ʙʀᴏᴋᴇɴ

05 || Déjame ir

Todo era un caos, un lío, nada salía como planeó.
Seguía sin tener un indicio de dónde podría estar su familia, le frustraba estar rodeado de inútiles.

Todo el drama lo agotó demasiado, por eso invitó a su amigo Rhodes a pasar la tarde, para poder cuadrar una ubicación precisa y es que ya habían buscado por todas partes. Incluyendo los refugios seguros de S.H.I.E.L.D

-Mira allá, trajeron algo -anunció el moreno.
Lo que obligó a Tony a ir hacia la puerta.

-Paquete para el señor Stank, ¿usted es el señor Stank? -preguntó aquel hombre de edad avanzada.

James rió al escuchar al anciano, a Tony no le hizo gracia.

-Sí, él es el señor Stank -contestó Rhodes para reírse de nuevo.

Anthony tomó el paquete entre sus manos, no venía una dirección, ni siquiera un nombre.
No decía nada, pero a la vez lo decía todo... Steve.

-¿Qué es? -interrogó Rhodey, haciendo que el castaño saliera de su trance.

-Algo que Pepper me envió -mintió.

Dejaron ese tema de lado, para concentrar su atención en otras cosas con más relevancia.
En nuevos proyectos, en asuntos de S.H.I.E.L.D, Industrias Stark.

El Alfa cada que podía miraba el paquete, con la ansía de saber que contenía, pero no podía hacerlo ahora, quería estar solo.

-¿Quieres venir a mi casa? -ofreció-. Prometo que Visión no preparará la comida esta vez -canturreó.

Inconscientemente él también lo hizo, le recordó a Steve. Lo loco que se puso cuando el androide confundió el comino con la pimienta molida.

-No, pasó -sonrió-. Además, tengo unas cosas que resolver -añadió mostrando la agenda de su smartphone.

James comprendió, le dio una palmada en la espalda y se marchó.

Solo, por fin estaba solo. Justo como quería.
Después de darle vueltas en la cabeza y sostener desde hace una hora el paquete, se decidió a abrirlo. Lo hizo lento, tal vez tenía miedo de lo que pudiera encontrar.

Al abrir la caja encontró un sobre, una carta y una pequeña caja.

La cajita contenía los anillos de boda, el sobre los papeles del divorcio y la carta... Contenía mucho más de lo que podía imaginar.

Querido Tony:

No sé por donde empezar, ni siquiera sé si llegarás a leer esto.

Quiero que dejes de buscarme, ya déjame ir, ambos sabemos que no te abandoné.

Si me fui de casa fue porque te encontré con ese otro Omega en nuestra cama, en la misma cama donde me tomabas y me juraste amor.
Yo te amo y creí que tú también me amabas, que equivocado estaba.

Al principio de nuestro matrimonio eras todo un caballero conmigo y a la llegada de nuestro primer cachorro, te volviste más unido a mí, todos siempre hacían sus caras por nuestras muestras de afecto en público, ja, creo que más de uno quedó con un trauma por encontrarnos en situaciones comprometedoras (Clint).

Éramos dos locos enamorados, amabas decirle al mundo que yo era Tu Omega, te encantaba dejarlo claro y yo amaba tu manera de ser posesivo; por eso no logro entender que cambió, es que simplemente no lo entiendo.

De un día para otro dejaste de dormir en la casa, dejaste de ser atento, eran muy raras las veces en que tenías un detalle para conmigo y entonces lo supe, yo ya no era el dueño de tu corazón.
Lo confirmé cuando tuve que ir a la cárcel a recogerte, estabas demasiado ebrio como para darte cuenta que el aroma de otro Omega estaba impregnado en tí. El oficial dijo que fuiste detenido por "exhibicionismo obseceno" no por conducir ebrio como te hice creer; no te dije la verdad porque me sentía humillado, dolido, engañado y sentía que yo tenía la culpa por no saber mantenerte a mi lado.

Los días siguientes a eso traté de lucir "normal" trataba de ignorar lo sucedido, intenté ser más coqueto, más atento, más sexy, ser atrevido en el aspecto sexual con la intención de retenerte a mi lado.
Vaya idiota que soy.

Y aunque por un momento te olvidaste de él, volviste a sus brazos.

Te amaba más a tí de lo que me amaba a mí mismo, por eso soporte, soporte estar a tu lado aún sabiendo de tu relación con él, soporte cuando él me humilló y soporte verte con él en nuestra cama.

Pero ¿no podías ser discreto? Lo único que amo más que a tí, es a mis hijos y que Sarah te haya visto con ese Omega es lo más jodido que has hecho en tu vida, Anthony.

Si me fui de tu lado no fue porque saliera con otro como has hecho creer a todos, ambos sabemos que dices eso para mantener tu imagen, porque si no te importara lo que dijeran los medios, ya hubieras presumido a tu amante, dime ¿por qué no lo has hecho? ¿Acaso terminaron?

No pienso volver a tu lado Anthony, así que es mejor que terminemos con este lazo, dejame libre, yo ya te dejé libre y si alguna vez sentiste remotamente algo por mí, te pido, te suplico, que me dejes ir.

Att: Steven Grant Rogers.

Leer eso fue una bomba de emociones acumuladas, experimentaba dolor, decepción de él mismo, coraje, odio.
Sentía tanto que no podía llorar.

Arrojó todo lo que estaba en su escritorio, apretó la mandíbula.
Estaba apunto de arrugar la carta cuando notó algo, la textura de ese papel se le hacía conocida, era demasiado diferente a otros papeles.

Lo recordó, antes recibió una invitación con esa textura, invitación para la boda de T'Challa y Bucky.

Wakanda, Steve está en Wakanda.