-¿Dónde me encuentro? ¿Quién es usted?- pregunto Jimin, como el mismo chico inocente que era y sin miedo a mas veras, ya que nunca supo en realidad de que lo habían vendido.
-Soy tu dueño ahora, tu serás mi juguete a partir de ahora, te compre a tu padre- dijo serio, mirándolo fijamente.
Jimin sin entender casi lo dicho por su ''nuevo dueño'' se quedó pensando un poco.
-Entonces... ¿Mi padrastro me vendió?- sus ojos se empezaron a cristalizar.
-Estas en lo correcto, así que tendrás que obedecerme de ahora en adelante- sonríe un poco de lado.
-Quiero ir a casa, quiero la fotografía de mi madre- empieza a llorar desconsoladamente, mientras va gateando a Yoongi a abrazarlo.
-Hey, no llores- dijo nervioso ante la situación, un abrazo no era algo que recibiera muy a menudo y menos cuando alguno de estos niños empezaran a llorar.
-Mira, la fotografía la tendrás después, ahora solo tienes que obede...- fui interrumpido por el fuerte llanto de Jimin.
-¡QUIERO LA FOTOGRAFIA DE MI MADRE!- exigió, ahogado por el llanto.
-Está bien, iremos por ella, pero por favor no grites- trato de controlar la situación como pudiera, mientras lo abrazaba y acariciaba su espalda levemente.
Jimin se calmó luego de un rato, quedándose dormido en los brazos de Yoongi.
Yoongi lo acomodo mejor en la cama, lo cubrió con las mantas, saliendo de la habitación y dejando a Jimin durmiendo pacíficamente.
-¿Qué mierda acaba de suceder?- dijo, mientras bajaba las escaleras hacia su despacho, para tomar una buena copa de su reserva de vino.
Yoongi se quedó dormido, pero realmente su corazón que era tan frio y sin sentimiento, se empezó a desvanecer, haciendo que su corazón estuviera cálido.
A la mañana siguiente Yoongi despertó con un fuerte dolor de cabeza, se levantó de su asiento como pudo y trato de dirigirse a la cocina en medio de tropezones.
-Buenos días Hyung- dijo un pequeño Jimin con una gran sonrisa en su rostro, preparando el desayuno-¿Qué tal durmió?.
-¿Cómo saliste de la habitación?- pregunto mientras se sentaba en una de las sillas del comedor.
-Por la puerta claramente- dijo algo divertido, pero esa sonrisa desapareció con la gran bofetada que Yoongi le dio en una de sus regordetas mejillas.
-¡A mí no me digas estupideces como esta ¿entendiste?!- grito, dejando un largo silencio entre los dos.
-L-lo si-siento- dijo bajando la mirada, tratando de controlar su llanto.
Yoongi al reaccionar de lo que había hecho, se quedó estático en su lugar.
-Perdóname a mi pequeño- se acercó y lo abrazo –yo no debí lastimarte, no lo debí hacer.
-Soy yo el culpable Hyung, fui yo el que lo provoco a golpearme, no se disculpe, ya paso- dijo tratando de sonreír un poco.
Yoongi tomo el rostro de Jimin entre sus manos con cuidado –ve a la sala de estar, yo terminare el desayuno ¿sí?- dijo con una pequeña sonrisa y dejando un pequeño beso en la naricita del menor, acto el cual reacciono después de hacerlo.
-Está bien Hyung- sonrió en grande y se fue a la sala de estar.
Yoongi, sin haber entendido por qué hizo eso, prosiguió en terminar el desayuno, luego de unos minutos termino y lo sirvió en dos platos.
-Jimin, ya ven a desayunar- aviso desde la mesa del comedor, esperándolo.
-Ya voy Hyung- dijo levantándose de su lugar y dirigiéndose a su Hyung –listo Hyung, aquí estoy- se sentó al lado de Yoongi y empezó a comer su desayuno.
-¿Qué tal quedó el desayuno?- preguntó mientras también comía de su desayuno.
-Quedo muy delichiosho Hyung- habló con la boca llena. Yoongi rio un poco en la forma en la que lo dijo, causándole ternura al verlo –y Hyung... ¿hoy iremos por la fotografía de mi madre?
-Claro pequeño, iremos por la foto en la tarde- dijo tomando un sorbo de su jugo.
Jimin sonrió y siguió desayunando al igual que Yoongi, el resto del desayuno fue en silencio, un silencio cómodo a decir verdad.
ESTÁS LEYENDO
Juguete sexual (pausada)
FanfictionYoongi compró a Park Jimin, tomándolo como su nuevo juguete sexual, pero algo dentro de Yoongi, empezó a ponerse cálido y disfrutar cada segundo junto a su pequeño, es su mayor meta.