David recibió una llamada de Alexei a las 18:00 de la tarde, este imploro que fuera al cerro de Sarah que tenía algo importante que decirle. El cerro quedaba un poco apartado de la ciudad, fue allí donde encontraron el cuerpo de una niña de 7 años que fue violada y estrangulada, ella se llamaba Sarah, este caso se volvió muy comentado en la ciudad, fue por esto que se erigió una animita de piedra y la gente le llevaba flores o iban a pedirle mandas. La casa de David quedaba cerca de esta, había que caminar unas 3 cuadras abajo, luego caminar por un desierto de basura y subir el cerro. El chico lo pensó y sabía que debía ir, tarde o temprano se encontrarían en el liceo y debía hacer frente a esta situación. Salió de su casa caminó hasta que ya no había ninguna morada más que se podía ver, cruzó el peladero de basura y subió el cerro. "Maldito Alexei, adonde se te ocurrió ir, más fácil me salía ir a tu casa". Pero, sintió que todo el recorrido fue corto, incluso muy en el fondo deseaba no llegar nunca hasta la cima. Finalmente, pudo divisar la animita y vio a Alexei fumando sentado en una roca cerca de esta, mirando el horizonte con su cabello suelto y que era agitado por el viento, estaba vestido con una polera negra sin mangas y unos jeans.
-¿Alexei?-mencionó, este al mover el rostro lo puso nervioso, por dentro el chico se quería puro morir, el chico guapo del curso se paró de la roca y tiró el cigarro, David vio que en su mano llevaba una botella de champagne en la otra mano.
-Desde un principio tenía pensado confesarme aquí- dijo Alexei extendiendo los brazos y sonriendo -es silencioso, como te gusta. Hubiera sido genial haberte dicho que me gustabas en este cerro. -
-Cuando me llamaste y me dijiste que estabas aquí no lo podía creer. Espero que lo que tengas que decirme si valga la pena, ¿para qué me pediste que viniera?
-Para que me des una oportunidad para estar contigo. - le dijo mirándolo seriamente con sus ojos de pantera y hubo un silencio tal que solo se escuchaba el viento.
-No- dijo indiferente David- porque te daría una oportunidad cuando quisiste alejarme de Sandra- respondió con los brazos cruzados y con un rostro serio.
-¿Vez esta botella?-dijo Alexei estirando el brazo para que lo viera y a la vez sonriendo.
-Claro que si
-Está vacía.
-¿Y?- Alexei, inesperadamente, golpeó la botella contra la animita de piedra, la mitad de esta quedó rota y afilada. Acto seguido, se la puso sobre su brazo descubierto. David palideció.
-Si vuelves a decirme que no, apretare fuerte hacia abajo y la carne se abrirá tanto que la sangre no dejará de parar. Por tu culpa tendré una cicatriz que me durara toda la vida y si me vuelves a decir que no, me hare otra -dijo volviendo a su seriedad tan característico. Por un momento, el chico no le creyó, pero como estaba borracho era mejor no hacerle enfadar. Paso un rato antes que volviera a hablar.
-Está bien, sí te daré una oportunidad, ahora vota eso - Y se le acercó cuidadosamente para luego estirar su brazo derecho y alcanzar la botella rota de la mano del moreno. Al acercarse se dio cuenta que los ojos de Alexei estaban húmedos, se afligió por ello, al tomar la botella rota se dio la media vuelta y la tiro lejos, sin previo aviso, fue abrazado por atrás y el chico permaneció helado e inmóvil.
-Me alegra tanto saber que tengo una oportunidad contigo. ¿Te acuerdas que una vez me dijiste que lo tenía todo?
-bueno si, pero te lo dije porque estaba molesto y...-
-Nadie lo tiene todo en la vida, incluso hasta las personas que tienen todo el dinero del mundo siempre les falta algo. No crecí viendo a mi padre, pero él me llama por celular y me da regalos, sabes cuando era pequeño me llevó a un parque y estaba tan contento, pero las horas pasaban y se hacia de noche, me dijo que ya era hora de irnos, siendo yo un niño le dije que no. Pensé que me iba a tomar de la mano y me iba a llevar a casa como mi mamá lo hacía, pero estuvimos allí hasta que anocheció y ya no había niños alrededor, tuve ese resbalin solo para mi y estuve muy agradecido por ello. No te puedo decir que me haya faltado un padre y tampoco es que le haya echado de menos o que haya sentido rencor por haberme dejado. Ahora que tengo 16 años si te puedo decir que algo me falta...
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Mas allá que una simple cicatriz
RomanceEsto comienza con un chico tranquilo y responsable cuyo nombre es David, el comienza su primer año en la media y conoce a Alexei el galán del curso, ambos tienen diferentes personalidades por lo que no se juntan durante este año. Sin embargo, en el...