†Inesperado†

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Dios.

No podía creer que esto de verdad estaba pasando.

—Ah~ si... Así, continua así... —murmuraba el chico totalmente cegado por el placer arqueando su espalda.

Cada bombeo y movimiento hecho lo hacían estremecer, ¿Quien imaginaria que acabaría en esa situación?
Ambos cuerpos sudorosos encontrándose en cada choque, el calor emanando de los mismos y la música sonando de fondo.

—M-Mierda ¡Continua!~

—¿Te gusta así, precioso? —las caderas del pelinegro se movían con cada vez mas fuerza encontrándose con las contrarias mientras que seguía enterrándose en aquel maravilloso canal. —Vamos pequeño grosero, muestrame cuanto te gusta. —susurro roncamente inclinándose para sostener una de las protuberancias de su pecho entre sus dientes y tirar de ella.

TaeHyung arqueó su espalda abriéndose más de piernas para sentir mas de lleno aquel jugoso trozo de carne que desaparecía en su trasero con cada embestida.

Nunca se imagino llegar a esta situacion, al principio sus ojos estaban puestos sobre el bonito castaño con el que compartió un par de canciones, de verdad que le había gustado, pero por culpa de Lee TaeMin todo se había ido al carajo.

Luego fue a la barra buscando consuelo en el alcohol, donde conoció al sexy bartender de linda sonrisa, comenzó a hablar con el chico dejando ir su pena, mientras que este le decía que con una simple Mimosa no ahogaria la misma, decidiendo servirle unos cuantos tragos mas fuertes, impresionando al pelirrojo con sus trucos.

Y entre trago y trago, mientras que su lengua se soltaba y empezaba a hablar de su pésima suerte con los chicos, termino enrollándose con el chico en un rincón, ¿En que momento terminaron en una habitación? No lo sabía. Pero con la mente nublada como la tenia y lo mucho que quería desahogarse termino desnudo y con el pelinegro entre sus piernas.

Y vaya que el chico era bien dotado, sabia lo que hacía además.

—¿Me dirás tu nombre entonces, precioso? —murmuro lamiendo el pezón y elevo su vista hacia el pelirrojo quien era un desastre de gemidos.

—Tae... TaeHyung...

—Oh, TaeHyung... —el chico abandono el interior del otro menor, recibiendo una queja por parte del otro y lo hizo girar acomodándolo a su antojo, haciéndolo apoyar sus brazos y cabeza en la cama, con su trasero alzado y las piernas abiertas apoyadas en sus rodillas, quedando totalmente expuesto. Entrando nuevamente de una estocada provocando un gemido ahogado en TaeHyung quien escondió su rostro en la almohada. —yo soy HoSeok... Es un placer.

—Oh, JiMinnie

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—Oh, JiMinnie... No sabia que sabias usar tu linda boca de esa forma... —murmuró Min gimiendo cuando el chico succiono su miembro y lo introducía hasta donde podía rozando su campanilla con el glande.

¿Quién te crees que eres? •YM•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora