L Bello Durmiente

Capítulo 9

Finalmente, luego de mucho tiempo, el cuento que debería ser contado en solo una hora o dos, se ha extendido hasta llegar a ser lo que es ahora.

La última vez pudimos observar como Light era salvado por la voz de su amado, el cual todavía esperaba dormido en el lejano palacio. Luego de esto, floto a la deriva por el ancho río, cuando Ryuk el shinigami, no muy protector que digamos, llegó para salvar el día para variar. Tuvo que hacer de transporte por un rato, pero no era nada que unas cuantas manzanas pudieran arreglar. Ah, y si, Mikami fue recogido en el camino también.

-¡Muchísimas gracias Dios Light por salvar mi vida!-se arrodillaba ante Light y besaba las suelas de sus zapatos, como si fuera un ángel o algo parecido.

Light se encontraba nervioso ante el repentino fanatismo del ex alquilador de botes.-Si, si, claro, como no… Ahora me voy, mi princesa en apuros todavía me sigue esperando.

-¿Qué?-exclamó con cara de asombro.- ¿!O sea que usted es el tan esperado príncipe que irá al castillo de Wammy!?

-¿Es que no se nota?-se pasó una mano por el cabello en pose de modelo de almanaque.

Mikami lo seguía viendo como si no lo pudiera creer.-Pero… ¿acaso no trae ningún sirviente o espíritu protector?

-Tengo esta cosa…- señaló a Ryuk, quien comía unas manzanas de un árbol como un animal que no había sido alimentado en semanas.-aunque no creo que sea muy protector que digamos.

-¿Por lo menos sabrá algún arte con algún arma o en combate?

-eh… ¿no…?

-¿Pues es que no sabe defenderse?

-… me las apaño bien con mi cerebro si es necesario… ¿por qué tanta pregunta? ¿Acaso es tan peligroso el resto del trayecto?

-¿Peligroso? Esa palabra se queda corta para lo que le espera.

Una música de terror tocaba de fondo.- He escuchado historias de los príncipes falsos que intentaron llegar al castillo. Por supuesto, ninguno lo logró, varios fueron devorados por las criaturas del río, yo mismo participé en algunos naufragios. Pero los pocos que lograron pasar nunca se llego a saber lo que les paso, solo que algunos se perdieron tanto tiempo en el laberinto de matorrales que perdieron la memoria o que fueron asesinados por LA COSA que se esconde en la selva de espinas…

-Creo que los padrinos olvidaron contarme esa parte…-la música tenebrosa se terminó y la atmósfera de suspenso se evaporó.-Pero bueno… no tengo otra opción, tengo que seguir adelante. Nos vemos Mikami, suerte con tu negocio.

Light avanzó un par de pasos pero…

-¡Espere!- Mikami se agarró de los tobillos del castaño, tirándole de nariz al suelo.

-¿!Qué te pasa!?-se volteó un sangrante y furioso Light.

-Quería decirle algo…-dijo con la mejor cara inocente que tenía.

Light se pasó un pañuelo por la cara, y un algodón en la nariz. Mikami rio nervioso pero enseguida se puso serio de nuevo.-En pago por haber salvado mi vida seré su sirviente por el resto de mi vida, lo serviré en todo lo que necesite.

-Oh, no es necesario, yo…

-Insisto, sería muy ingrato de mi parte luego de sus tan generosos actos para con mi pequeña y patética persona… ¡usted es como un dios para mí!

Light le miró con sorpresa, luego con resignación. Para esto mejor dejaba ahogarse en el río… tal vez todavía fuera una opción… no, pensó Light, ya estaba allí y tenía que hacerse cargo. Además por ahí podría servir como carnada si alguna criatura llegara a atacarlos.-Está bien Mikami, puedes venir, pero no te pongas meloso ni nada ¿entendido?