agregué

-Oh, gracias por el alago enana –dijo Jack remarcando la última palabra

-A mí no me hables a si maldito pulgoso –le dije me iba a levantar, pero mi mate no me lo permitió

-Si se callan les daré chocolate –gritó Vanesa haciendo que nos calláramos

-Pero no estamos discutiendo ¿verdad que no hermanita? –preguntó Jack dándome un codazo

-Es cierto, el pulgoso tiene razón –le dije con mi cara de ángel –pero aquí la que necesita comida soy yo, necesito energías, así que ¿Dónde está mi chocolate? –chillé emocionada

-Es cierto, te preparare verduras, sanaras más pronto –me dijo Vanesa burlona haciendo que Jack soltara una carcajada

-Sé que no te haré cambiar de opinión, pero si caigo no lo haré sola –dije agarrando a Jack –solo comeré si él lo hace también –dije ahora yo con una sonrisa

-Bien –dijo Vanesa caminando a la cocina, con su mate

- ¿Qué hiciste? –preguntó Jack histérico

-Oh, cállate –murmuré dándole una mordida a mi hamburguesa, cuando iba a hablar lo callé –te juro que, si le gritas a mi hermana, no te daré la moto y te quitare el auto, y no solo eso, dañare todos los que compres –lo señale con un dedo haciendo que se sentara en el mueble enojado –no soy tan mala –dije tirándole una bolsa con otra hamburguesa --¿pizza o hamburguesa? –le pregunté a mi mate y a Ali

-Pizza –dijo Ali

-Lo mismo –dijo mi mate

-Claro, están en la mesa –dije señalándola y bajando del regazo de mí mate

- ¿De dónde la sacaste? –preguntó Ali

-Mi hermano... no él –dije señalando a Jack –es un idiota que ama la vida sana, el idiota cree que soy conejo para darme de comer verduras, pues, tienes que aprender trucos para fastidiarlo comiendo comida chatarra en sus narices –dije y le di una mordida a mi hamburguesa

-No sé por qué ya me esperaba esto –dijo Vanesa dándome un pote de Nutella con fresas

-Tal vez porque pensamos iguales –dije obvia

-Esperen, ¿Qué pasa con la escuela? –preguntó Jack de repente

-Esperen ¿están en la escuela? –preguntó Ali

-¿Me estas fastidiando? Solo entramos por que el idiota de Andrés así lo quiso, hicimos ese maldito curso hace 3 años, bueno 4 para ti –chillé y mi teléfono sonó –oh, hablando del rey de roma –dije cuando vi una llamada de él

En la llamada

-Cachorrito –canturree

-Que no soy un estúpido cachorro –gritó Andrés haciendo que me alejara el celular

-No me grites brujo de pacotilla –dije solo para seguir molestándolo

-No es momento para bromas –dijo se escuchaba agitado

-¿Qué pasa Andrés? –pregunté levantándome del sofá

-Nos encontraron –dijo, se escuchó un grito a lo lejos

-¿De qué diablos hablas? –chillé

-Nos encontraron, Pitio descubrió que yo estaba planeando algo, no sabe qué, pero sospecha que lo traicione, y no sé cómo diablos paso, demonios salieron de todos lados y ...suéltala maldito imbécil –gritó y se cortó la llamada

Fin de la llamada

-Tenemos problemas –dije mirando a mi hermana –los encontraron –dije y ella entendió

- ¿Qué encontraron a quién? –preguntó Jack

-Es mejor que te quedes tranquilo, conmigo nerviosa ya es suficiente –chilló Vanesa comiéndose las uñas

-Necesito energía, no puedo hacer nada a si –dije y la dos miramos a Jack

- ¿Qué ... --no terminó de hablar por Vanesa lo sostuvo y lo comenzó a arrastrar al bosque conmigo detrás, creo que los demás nos siguieron no estoy segura

En cuento llegamos Vanesa lo sentó en el suelo y entre los 3 formamos un triangulo

-Bien Jack, necesito un favor –dije y el asintió –Vanesa me dará un poco de energía, pero sabes que nuestras energías son opuestas, si lo hacemos de esa forma podemos sufrir heridas internas, necesitamos una antena –dije yo

-Nosotras te dimos la capacidad de no ser herido por nuestros poderes a no ser que queramos –dijo mi hermana

-Quiere decir que te utilizaremos de antena –hablé ahora yo 

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