No hablaré de mi amor♡ - Lumity

6- Luz.

Nota: Este capítulo es un poco más largo de lo usual. Espero que eso sirva como compensación por tardar en actualizar.
Así que, busquen un lugar cómodo para leer  y ,¡disfruten el capítulo!
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La casa búho era bien conocida entre los habitantes de las islas hirvientes por ser el hogar de la bruja más poderosa del lugar, nombrada "La Dama Búho", quién residía junto a un temible demonio de baja estatura, una carismática chica humana quién por un tiempo fuera su aprendiz de bruja, y su más reciente adición, la que fuese líder del aquelarre del emperador hasta hacía unos días, y con quién la bruja compartía lazos de sangre.

Sin embargo, Edalyn Clawthorne había perdido recientemente su capacidad para utilizar la magia debido a un desafortunado incidente relacionado con Belos, y con un hechizo que provocó que aquella maldición que la atormentaba por años, fuese compartida con su propia hermana.

Se sentía débil, por primera vez en décadas, y eso no ayudaba mucho a mejorar su estado de ánimo.

Casa búho- 6:37 P.M

–Lilith...¿Quieres dejar de hacer eso? Me estás distrayendo de las lecciones de magia...– le susurró Eda a la mujer que se encontraba a su lado.

Era la segunda vez que aquello ocurría.

–Que sorpresa, Edalyn, cuando éramos jóvenes era yo la que estaba interesada en los estudios y tú sólo te dedicabas a causar problemas...–le respondió, con prepotencia– se podría decir que hemos invertido los papeles–sonrió de forma irónica.

La hermana de Eda volvía a hacer una pequeña bola de papel enrollada con la yema de sus dedos, ignorando la petición de su hermana menor.

Evidentemente, no tenía el mínimo interés en aprender aquellas lecciones.
Se la había pasado las últimas horas tratando de provocar a su hermana, quien intentaba prestar atención a las clases de magia que desinteresadamente le impartía Luz, la chica humana.

Lilith no tenía otro lugar a donde ir, así que se resignó a vivir con su hermana y sus inquilinos, en el exilio y convertirse en una prófuga de la ley a su lado, después de aquellos incidentes dónde estuvo en peligro la vida de todos los habitantes de la Casa Búho.

Digamos que ella tampoco se encontraba del mejor humor después de haber perdido su magia, así como aquél importante puesto en el aquelarre del emperador.

Sin embargo, muy en el fondo, se alegraba genuinamente de poder estar reunida con su hermana de nuevo, y de por fin haberse librado de aquella manipulación por parte de Belos,  después de tantos años.

–¡Es suficiente!– gritó Eda al sentir una tercer bolita de papel enrollado, topar con su brazo–Luz, por favor, dile algo...–

–¡Hey! ¡Presten atención ustedes dos!, Ésta parte es muy importante.- soltó la chica, volteándose para encararlas.

–Pero, es ella la que...–una cuarta bola de papel cayó en el rostro de Eda antes de poder terminar la frase.

La Dama Búho le lanzó una mirada asesina a su hermana. Sus ojos, ahora con heterocromía, destellaban con furia.

–Ugh, ya no hay más papel...–dijo una decepcionada Lilith. Se resignó a fingir que prestaba atención.

La chica humana les dió la espalda nuevamente, y se dedicó a terminar de dibujar aquél glifo que les serviría para realizar el hechizo de luz, en una pizarra instalada en su propia habitación.

Se le notaba un tanto ausente; definitivamente no era la misma de todos los días. En las últimas horas había confundido varios conceptos muy simples que ya dominaba, y actuaba con cierta torpeza.