CAPITULO 3

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Izuku no podía creer lo que estaba escuchando, entre elogios y la oportunidad de su vida. Su ídolo le estaba diciendo que le encanto mucho la canción y que quería adquirirla, pero no solo eso, sino que lo estaba reclutando en su agencia. Cosas que en su vida creyó que podría lograr, pero ahí estaba frente al rubio. Luego de una charla con el peliverde le entrego una tarjeta con sus datos y le pidió que se comunicara con él, que esperaría su respuesta.

El pecoso regreso con sus amigos aun sorprendido por todo lo que acababa de pasar salió de su trance cuando anunciaron al ganador.

La banda había ganado, era un debut seguro. Felicito a sus amigos, era todo maravilloso, aunque no para un cenizo que se fue enojado. Todos le quitaban sus oportunidades, Izuku al notar que se iba fue detrás de él, quería consolarlo como si eso fuera posible.

— Kacchan, espera. Detente. — corrió el pecoso detrás del cenizo.

— Que mierda quieres maldito nerd, vienes a presumir que tus amigos ganaron. Solo aléjate idiota. — Bakugo estaba lleno de furia. Había dado todo y volvía a fracasar y el pecoso inútil le bridaba consuelo como si lo necesitara.

— K-kacchan, yo jamás haría algo así, solo quería venir a ver como estabas y también... —no termino de hablar cuando el contrario lo interrumpió.

— Que te importa si estoy bien o mal, solo deja de seguirme, no ves que te odio. — dicho esto se dio la espalda dejando a un peliverde llorando. Era mentira, él quería a Izuku más que nadie, pero hoy estaba insoportable.

Deku lloro por no poder contarle a su amigo sobre lo que estaba a punto de vivir, quería preguntarle si estaba de acuerdo con que vaya a la agencia de All Might, quería contarle que esa canción era para Bakugo, quería tantas cosas, no pudo decir nada. Tomo coraje y se dijo a si mismo que haría lo mejor par el, sin importar lo que opinara Katsuki. Quien diría que sería la última vez que hablarían.

El peliverde acepto ir a Tokio para instruirse en la agencia, su madre lo apoyo, pero no hablaron de esto con nadie. Así llego el día que partió, lleno de ilusiones y sueños. Dejando a Kacchan atrás, quien se enteraría meses después de que Izuku dejara de asistir a la escuela.

4 años después.

— Y con ustedes, el nuevo Idol. ¡DEKU! — dijo el presentador permitiendo ver a un bello chico de rizos junto a sus bailarines.

La audiencia estaba llena de chicas que gritaban su nombre, el chico llevaba una semana de debutar, su canción fue un hit y encabezo la lista de popularidad, aparte que venía de la agencia numero 1. Comenzó la canción, capturando la atención de los presentes, veían cada movimiento mientras se deleitaban con su voz. Era un artista completo.

— Lo hiciste bien, Deku. — dijo un chico de cabello bicolor, era un cantante que debuto hace un año y pertenecía a la segunda mejor agencia. Era un delirio para las chicas, un joven muy bien parecido y de hermosos ojos heterocromáticos.

— Gracias, Shoto-kun. — ese era su nombre artístico — Nos vemos, tengo que correr — Le dedico una sonrisa y se fue a su camerino, ya que tendría una firma de autógrafos.

El bicolor solo sonrió, recordó que cuando conoció al peliverde fue porque literalmente se le cayó encima.

Flashback

Estaba visitado con su estúpido padre la agencia de Toshinori, por una posible colaboración. Para que no se aburriera con la platica de los mayores, el rubio le dijo que podía conocer las instalaciones. Por lo que salió de la oficina y se fue con la secretaria a dar un pequeño recorrido, ella le mostro algunas cosas y luego lo llevo al estudio de baile. Ahí quedo embelesado con un peliverde que ensayaba, la secretaria le dijo que podía pasar a conocer al chico y que ella regresaría en un momento porque tenia un asunto que atender rápido.

El semi albino dijo que sí, tomo el pomo de la puerta y en eso la música paró, el peliverde se acerco para revisar que sucedió, se dio cuenta que no era su reproductor sino la bocina, por lo que se subió en una silla para verificar que fallo en la bocina. Mientras el bicolor se acercó curioso sin que el ajeno se diera de su presencia.

— ¿Te puedo ayudar? — el tono grave de la voz de Todoroki asusto a Izuku, haciendo que perdiera el equilibrio y terminando encima del chico.

Ambos se miraron cuando se dieron cuenta que, por la caída, se habían dado un "beso".

— Y-yo lo siento mucho, n-no fue mi intención. — dijo preocupado el chico que había caído.

— N-no, fue mi culpa por sorprenderte. — el bicolor se maldijo por ponerse nervioso, pero como no lo haría, había dado su primer beso a ese chico en un accidente.

Izuku se levantó rápidamente y le ofreció la mano al semi albino, el la tomo y se puso de pie, tratando de ignorar lo que creyó que fue una descarga eléctrica cuando sujetó la mano ajena.

— ¿Estás bien? Lo siento en serio, a veces soy torpe. Por cierto, ¿no eres Shoto de Fire entertaiment.? — preguntó en una mezcle de asombro y timidez.

— Sí me encuentro bien, no te preocupes. Ah, sí, soy yo. ¿Y tú eres...? — inquirió el bicolor.

— Midoriya Izuku, aprendiz y estoy por debutar. También puedes decirme Deku, ese será mi nombre artístico.

Sí que fue un buen una buena idea seguir a su padre ese día.

Fin del flashback

Notas del corazón.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora