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???: Vine a llevarte a casa. -Con una sonrisa-

Randy: ¿QUE?

-°-°-°-°-°-°-°-°-°-°-°-
-Te Llevaré a casa...? -Dice intentando sonar lo más obvio posible- ¿O tienes que hacer algo?
-Uh... Si! Tengo que estudiar con un amigo. -Señala al pelirrojo que estaba sentado en una de las sillas de la cocina-
- ¿Y acaso me lo vas a presentar?-

-Mmmm, no lo sé. Él es muy cerrado y tímido.

-Aparece Hiroshi acercándose a Randy y le tapa la boca-Mucho gusto señor, yo soy Hiroshi Izumi. -Hace una reverencia- Usted debe ser el padre de el joven Randy, verdad?

- Claro! Soy Frank Cunningham, mucho gusto. Eres asiático, cierto?

- Así es. -Sonrie-

-Bien, ya se conocieron! -Sonrie falsamente- Ahora vamos Hiroshi, tenemos tarea. -Se lo lleva del brazo-

-Randy, ¿no pueden hacer la tarea mañana así el chico se va a su casa? Quiero pasar tiempo contigo.

-No, él no se puede ir porque es un estudiante de intercambio, por ende, vive aquí.

-No se si yo lo llamaría vivir-

-Empuja a Hiroshi- Randy, podemos hablar? -Ve al pelirrojo que cayó en el sillón con la cabeza colgando y los pies arriba- en privado...

-Ayuda a pararse a Hiroshi- No es descortés?

-Esta bien Randy, ve y habla con tu padre.

-Gracias Hiroshi, -Hace una sonrisa forzada- Vamos papá.

Randy guío a su padre a el patio de la casa dejando a Hiroshi solo en la cocina viendo su tarea mientras se preguntaba porque mierda habían letras mezcladas con números y signos.

- ¿De que querías hablar papá?

- Te quería hablar de ese chico Hiroshi...

- ¿Q-que sucede con él?

Frank: Solo... Dime por favor que no estás saliendo con él.

- ¿QUE? Claro que no! -Se sonroja-

-Tampoco te gusta.

Dios, no!

--Suspira- Que bien

- Por qué? -Pregunta con intriga subiendo una ceja, su padre era raro a veces.

- Pensé que eras gay.

- Pues no.

-¿Y él es gay?

- ¡No!

-Bien, no te enojes Randy -Dice mientras le sacude el cabello-

-¿Ya podemos entrar? Tengo que explicarle algo a Hiroshi.

-Claro. -Empieza a caminar hacia el interior cuando frena- ¿Estás seguro de que no quieres venir a casa?

- Sí. -Responde seco-

-Ok

Los dos entraron a la casa cuando vieron a Hiroshi agarrándose de la cabeza queriendo entender lo que le habían mandado de tarea.

- Oye, está bien?

-Uh? Claro -Con un tono frustrado-

- ¿Quieres que te lo explique? -Se sienta a su lado-

- Por favor. -Recarga su cabeza en la mesa y hace puchero, Cunningham lo tenía que aceptar, era tierno a pesar de tener milenios-

- Bien. -Le comienza a explicar cuando nota que su padre seguía ahí- ¿Te vas a ir o...?

- Oh, claro! Ya me voy.

El mayor estuvo apunto de irse cuando por la puerta entró un chico pelinaranja.

- Oye Cunningham! A que no adivinaras que -Se da cuenta de la presencia del mayor- Señor Cunningham, hola

- Hola Howard, que gusto verte, bueno, yo me voy, adiós.

-Bien. Oye Cunningham! Vamos al foso de juegos?

-Lo siento Howard, tengo que explicarle algo a Hiroshi.

- Oh, vamos Cunningham! No puedes hacer esto!

-:Howard, lo siento, sí?

-¿No sé lo puede explicar alguien más? En serio es importante esto

-¿Cómo quien? -Mira a su amigo, no puede creer lo egoísta que puede llegar a ser a veces

- mmm... Ya sé! Se lo puede explicar Theresa

- ¡No! ¿No recuerdas que ella estuvo en el libro y descubrió que yo era el ninja?

- Ammm, de echo podemos seguir más tarde, usted salga con el joven Howard.

- ¿Seguro?

-Asiente- Podemos seguir más tarde.

-Suspira- Bien, vámonos.

- Si!!! -Comienza a tirar puños al aire y celebrar-

- Pero tú -Señala a Hiroshi- Vienes conmigo.

Hiroshi: Q-que?

Howard: No! No!

- O vamos los tres o vas tú solo. -Realmente no puede dejar solo a Hiroshi, podría ser peligroso

- Cunningham, no hagas esto.

-Yo no voy a ir a un lugar solo para desperdiciar mí tiempo.

-Ya te lo dije Howard, decide.

-Claro que no!

- Tic tac Howard.

- Mmmmm... ¡Bien! El libro viene con nosotros.

-No! Me rehuso a ir a un lugar con ese nombre.

- Vamos, por favor, prometo que te divertirás

-Agh, bien, como quieras.

- Listo, vámonos -Sacude la cabeza en son burla a Howard

- Maldito Cunningham, me las pagarás.

-Te escuché

-"Ti iscichi", estúpido Cunningham.

- Oye! -Golpea a Howard en el brazo mientras caminaban hacia la puerta

Luego de eso, los tres salieron hacia la parada del autobús para ir al foso de juegos.

¦𝐋os 𝐋ibros 𝐍o 𝐒e 𝑬𝘯𝘢𝘮𝘰𝘳𝘢𝘯 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora