Ahora estarás leyendo esto mientras piensas, “¿qué mierda?”, pero créeme, es por experiencia propia, no es fácil, cuesta mucho, pero es bueno comenzar a ver por ti, es bueno ponerse unos pantalones que tanto te gustan, verte al espejo, sentirte bien, conforme y feliz, porque a ti te gusta cómo se te ven y nadie te hará cambiar de parecer.