12.El misterioso profesor de pociones

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—Solo sigue corriendo Ron— gritó Valery mirando hacia atrás

— ¿Crees que no lo hago? — respondió alcanzándolos

—Juro solemnemente que jamás los volveré a esperar

—Trataremos de librarnos más rápido del profesor Binn para la próxima— dijo Harry

—No sería necesario si no se hubieran dormido a mitad de la primera clase sobre "Elmerico el Malvado"— respondió riendo

Harry, Valery y Ron se habían hecho muy amigos desde su estadía en Hogwarts y siempre estaban juntos, Ron trataba de evitar a Hermione pero esta se las arreglaba para regañarle sobre los deberes y no prestar atención en clase. Por otro lado, Valery y Neville se hicieron bastante cercanos, ella lo ayudaba con lo que no entendía- casi todo- mientras él le contaba sobre sus experiencias con la magia.

—Allí mira, junto al pelirrojo alto y la chica de gafas; es Harry Potter— se escuchó el murmulló de 2 estudiantes de tercer año que pasaron junto a ellos

Y los 3 siguieron corriendo, ya se habían acostumbrado a los típicos murmullos en todo Hogwarts sobre "el niño que sobrevivió está aquí", por fin entraron al aula correcta y corrieron a un pupitre entre la mirada de todos; Valery al notar un gato sentado en la mesa de enfrente se tiró rápidamente al asiento contiguo de Neville mientras que Ron y Harry aún permanecían de pie.

—Tenemos suerte, te imaginas la cara de McGonagall si llegábamos tarde— el gato saltó del escritorio convirtiéndose en la profesora

— ¡Eso fue increíble! — gritó Ron

—Gracias señor Weasley, ahora creo que debería convertirlo a usted y al señor Potter en un reloj de bolsillo para que lleguen a tiempo

—Nos perdimos profesora— dijo Harry

—Entonces los convertiré en un mapa así podrán encontrar sus lugares y no crea que no la noté a usted también señorita Osoris— volteó y le dedicó una mirada severa

Valery bajó la cabeza, Malfoy la miró y sonrió al igual que Neville y Harry, Hermione rodó los ojos y Ron solo pensó en lo increíble que fue la transformación de McGonagall. Luego de que Hermione fuera la única en convertir una cerilla en aguja tocaba Defensa Contra las Artes Oscuras donde más de uno veía a Quirell como un chiste por su tartamudeó y el insoportable olor a ajo que salía de su turbante.

El viernes fue un día importante para Harry, Valery y Ron ya que encontraron el Gran Comedor sin perderse ni una sola vez.

— ¿Qué tenemos primero? —preguntó Valery a Ron

—Pociones dobles con Slytherin— respondió Ron— Snape es el jefe de su casa y dicen que siempre les da preferencia

—Desearía que McGonagall nos favoreciera a nosotros— dijo Harry

Valery iba a responder pero justo llegó el correo, cientos de lechuzas entraron volando para dejar cartas y paquetes a sus dueños, Hedwig no había dejado nada desde comienzo de clases pero esta vez soltó una carta en el plato de Harry. Este lo abrió de inmediato

 Queridos Harry y Valery:

Sé que tienen la tarde del viernes libre, así que ¿les gustaría venir a tomar una taza de té conmigo, a eso de las 3? Quiero que me cuenten como fue su primera semana. Envíenme la respuesta con Hedwig.

Hadrid

Valery cogió una pluma y escribió detrás: «Si, gracias. Te veremos más tarde», Harry mandó la nota con Hedwig y los tres caminaron hasta los calabozos, un lugar frío donde se impartían las clases de Pociones. Snape, al igual que todos los profesores, comenzó la clase tomando lista; al nombrar a Valery levantó la mirada para verla y hacer una mueca. Ella solo pensó que Snape también sabía sobre su cicatriz, luego se detuvo en Harry.

Harry Potter y la niña que sobrevivió Saga #HPLNQSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora