NUESTRO ARTE VOL. II (L.S.)

CAPÍTULO 6: Los 5

El techo se miraba húmedo, había charcos de agua por doquier, las paredes estaban destilando. Las paredes, de las cuales colgaban los cuadros. Los cuadros, muchos de ellos mojados, algunos con la pintura corrida. Las pinturas, las pinturas de Lou y Harry, muchas de ellas mojadas.

- No, no no - se repetía Harry sollozando mientras Zayn, Liam, Niall y Gemma limpiaban el desastre. Louis se encontraba abrazando a Harry para consolarlo.

- Hazz, no pasa nada, sólo los restauraremos y quedarán como nuevos, ya verás.

- Pero son recuerdos, es prácticamente pintar sobre nuestros recuerdos. ¿Y si las arruinamos?

- No lo haremos - responde decidido.

- ¿Cómo estás tan seguro?

- Porque son nuestras, ¿Recuerdas lo que me dijiste cuando no recordaba nada? ¿Lo que te repetí en tu cumpleaños? Es nuestro arte Harry, nuestro. Nada hará que se arruinen. Yo lo sé.

- Tienes razón pequeño - responde Harry ya un poco más calmado.

- Harry, por favor - responde Lou quejándose de su apodo.

- Sabes que nunca pararé, ¿cierto?

- Lo sé, lo sé - Lou se ríe un poco - bueno, ayudemos un poco, basta de sentimentalismos.

Ambos proceden a tomar unos trapos para limpiar el suelo mojado.

- Lo bueno es que ya no está lloviendo - dice Liam de repente.

- Lo sé - responde Harry - vaya reunioncita que preparé.

- Oye no es tu culpa - dice Niall - ¿Qué tal que nos quedamos y hacemos una pijamada los 5?

- ¿Los irlandeses también dicen cosas coherentes? - pregunta Liam provocando al rubio.

- En serio Liam que me tienes hasta acá - responde enojado Niall señalando su frente con furia.

- Ya pues, te dejo tranquilo. Pero solo por hoy.

- Claro que se pueden quedar el tiempo que deseen - dice Anne acercándose a el grupo de chicos y Gemma, la cual estaba muy concentrada en sus cosas que ni puso atención a la conversación.

- Gracias mamá - responde Harry acercándose a la mujer para darle un beso en la frente.

Niall y Liam toman sus teléfonos para llamar a sus casas y avisar que no llegarían a dormir esa noche, mientras que Lou y Harry corren a la habitación.

- No me digan que... - dice Gemma viéndolos irse.

- Que mal pensada Gemma - responde Harry ante los gritos - sólo vamos a acomodar el cuarto para todos - en realidad mentía, pero sabía que si su hermana los descubría estaría molestando con el tema.

Los chicos entran y comienzan a besarse mientras se acostaban en la cama.

- Harry, ¿Seguro que de nuevo quieres hacerlo? ¿No deberíamos ayudar?

- Estoy estresado por lo de las pinturas, nos vendría bien entrar en calor para tranquilizarnos - responde Harry mientras se acercaba al cuello de Lou para besarlo.

Pasa una media hora, Louis y Harry estaban tan metidos en lo suyo que habían olvidado por completo el tema de sus amigos, se encontraban abrazados en la cama bromeando de cosas sin sentido, se sentían felices, pero ni con eso Harry lograba sacarse de la cabeza el tema de las pinturas.

- Te lo juro que me dolió demasiado, pero estaba tan borracho que no me importó - decía entre risas Lou mientras contaba un historia de una fiesta que tuvo, pero se detiene cuando ve el rostro de Harry mirando seriamente un punto fijo al horizonte - ¿Estás bien ricitos?