Nash - 5

15.7K 300 9
                                    


- ¡¿Qué dijiste?! ¿Vas a dejar la universidad? - Alice preguntó casi chillando al escuchar mis palabras, su voz retumbando por las paredes - Lo vamos a tener que hablar con tu padre Nash... - rodé mis ojos y suspire - ... ¿Y que harás una vez que dejes la universidad? ¿Eh? - se agarró el tabique de su fina nariz intentando con todas sus fuerzas no perder la poca paciencia que le quedaba.

- Alice... - dije con un hilo de voz haciendo contacto visual - no necesitas enojarte conmigo, ¿OK? - me recosté sobre el sillón acomodándome intentando encontrar una posición placentera - Necesito ver qué es lo que quiero hacer... pero mientras buscaré otro trabajo. - le sonreí forzosamente.

- ¿Tu piensas que enserio te dejaremos vivir bajo este techo que nosotros pagamos... - mi mano lentamente formó en un puño mientras escuchaba sus palabras salir de sus finos labios - ... Mientras tu no haces nada bueno para tu futuro? - saqué todo el aire que tenía y apreté la mandíbula evitando mostrar mi enojo.

- Ma, tu sabes que eso no es del todo cierto... - la voz de Laia me hizo girar la cabeza para mirarla sentada a mi lado - Nash ha trabajado bastante para ayudar con la renta, no es que no haya hecho nada... - la vi pensar bien sus palabras antes de exteriorizarlas - y tú sabías que Henry quería que Nash estudiara economía y él lo hizo...

Alice miro a su hija con enojo por defenderme y luego clavó los ojos en mi. El silencio se adueñó de la habitación, los ruidos de la ciudad, los autos, el bullicio constante de la gente caminando por las calles eran lo unico que se escuchaban, junto con nuestras respiraciones.

- Me iré ahora... - dijo Alice levantándose del sillón individual que teníamos en el living - veo que están bien... pero este tema no quedará aquí Nash - lleve mi mano a mi nuca comenzando a masajear la zona - hablaré de esto con tu padre y de seguro tendrás que venir a nuestra casa en Jersey para hablar con él.

Me miró de arriba a abajo con ojos de decepción como despedida, y se acercó a Laia para abrazarla. Después de un 'Adiós, cuídense' desapareció por la puerta.
Un poco agotado de la reciente conversación con mi madrastra me acosté en el sillón tapando mi cara con mis brazos. Que vinieran a visitarnos, hacia que mi día se vuelva una total mierda, poniéndome de mal humor.
Sentí la presencia de Laia a mi lado, por lo que saqué mis brazos de mi cara y giré esta al borde del sillón, donde estaba agachada la rubia.

- ¿Qué te parece salir de fiesta hoy? - me miró con sus ojos pícaros, haciéndome sonreír. Nuestros rostros estaban cerca uno del otro, dejándome ver su piel lisa y sus ojos vistiendo largas pestañas oscuras, dejando resaltar el color gris de su iris. Por unos segundo pude sentir su lenta y suave respiración chocando levemente con mi piel.
Me aclaré la garganta -Me gusta esa idea - pause por unos segundos, me senté en el lugar, para luego volver a pararme - pero tu invitas. Necesito compensación por lo que hizo tu madre- hice un puchero sarcásticamente, para después encerrarme en mi habitación.
Antes de cerrar la puerta pude escuchar a Laia quejarse por hacerla invitarme una salida.

(...)

La música hacía vibrar el vidrio a mi lado. Veía como el cristal se movía al ritmo de los bajos de la canción que el Dj pasaba desde hacia unos minutos. Mire a través de este ventanal y veía cómo los autos transitaban la calle nocturna de Nueva York. Del otro lado de la calle se podían ver que todos los restaurantes, lugares de comida rápida y bares estaban repletos de personas, como siempre a este horario.
Con una botella ya vacía de cerveza Heineken en mano, me levanté del banco en el que estaba sentado y me encamine hacia la barra bastante poblada de gente. Entre la muchedumbre bailando en la pista y la luz tenue del lugar, muy característica de los bares nocturnos, no lograba identificar bien a las personas. Una vez cerca de la barra pude ver que Laia era una de esas personas sentadas allí, junto a varios hombres. Ya cerca de ella vi que un rubio le estaba hablando. Lo que me parecía gracioso de esa situación esque ella no respondía a sus preguntas o a nada de lo que decía.

- Permiso... - dije poniéndome entre ambos dos, y el rubio me miró de arriba a abajo.

- Perdón, pero estábamos hablando - el chico con un tono de indignación la señaló a Laia a mi lado.

- Si lo pude ver... - hablé mirando al Barman haciéndole señas para que me de otra cerveza -  pero más que una conversación... era un monólogo... - dije con un tono sarcástico y me gire a verlo apoyándome contra la barra, para luego sonreírle levemente.

- ¿Qué dijis...? - antes que pudiera seguir hablando lo interrumpí.

-  Perdón por decir esto amigo - me rasqué la nuca - pero te veías demasiado patético... no entiendo como no te diste cuenta antes - apoyé mi mano en su hombro. De reojo vi a Laia reírse y de la nada sentí que el rubio sacó mi mano agresivamente, y me miró fijo.

- Esta bien, está bien... - dije levantando mis manos poniéndolas a los costados de mi cabeza - Lo siento, no fue mi intension herir tus sentimientos - lentamente me fui alejando de él ya que podía ver que estaba a punto de golpearme - Hermano, evitemos hacer un escándalo... estaba bromeando. - no estaba de humor para pelear con alguien esa noche.

- Maldito no me llames "Hermano" - dijo casi rechinando sus dientes, formando puños con sus manos preparándose para lanzar un golpe - ¿quién te crees para tratarme de estupido? ¡¿Eh?! - dijo casi gritando, haciendo llamar la atención de la gente a nuestro alrededor. Yo mirando a nuestros espectadores hice un ademán de no entender que le pasaba al rubio.

Por suerte antes de que se armara una pelea dentro del bar, vino uno de sus amigos y lo agarró por detrás, para llevárselo a una mesa alejado de la barra.
Suspire y me apoye contra la barra, agarrando mi cerveza con una mano y con la otra me rasque la nuca.

- ¿Por qué la escena? - Escuche la voz de Laia a mi lado.

- Yo que sé, pregúntale a él - la mire como bebía un sorbo de su Daiquiri de frutilla.

- No te hagas ... - roló los ojos - ¿por qué provocarlo? No estaba haciendo nada malo.

- Yo sólo decía la verdad - me encogí de hombros, para luego sentir como ella me pegaba en el brazo.

- Aunque fue graciosa esta vez - dijo agarrando mi mano apoyada en la mesada - deberías dejar de incentivar a la gente a que te golpee cuando vas a bares... - me dio unas palmadas en mi mano y se rio.

- ¿Por qué siempre termino teniendo la culpa? - pregunté sarcásticamente apoyando mi mano en mi pecho - Hieres mis sentimientos hermanita - Laia se mordió el labio sonriendo mientras negaba con la cabeza.

Me tomó la mano y nos condujo a la pista de baile, donde estaba todo el mundo apretujado. Antes de meterme entre la gente, me solté de su agarre, y pude verla perderse entre los cuerpos lentamente sonriéndome. Podía leer sus labios rosados modular "Dale vamos a bailar" lo cual me hacía sonreír.
Sentí que todo alrededor de ella se empezaba a mover como si estuviera en cámara lenta. Y la música se escuchaba lejana. Debía ser porque las varias botellas de cerveza que me había tomado comenzaban a hacer efecto, o no, la verdad que no lo sé. Pero ella se veía diferente. Sus movimientos sensuales se hacían notar, alterando el latido de mi corazón. Mire sus labios rojos, y mordí mi labio levemente y comencé a caminar hacia ella despacio. Mis pasos torpes me hicieron parar:

- ¿Qué estoy pensando? - desvié la mirada y me di varias palmadas en la cara.

____________________________
Holissss 🥂✨
Feliz Año Nuevo!! Espero que hayan empezado el año de muy buena manera🤍

Me deben querer matar todos/as ahora jeje😅
Estoy haciendo lo posible para escribir lo más rápido que puedo, pero mi mente está en blanco 🥲

Estoy anonadada de la cantidad de gente que está leyendo esta historia... últimamente estuve entrando a la app y veo que más gente likea y agrega la historia a sus Listas de lectura y yo me quedo 🤯.
Gracias a todos/as por ello, yo que pensaba que nadie iba a leerla 🤍
✨Saludos✨

Hey, Sis [+16]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora