Locos por Ella= Yo la vi primero. [Gemelos Harries]

Capítulo 8. Rueda de la Fortuna.

Haytlin.

Hace dos días que volvimos de la casa de mi tía, cosa de lo cual estoy muy agradecida. El último día fue lo peor. Al despertarme en la mañana a la primer persona que vi fue a Christina bajando por las escaleras. Dios sabe lo mucho que me contuve para no empujarla por la escalera.

Los gemelos sintieron ganas de explorar el terreno de la casa de mi tía, pero yo no estaba de ánimos para socializar, así que ellos se fueron solos y no volvieron en dos horas. Entre esas dos horas, Jackson vino a ''visitar''. Y yo no pude más.

Le rogué a mis padres que nos fueramos lo antes posible, y, si no fuera porque estuve a punto de llorar, papá no hubiera cedido. Esperamos a que los gemelos volvieran y nos fuimos.

Sólo me despedí de mi tía y Milo.

Recibí un mensaje de Jackson, cosa que me sorprendió. Acabo de cambiar mi número de modo que comencé a pensar en las posibles personas que le dieron mi número a Jackson. Era un mensaje de texto.

''Volvamos a intentarlo''

Decía, el muy cínico. Pero parece que no sabe que yo no creo poder ni mirarlo en mucho tiempo.

Aunque el mensaje tenía algo de sentido. Ambos prometimos que cuando tuviésemos la oportunidad de estar juntos lo haríamos. Sin importar qué. Pero creo que él ha de entender que las circunstancias cambiaron.

Yo no soy la misma persona que le hizo esa promesa hace dos años. Y, aunque él parezca ser el mismo, yo ya no estoy dispuesta a ceder y él tampoco me puede obligar a tener algo con él.

El ruido del cristal de la ventana me saca de mis profundos pensamientos, lo cual agradezco momentáneamente. Le hago señas con una mano para que entre mientras busco algo que ver en mi TV. Jack, camina relajado hacia mi y se inclina para darme un beso en la mejilla a modo de saludo.

- Hola, Hayle.

- Hola. ¿Y Finn?

- Fue a comprar con mamá.

- ¿Por qué? - le pregunto con el ceño fruncido. Recuerdo perfectamente que Finn me había dicho que odiaba ir de compras con su madre.

- Quiere unos dulces y si le dice a mamá que se los traiga a ella se le va a olvidar - se encoge de hombros quitando importancia al asunto.

Miro mi celular una última vez con el mensaje de Jackson en la pantalla antes de apagarlo y dejarlo al lado.

- ¿Pasa algo? -me pregunta y se sienta a mi lado en la cama.

- No.

- ¿Segura? - asiento y le sonrío a medias - Oye, Haytlin... Mmm - coge una de mis almohadas y comienza a jugar con los bordes nervioso -, ¿Sabes? Hay una feria de atracciones cerca de aquí... - asiento recordando que cuando veníamos, hace par de días, vimos las luces a lo lejos - Quería saber si... ¿Quisieras ir conmigo a la feria? - pregunta con las palabras saliendo arrolladas de su boca.

Jack.

Ella se queda callada durante un minuto.

¿Eso es buena señal? ¿Me dirá que no?

Ni siquiera parece pensativa.

En realidad, ni si quiera sé cómo se lo pregunté, lo ensayé por media hora de una forma totalmente en mi habitación. Gracias a mis estúpidos nervios, puede ser que haya sonado todo un poco raro y me diga que no.