Notas del corazón.

CAPITULO 0

MOTIVO DE LA SEPARACIÓN

— Izuku, cariño. Ven a desayunar — llamo la peliverde a su pequeño, hoy sería un día especial.

— Ya voy mami — respondió el menor desde las escaleras, dirigiéndose a la cocina, lugar donde se encontraba su madre.

Eran las 7 de la mañana, hoy desde temprano comenzaron a moverse porque Izuku tenía un recital. Esperaba ocupar, aunque sea el cuarto lugar o el quinto, no tenía muchas esperanzas de ganar. Él se sentía inferior a otros niños que acudían al mismo lugar, sobre todo de un cenizo que idolatraba y amaba.

Esta vez el profesor lo ayudo para que pudiera terminar su composición justo para el evento, estaba emocionado, esa melodía se la dedicaba a su madre y a Kacchan, que era a quienes más amaba. Tal vez no era la gran cosa, pero quería enseñarles lo que había en su corazón y que mejor que expresarlo con música.

Su traje estaba listo desde un día anterior, uso uno parecido al que puso en una presentación su ídolo, All Might, era un productor musical muy popular, también había abierto su agencia donde grupo o solista que debutaba llegaba lejos. El mismo productor en ocasiones sacaba canciones que fueron de inspiración para Izuku, se podría decir que era el mayor fan del rubio por lo que se esforzaba para algún día estar en su agencia. Kacchan también buscaba lo mismo, sin embargo, no demostraba lo que opinaba del rubio con facilidad, al contrario, había dicho que seria mucho mejor que el viejo y conseguiría todo mucho más rápido que su inspiración.

Deku bajo rápidamente a la cocina, encontrando a su madre terminando de servir su platillo favorito, lo había hecho para animar a su hijo en su gran día, no podía esconder su gran sonrisa, misma que iluminaba a su madre. Al principio su madre había estado en depresión porque a Izuku no le iba muy bien sumando que Hizashi, padre del menor, no lo apoyaba y le decía que lo sacara, que hacia el ridículo y no deseaba que su hijo hiciera eso, a pesar de la presión, no lo hizo. Creía en su hijo y en su talento, era su sueño, por lo que le advirtió a su esposo que si seguía con dicha actitud seria mejor separarse, ella no permitiría que a su hijo le cortaran sus alas. Había subido de peso por todo este estrés, aunque ante los ojos de Izuku era la mujer más bella, a pesar de los comentarios despectivos de sus compañeros, su madre era su todo. A él podía humillarlo, pero nadie se metía con su madre.

— Izuku, ¿estás emocionado? — preguntó la peliverde para sentarse junto a su pequeño.

— Sí, mami. Hoy hare mi mayor esfuerzo, para que estés muy orgullosa de mí. — contestó el pecoso con su usual tono emocionado y nervioso, mientras tomaba su cubierto para degustar aquel maravillo desayuno que preparo su madre.

— Yo ya estoy orgullosa de ti mi bebé, eres maravilloso en todos los aspectos, mi cielo. — acarició el alborotado cabello del menor mientras sus ojos se le llenaban de lágrimas, ahora estaba completamente convencida que apoyar a su bebé fue la mejor decisión.

El pecoso miro a su madre mientras desayunaba, entonces embozo una bella sonrisa, hoy daría todo por aquella mujer ante sus ojos. No importaría lo que sus compañeros dijeran, ella valía todo.

Terminaron su desayuno entre algunas lagrimas y risas, entonces el peliverde subió a su habitación y salió, como tenía nula experiencia en hacer un nudo en la corbata por lo que había elegido un moño que combinara.

Una vez listo, tomo sus partiduras y bajo, llevaba una mochila para guardar cosas que le podrían servir más tarde, en si cuadernos para escribir en como habían mejorado sus compañeros o aprender algo nuevo, cosas por las que Kacchan le decía que era un nerd.

— Vamos Izuku o llegaremos tarde, el taxi nos espera. — su madre estaba en la puerta esperando por el menor.

— Vamos mami — la emoción del peliverde no se podía esconder.

Todo el camino se la pasaron platicando, hasta que por fin llegaron al lugar donde se presentaría. Era un pequeño teatro que estaba bien para el recital, había venido gente importante escondida entre el público, buscando tal vez a la próxima estrella de la música.

El orden de las presentaciones ya estaba estipulado desde un día antes, Kacchan era el segundo en presentarse mientras Deku era el último.

Una vez que todos se encontraban en su butaca indicada, comenzó el evento. Los padres de Katsuki y la madre de Izuku estaba juntos hablando de lo mucho que sus hijos se habían esforzado en cuanto las luces se apagaron, guardando silencio disfrutando el primer número. Luego siguió Katsuki, con un solo de violín emocionando a la audiencia cosa que disfrutaba, lo hizo muy bien, al bajar sus compañeros lo felicitaron.

— Lo hiciste grandioso Bakugo, nadie es tan bueno como tú.

— Tienes asegurado el primer lugar.

Comentarios que solo alimentaban su ego, solo los ignoro, todos eran extras menos su amado pecoso.

— Mas te vale presentar algo que valga la pena, nerd. Aunque no creo que puedas. —soltó una carcajada mientras veía a su amigo.

— Lo hare Kacchan, hare que estés orgulloso de mi y no pases vergüenza. — contesto alegremente el menor. Quería que el mayor viera que era el indicado para estar a su lado.

— Como si eso fuera cierto, Deku. — luego de decir esto se retiro para guardar sus cosas y esperar el turno del pecoso.

Las presentaciones siguieron hasta que llego el turno de Izuku. Hasta el momento nadie había utilizado el piano, por lo que todos supusieron que el pecoso lo tocaría, algunos compañeros se reían, como se atrevía a tocar aquel instrumento que ni siquiera podía dominar. Pues la risa no les duraría cuando el peliverde toco el primer acorde.

La melodía daba una paz y daba la expresión de tranquilidad, también de hacia que las emociones de cariño fluyeran. La multitud estaba anonadad, el mismo Katsuki no podía creer que aquel niño en el escenario fuera el mismo que lo seguía a todos lados. Los jueces estaban muy atraídos por la melodía, hasta que esta termino.

Entonces todos salieron de su trance y un juez pidió que Izuku contestara una pregunta.

— ¿Izuku Midoriya, ¿verdad? — el menor asintió.

— Esta bella canción, ¿Qué nombre tiene y de que autor? — el mayor estaba interesado.

— E-esta melodía, la compuse junto con mi profesor. El me asesoro, aun no tengo un nombre, creo que se llamara "Amai kanji". — contesto asombrando a todos. Él había podido componer una melodía a tan corta edad, obviamente bajo la dirección de su profesor, eso no quitaba que le pertenecía.

— Es maravillosa, tienes mucho talento pequeño. Te espera un futuro exitoso. Te deseo lo mejor en tu carrera musical. — dicho esto, entrego el micrófono por el que se comunico con el menor, este agradeció y dedicó una sonrisa alegre para todos los presentes.

Una vez detrás del telón, todos lo miraba extraños, no son su usual mirada de menosprecio si no una asombrada. No le tomo importancia y se limitó a buscar con la mirada al cenizo, pero no lo encontró. Luego de unos minutos un juez subió para dar premios a los mejores, empezó por el quinto. Ya estaban en el tercero y el nombre de Izuku no salía, cosa que lo desanimo, como si el cenizo supiera ahora estaba detrás de él sorprendiendo al pecoso.

— Kacchan me asustaste, te estaba buscando. — reprendió el menor.

— Así has de tener la maldita conciencia, estúpido Deku. — le dio un zape al más bajo produciendo un puchero de indignación en este.

Entonces anunciaron el segundo lugar, Katsuki Bakugo, cosa que sorprendió al cenizo, él debía ser el primer lugar. No le tomo importancia y subió por su premio con mala cara, cosa que no paso desapercibido por su madre.

— Ahora sí, el primer lugar. Fue unánime la decisión de darle el premio a este chico. El primer lugar es para Izuku Midoriya, ven por tu premio pequeño.

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Creo que es muy largo, voy a subir capítulos mientras tengo inspiración.