Del odio al amor (número 5 y tú)

La Comisión

-Puedo regresar en otro momento si quieren - Luther volteo a otro lado tratando de no hacer de la situación algo incómodo -
-Aggg - escuché a cinco quejarse en el piso -
-T/N: No hacíamos nada - dije poniéndome de pie y acomodando mi camisa. Estaba roja -
Cinco se levantó y sobaba su cabeza, me fulmino con la mirada e hice una mueca. Me disculparía con él más tarde.
-¿Que es todo esto? - preguntó Luther con intenciones de no comentar nada sobre lo que había visto -
Quería responderle pero ni si quiera yo sabía lo que era.
-Un mapa de probabilidad - cinco tomó su taza de café y dio un sorbo, a esta altura ya estaría frío -
-T/N: ¿Probabilidad de que? - pregunte mientras hacía lo mismo que él -
-De muertes que salvarían el mundo-respondió-
No había tenido el tiempo de apreciar lo que número 5 había hecho, recorrí esas cuatro paredes viendo cada una de sus anotaciones. Era un completo arte, ciencia.
-T/N: Son cuatro - comenté después de haber analizado bien el mapa -
-¿Dices que una de esas cuatro personas causa el apocalipsis? - preguntó Luther tratando de comprender lo que estaba pasando -
-No, digo que sus muertes podrían evitarlo - respondió cinco sarcásticamente -
- Amm - Luther se quedó callado tratando de pensar - No lo comprendo - dijo finalmente -
-T/N: El tiempo es volátil - me había costado un par de segundos entender lo que cinco planeaba, había sido fácil y quería pensar que era por mis propios méritos y no por la conexión que ambos tenemos - La menor alteración de los sucesos podría tener muy diferentes resultados en la continuidad temporal -
-El efecto mariposa - complementó cinco volteándome a ver, al igual que yo parecía sorprendido de que hubiera captado- Así que lo único que necesito es encontrar a las personas con la mayor probabilidad de afectar la línea temporal, sean quienes sean y...
-T/N: Matarlas - la idea me parecía horrible pero sabía que era nuestra única opción para sobrevivir -
Luther se acercó a la pared para poder ver más detalles.
-Milton Green, ¿es un terrorista o algo así? -
Tome un cuadernillo y pluma y comencé a apuntar cada uno de los nombres que cinco había anotado en la pared.
-Me parece que es un jardinero - dijo tranquilamente mientras me veía anotar-
-No están hablando en serio - Luther me miraba, sabía que esperara que interviniera- Oye, esto es una locura cinco, ¿no dirás nada, ____? - moví mis hombros sin darle una señal clara -
Cinco sacó un estuche debajo de su cama y comenzaba a abrirlo, había un arma.
-T/N: ¿De donde sacaste eso? - le pregunté
-Es de papá, ocho. Creo que que la uso para matar un rinoceronte, es parecida al modelo que usaba en el trabajo - estaba recargándola y observando a profundidad el arma- es cómodo y muy confiable. En el cajón hay un kit de cuchillos y estrellas para ti, ___. Se lo mucho que te gustan y las necesitarás.
A pesar de tener mis habilidades mentales y de telequinesis, papá nos había enseñado a mis hermanos y a mi a saber combatir, poder defendernos ante una pelea sin nuestros poderes. La especialidad de Diego eran los cuchillos y a mi me había fascinado el concepto así que le pedí que me enseñara a manejarlos. No era tan buena como él pero podía dominarlos a la perfección y me hacía sentir más cómoda. Vi una pequeña arma al lado de mis cuchillos y decidí también tomarla.
-No pueden hacer esto, ese Milton es solo un hombre inocente -
-T/N: Son matemáticas básicas - comenté mientras tomaba un par de cuchillos y los ponía sobre mi bota - su muerte podría salvar un millón de vidas -
-Y aunque no hagamos nada - siguió hablando cinco - va a morir en cuatro días, el apocalipsis no perdona a nadie -
-No hacemos estas cosas - dijo Luther horrorizado -
-Tú no vas a hacer nada - hablamos cinco y yo al mismo tiempo - nosotros lo haremos -
-No dejare que mates a personas inocentes - dijo firmemente Luther - no me importa cuantas vidas salven -
-T/N: Intenta detenernos -
Cinco camino hacia la salida y estaba por acompañarlo cuando Luther me jalo del brazo y me tomo.
-No irás a ninguna parte - dijo mientras me cargaba -
Luther me sacó por la ventana, sabía cuales eran sus intenciones y no me gustaban. Cinco volteo rápidamente poniéndose a la defensiva y le apuntó con el arma.
- B á j a l a e n e s t e i n s t a n t e - parecía furioso -
Sabía que podía zafarme fácilmente, no sería ningún problema para mi enfrentarlo, a menos que me dejara caer; aún no dominaba el controlar todo mi cuerpo para volar, podía mover objetos pesados e incluso levantarlos. Pero hacerlo conmigo era incluso más difícil de lo que parecía.
-T/N: Por favor, Luther - dije soltando una pequeña risa - ¿es en serio? -
Volteo a verme, se arriesgaba. No sabía cómo reaccionaría cinco o peor, como lo haría yo.
-Baja el arma - fue todo lo que le dijo Luther a cinco- hoy no matarás a nadie. Sé cuanto te importa, no me obligues a hacerlo -
Comencé a preocuparme, creí que era una simple broma pero de verdad estaba dispuesto a lanzarme.
-Es ella o el arma. Decide -
Pasaron un par de segundos hasta que Luther se decidió a tirarme por la ventana. Cerré los ojos y después sentí como tocaba el piso. Cinco me tomaba de la cintura y jalaba de ella, había logrado atraparme.
Respiré profundo mientras él me soltaba.
-T/N: ¿en serio me lanzaste? Dios -
-Se que ambos siguen siendo buenas personas - volteo a ver a cinco para dirigirse a él - o no te habrías arriesgado tanto para regresar y salvarnos a todos. Pero ya no estás por tu cuenta.
-Hay una manera - propuso cinco - pero es casi imposible -
-T/N: ¿Más que lo que te trajo de vuelta?
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Nos encontrábamos en el carro, estaba sentada en la parte de atrás y estiraba mis pies y piernas. Teníamos un destino, el plan era claro y simple.
-Yo sólo quería decir - dijo Luther - que no vi nada de lo qué pasó en la habitación antes. Ya saben, entre ustedes dos, no es algo que me incumba - se notaba nervioso - a menos que quieran hablar sobre eso y...
-T/N: No, Luther - lo interrumpí, era más que obvio que él tampoco se sentía cómodo- déjalo así -
Soltó un largo suspiro.
-También quería pedirte perdón - me dijo - no era mi intención aventarte, pero la situación lo requería, ¿si me entiendes? -
-T/N: Pudiste tomar a ese maniquí - estaba viendo el paisaje de la carretera pasar ante mis ojos - parece que cinco se preocupa más por el que por cualquier otra cosa en el mundo -
-No metas a dolores en esto - me respondió número 5 -
-T/N: Como digas - me reí -
Cinco no me había platicado jamás sobre la extraña relación que llevaba con ese maniquí al cual le había puesto el nombre de dolores, la conexión que fuimos desarrollando poco a poco me permitió ver recuerdos de él, recuerdos donde compartía tiempo con ese objeto, al parecer era algo importante. No sabía si era algo preocupante, tierno o divertido.
Llegamos al lugar, debíamos de esperar a que Cha-Cha y Hazel aparecieran para llevar todo acabo.
-Nunca lo disfrute- dijo cinco -
-¿Que? - preguntó Luther -
-Matar, no mentiré era bueno en mi trabajo y me enorgullecía, pero no me daba placer. Todos estos años solo -
-T/N: La soledad le hace cosas raras a la mente - intentaba calmar a cinco o por lo menos que supiera que nadie lo culpa, no de mi parte por lo menos -
-Bueno, te fuiste demasiado tiempo - añadió Luther - Yo solo pase 4 años en la luna y me bastaron, estar solo te estropea -
-T/N: ¿Se lo van a creer? - pregunte mientras me acercaba junto a ellos -
Era simple, no teníamos el maletín, Klaus lo hacía hecho trizas, habíamos ideado una idea casi perfecta: nosotros les entregaríamos un maletín señuelo y ellos nos contactarían con La Encargada. Solo había que apegarse a todo y todo resultaría bien.
-Bueno - me respondió cinco- solo se que están desesperados, como un policía que pierde el arma. Si la comisión se entera lo van a lamentar, bueno, sin mencionar que estarán atrapados aquí hasta recuperarlo -
-Yo lo voy a llevar - tomo Luther el maletín - Por si estás en peligro, cinco o tú ____ -
-Ok, Luther pero cuidado. Digo, yo tuve una larga vida pero tú aún eres joven, tienes la vida por delante. No la malgastes -
Esperamos un par de segundos cuando por fin pude ver un carro dirigiéndose hacia donde estábamos. Tenían que ser ellos, nadie más pasaba por aquí
T/N: aquí vamos - dije y los tres nos bajamos del coche -
-Si todo esto sale mal - comentó cinco - lo lamento, _____-
Podía ser la última vez que lo viera y quería decirle algo pero no sabía que.
Me quede al lado de Luther, ese era el plan. Y aunque quería estar junto a número 5 sabía que esto era lo mejor.
-¿Sobre que crees que hablen? - me preguntó Luther -
-T/N: No lo sé -
Pasaron un par de minutos y cinco volvió con nosotros
-¿Y bien? - preguntó Luther -
-Tendremos que esperar - hablo cinco -
Escuché un ruido a mis espaldas y sabía que no era la única. A lo lejos se veía un pequeño camión y de el salía música. Cada vez estaba más cerca.
-¿Es ella? - volvió a preguntar Luther -
Pasó al lado de nosotros y pude ver a Klaus conduciéndolo.
-¿Que rayos hace él aquí? - dijimos 5 y yo al mismo tiempo -
Y entonces escuché disparos, traté de detenerlos con mi telequinesis para protegerlos, pero había algo raro. Cinco y yo salimos detrás de Luther, el tiempo se había parado.
Caminé junto a cinco un par de centímetros hasta que escuché una voz femenina.
-Buen truco, ¿no crees? - cinco y yo volteamos. Era una mujer, traía puesto una gabardina larga y negra, con un pequeño sombre, guantes y lentes a juego, y en su mano cargaba con un maletín. Era alta, con piernas largas y figura esbelta y tenía el cabello rubio. -
Me acerqué y quedé al lado de cinco.
-Que tal cinco - dijo la mujer - luces bien -
Volteo a verme, me costó descifrar su mirada, pero sabía que no era lo que esperaba. No me quería ahí.
-¿Y tú eres? - me preguntó -
-T/N: Número 8 - le respondí. No quería darle mi nombre -
-Es muy raro - comentó La Encargada - que tú estés ammm.... como lo digo - comenzó a pensar - sin haberte detenido en el tiempo como los demás -
-T/N: Bueno, no podrías entenderlo y no te culpo - le sonreí falsamente -
-Que gusto verte - le respondió 5 con intenciones de dejar de lado mi conversación con ella -
-Es como si nos hubiéramos conocido ayer. Eras un poco mayor entonces,  a propósito... felicidades por la regresión de edad - señaló a cinco -
(De toda mi vida, este era el momento más incómodo. No estaba formando parte de la conversación, pero por alguna extraña razón aquí estaba. Sentía cierta tensión entre la encargada y cinco, y no me comenzaba a agradar.
-Aaaa - suspiró cinco - me gustaría llevarme el crédito, calcule mal las proyecciones de la dilatación temporal. Igual aquí estoy - expandió los brazos de lado con sumo orgullo -
-¿Saben que sus esfuerzos son inútiles? - agradecí porque se me hubiera tomado en cuenta - así que vamos al grano y díganme que es lo que quieren -
-T/N: Quiero que le pongas fin a todo esto - no estaba dispuesta a ser ignorada y mucho menos humillada de tal manera -
- Que tierna - dijo la encargada - pero lo que me pides pequeña, es casi imposible... incluso para mi. Lo que debe pasar debe pasar, esa es nuest... -
No la deje terminar, había sacado un arma de mi bota y le apuntaba. Cinco me miro abriendo los ojos de par en par.
-¿Si? - hablo cinco esta vez - ¿qué tal la supervivencia como razón? -
-Me reemplazarán, no soy más que un pequeño engranaje - dijo mientras comenzaba a acercarse - esta fantasía que han estado alimentando, reunir a su familia para detener el apocalipsis, no es más que eso. Una fantasía - movió los dedos en el aire -
Seguía apuntándole, se comenzaba a acercar más; y no a mi, sino que a número 5. Ignoro que le apuntaba con un arma. No me importa si estropeaba el plan, estaba dispuesta a dispararle a esta perra.
-Aunque admito que nos sorprendiste - dijo finalmente - Tus ganas de vivir son impresionantes. Eres especial, y por eso queremos ofrecerte un nuevo puesto dentro de la comisión, en la gerencia -
-T/N: ¿Perdón? ¿Que dijiste? -
-Cinco volverá a trabajar con nosotros - me dijo- sabes que perteneces ahí - volteo a ver a número 5 -
-No funcionó la última vez - le respondio -
-No - la encargada seguía acercándose a número 5 y yo cada vez me ponía más furiosa - ya no estarías en la división de correcciones, hablo de un puesto en la oficina central -
Esto se acabaría, hora de hacer mi jugada sin que nadie sepa. Decidí meterme dentro de la cabeza de la encargada, no sería diferente a la de los demás; no tenía la intención de ver sus recuerdos, solo le causaría un pequeño, o tal vez no, dolor de cabeza.
-Eres un distinguido profesional - dijo mientras hacía una mueca - con uniforme escolar. Tenemos la tecnología para resolver esto, no puedes ser feliz así -
-Ser feliz no es lo que busco - le respondió 5 -
-Todos buscamos ser felices - acercó su mano y acarició su rostro -
Me punzaba el corazón, ¿acaso eran celos?
Estaba furiosa, quería golpear a la encargada y a cinco, iba a abandonarme una vez más.
-Esta bien - acepto número 5 - aceptare pero con dos condiciones. La primera: mi familia -
-¿Que hay con ellos? - preguntó la encargada -
-Quiero que sobrevivan -
-Bueno - se puso sus lentes - veré si puedo hacerlo, ¿cual es la segunda cosa? -
-Número 8 vendrá conmigo - no esperaba que pidiera eso, pero hubo algo en mi que se alegró- Quiero que la reclutes, creo que ya quedó claro lo excepcional que puede llegar a ser -
Evite sonreír, cinco me quería a su lado.
-Pude notarlo - dijo mientras me veía - lleva provocándome un dolor de cabeza terrible desde hace más de 5 minutos -
Cinco me miró desconcertado y yo solo moví los hombros.
-Esta bien - dijo finalmente la encargada - trató hecho -
Estiro la mano para que ambos la estrecháramos.
-T/N: Un momento - respondí
Me moví para acercarme a Luther y desviar la bala mientras cinco se dirigía para quitarle las balas al arma. Me puse de nuevo junto a la encargada y cinco, y los dos tomamos su mano. Acto seguido desaparecimos.

Holaaaa, espero disfruten de este capítulo, se que es un poco largo pero ojalá les guste:')