la que nunca tuvo infancia

tormenta del miedo

El pensar que ya estaba en otro pais y mi pasado estaba atras...sin ese miedo constante era un error que miente se trato de creer muchas veces...

Las gotas de lluvia caían incesantemente y chocaban bruscamente con el suelo, los árboles bailaban violentamente al son del fuerte viento...y mi primo mi prima y yo nos encontrábamos en la seguridad de la casa...mirando por la ventana la horrible tormenta.

La luz se habia ido hace mucho y estábamos en completa oscuridad, la reconfortante oscuridad.

Pero para arruinar mi calma, siento los pasos de alguien acercarse y hace sonar el piso de madera, nos encontrábamos en el segundo piso...y yo por saber quien era, mire atrás al igual que mis primos, grave error(bueno para mi ya que mis primos fueron en su encuentro) era mi nueva pesadilla, mi martirio que no me dejaba dormir por la noche, mi nuevo tio.

Y yo sin decir o hacer nada...sólo volvi a mirar por la ventana viendo como las cotas se deslizaban por el vidrio...pérdida en mis pensamientos...y si simplemente abría la ventana me deslizaba entre los barrotes de la reja de protección anti caídas...y simplemente me dejaba caer al duro y frío suelo seria lindo, pero no, mi madre se encontraba en la planta baja cocinando la cena y no seria  lindo ver caer el cuerpo de tu hija y que al final y con suerte se rompa la cabeza al llegar a suelo...y que la sangre y parte del cerebro se mezclen con la fría lluvia. Pero no pude continuar con mis pensamientos cuando a mi costando se sentó una persona, y la que menos necesitaba en ese momento, mi tío.

-****** vamos a jugar a las escondidas- dijo mi prima- y mi hermano va a contar- dijo con emoción dando pequeños saltos.

-no- dijo una voz gruesa- ****** va a contar y ustedes se esconden ¿va?- pregunto a mis primos, sus hijos y ellos sin decir nada solo se fueron corriendo a esconderse.

Yo ya rendida me estaba por levantar a colocarme en una pared y contar, pero una mano paro mi intento de levantarme...solo para tirar de mi, mi tio me miraba con una mezcla rara de excitación, diversión y aventura, (obviamente en ese momento no entendí que significaban esos ojos...no asta ahora que al fin comprendo) y yo...yo lo mire con terror y mas terror.

-****** podes contar aca sentada sabes?- me dijo con arrogancia en su voz- tocando esto- dijo agarrando mi flaca, desnutrida y temblorosa mano...(les mencione que desde que mi madre me dejo los cuatro años...mi peso bajo a menos de la mitad, eso era simplemente por no comer nada muchas veces...asta mi madre me dijo que se preguntaba si yo en realidad era su hija) llevando mi mano con la suya....lo coloco en su entrepierna...en su pene erecto bajo la tela de su pantalon,pero al fin y al cabo era en su asqueroso pene, yo sin pensarlo dos veces quise quitar mi mano e ir y decirle a mi madre lo que acaba de pasar, pero no el no dejo que me vaya y simplemente apretó mas fuerte su agarre en mi mano, ya me estaba doliendo...y...sin perder tiempo el empezo a subir y bajar haciendo un vaivén, yo cerrando mis ojos hacia mucha fuerza para poder quitar mi mano, mi mano otra vez sucia, por otro hombre mas...y cuando senti undirme en el abismo del miedo y soledad una vez mas... mi primo abrió la puerta del armario en el que se encontraba y mi tio soltó y empujó rápidamente mi mano

-****** vas a buscar a mi hermana...ya me canse- dijo con un puchero muy tierno, el con sus tres años todo le queda tierno.

Yo anseti y me levante, pero esta vez agarro mi mano, y cuando lo mire...me miro de una manera tan...intensa,tan amenazador, tan horrible que sin perder tiempo solo asenti una vez mas y sali casi corriendo, se lo que significaba esa mirada, la recibí por al menos cuatro años de mi vida y esa no era una simple amenaza, no señora, era una que te juraba venganza horror y terror.

Pero queriendo olvidar todo lo que paso...sólo y sin perder el tiempo me fui al baño a lavarme las manos...mis manos sucias, que con mas y mas jabón la suciedad de lo indecente de lo asqueroso no se iba...siempre iba a estar, siempre seria asi...para siempre