Capítulo 15

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La mañana en el emporio no fue muy agradable, su pie le dolía así que antes de ir a su casa pasó por el hospital a ver al Dr quién le había recetado un antiinflamatorio y un antibiótico, compro en la farmacia y fue a su casa cuando llegó Lidia estaba muy preocupada.
__Irela querida te has tardado__
__lo siento Lidia pase por el hospital__se disculpó Irela__ya te puedes ir tranquila__
__gracias linda__le contestó y salió.
Irela comió algo, se tomó su tiempo y subió a ver cómo estaba el hombre, cuando entro no lo encontró en la cama sino parado mirando a través de la ventana.
__¿Como estas?__pregunto Irela
__bien, recién hablé con Franco si sigo así el sábado me podré ir a casa__contesto__¿Y tú cómo estás?__
__pase por el hospital me dio un antiinflamatorio__respondio abriendo el guardarropa__me duele la cabeza__
__debe ser normal en esos dias__
__¿Que días?__pregunto sacando la cabeza del guardarropa.
__los días de mujeres, cuando tienen su periodo__contesto el y ella río__vi la caja de tampones sobre el lavatorio__
__lo siento, es que como vivo sola no quise que te sintieras mal__
__Irela no hay problema__dijo el hombre caminando hacia ella__descuida se que está es tu casa__
Ella agarro unas cosas y se metió a ducharse, que le pasaba al hombre.

******
Mientras Irela entró a bañarse el aprovecho y bajo a prepararle un té con una hiervas que había encontrado en la cocina, subió justo cuando entro ella salía del baño, llevaba un vestido negro y no tenía buena cara.
__te prepare un té__
Ella solo lo miro, llego a su lado el estaba sentado en la cama, ella cogió la taza con el té sin sacarle la mirada.
__no le has puesto veneno__sugirio ella.
__tomate con esta pastilla__dijo el  y ella sonrió__ le hacía ese té a mi mamá ella adoraba__
__gracias__
__no se agradece__ contesto el__ yo agradezco todo lo que has hecho por mi__
Parecía que ambos tenían una tregua, el estaba rendido y encantado por ella, tenía la esperanza que desde el fondo de su corazón ella sintiera lo mismo que él.
Cuando dejó la taza, ella solo dio vuelta alrededor de la cama y se acostó en el espacio vacío, el solo se acostó y durmió.

Cuando Lino abrió los ojos la habitación estaba solo con la luz del velador en la mesita de luz, levanto su cabeza notando que la noche había caído, sintió un peso en su pierna derecha entonces miro y vio que Irela tenia su cuerpo muy pegado al suyo y su pierna estaba cruzada sobre la de el, y la mano rodeaba su abdomen, su brazo era tan cálido, sin despertarla se corrió un poco para mirar el rostro de ella, la dueña de aquellos ojos negros y profundos, una mujer autosuficiente que le demostraba el valor de las relaciones, sintió una oleada de calor ansiaba besar cada centímetro de su cuerpo, no podía sacarse esos pensamientos de la cabeza, ella lo confundía y el lo notaba, tenerla así a su lado tan dócil y hermosa, porque no tenía duda ella era la mujer más hermosa que el deseaba tener.
Quería quedarse así, despertando con ella a su lado, sentía algo por ella no tenía duda por primera vez en sus casi 38 años Lino Guerra estaba enamorado, perdidamente enamorado de una mujer que tenía más de 30 años, río moviendo la cabeza pensando casi en voz alta dijo "es el karma Lino".
No quería despertarla, se veía perfecta.
__me miras como si yo fuera tu presa__dijo ella moviéndose__ya es de noche__
__si ya es de noche__
__hare algo de comer__hablo dejando la cama__
Empezó a buscar que cocinar, cuando el hombre entró  a la cocina, se sentó en un taburete y no dijo nada solo la miraba.
__¿Porqué me miras tanto?__
__no lo sé __respondio cuando ellá pasó a su lado y tomo su mano__mira no se qué me pasa contigo, no puedo sacarte de mis pensamientos__
__¿Que me quiere decir?__se atrevió a preguntar__me está coqueteando, solo falta que me diga que está enamorado__
__jamas__lo soltó casi en un ahogo__tuve a todas las mujeres que quise y deseé__
Lo último le dolió decirlo mirando esos ojos tan negros que no podía descifrar.
__gracias a Dios pensé que se me estaba declarando__ le susurró alejando su mano.
No supo como arreglar lo que había dicho, si estaba enamorado de ella.

Tenemos un Lino enamorado pero terco, no lo quiere reconocer

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