—quien te dijo?—le pregunté
—te estuve persiguiendo y hackee tu celular—me crucé de brazos y lo mire con una ceja levantada—cuando te fuiste a la cocina te llamó y le contesté
—y se puede saber quien te dio el derecho de contestar?
—yo mismo, además quien es el? Un desconocido cualquiera
—el es... muy lindo y bueno
—chicos bajen a comer!—gritó mi papá
Comimos mientras todos se reían y hablaban, pero como ya era de costumbre yo ni siquiera hablaba para pedir que me pasen el pan. Odio con todas mis fuerzas que se lleve bien con mis papás, pero sobre todo me odio a mi por no contarles las cosas desde el principio.
—ya no tengo hambre, voy a dormir—me levanté de la mesa
Estaba acostada en la cama con el celular mirando cualquier tipo de vídeos. En realidad no tenía sueño, cada vez que tengo la oportunidad de evitar a Jaden lo hago.
—que querés?—dije en cuanto escuché que la puerta se abrió
—me voy, vine a saludar nomas
—chau—dije sin despegar la vista de mi celular
Estaba caminando hacia a mi y lo miré.
—que haces Jaden? No te vas?
—primero tengo que hacer algo—se sentó al lado mío
Le miré los ojos, después los labios y otra vez los ojos.
—yo se que querés que te dé un beso—puso su mano en mi cuello
Cerré los ojos y mi respiración se agitó. Quería que me bese? Es algo que ni yo sé, pero tenerlo cerca hace que no tenga control sobre mi.
—un beso, y tal vez algo más—volvió a hablar y el tono de su voz hace erizar mi piel
—Jaden...
Se acercó más a mi y me besó. Es que no me puedo contener y se vuelve una necesidad seguirle los besos.
—pedimelo—dijo cerca de mis labios
~no, no voy a caer otra vez~pensé.
—andate Jaden, ya es tarde—me separe
—y después el que te usa soy yo—se levantó y se fue dando un portazo
Genial, ahora hizo que me sienta mal. Rode los ojos y suspire para después dormirme.
Al otro día...
Me levanté y fui directo a desayunar. Tenia hambre y fue mala idea no cenar anoche. Limpié mi pieza, hice tarea y después me metí a bañar. Cuando salí me cambié.